Omer
Cabello rubio blanquecino, cuerpo delgado estilizado, piel blanca y ojos color miel que brillan al estar bajo la luz del sol. Si Elena Bernardi es una mujer que exuda elegancia con un cuerpo lleno de curvas, Alaya Petrova da una imagen pulcra y sexy con su firmeza al caminar y la seguridad con la que mira a los ojos.
"Al parecer no se ha dado cuenta de quien soy", lo que no me sorprende ya que en ese momento ocultaba parte de mi rostro y ella ocupaba un disfraz, "quería conocer y lastimar a la mujer que se atrevió a destrozar a nuestros hombres y terminé teniendo una noche desenfrenada de sexo".
Con ese traje negro llama la atención de varios de los comensales que visten de forma informal, "toda una contrariedad a como nos conocimos". Después de esa noche me empeñé en buscar información sobre la mujer a la cual debía odiar, pero que me tiene absorto desde que la probé.
Dirige una empresa de seguridad, la cual tiene distintas franquicias en toda Rusia, su familia es conocida por manejar entre espacios de entretenimientos como también empresas de construcción y venta de maquinaria pesada. Con 25 años es considerada una de las empresarias jóvenes más exitosas, conjunto con Elena Bernardi y otros tres hombres.
—Bien, usted es quien solicitó vernos —habla ella mientras se quita las gafas dejando libre esos ojos que me gustan —¿a qué se debe el interés de comprar una de nuestras creaciones? —todo lo relajado que estaba se esfuma y mi cuerpo se tensa sabiendo el motivo real de esta reunión.
—El arma es para uso personal —respondo de forma sincera.
Hace un mes solicité una de las armas únicas que estas dos mujeres crean y venden a un sector muy privado del bajo mundo. Fue difícil llegar a siquiera que me consideren como comprador, pero cuando fui aceptado busqué entre su inventario alguna arma que me llamara la atención y sea de utilidad. La sorpresa fue grande al ver todo lo que había,"no sabía si estaba viendo armas o una ruleta rusa de que peor muerte provocar".
—¿Tan mala son sus armas que tiene que comprarla del enemigo de su organización? —pregunta Elena Bernardi cuando un mesero deja la limonada que había solicitado antes de su llegada.
—No es la calidad lo que me interesa sino la letalidad —ella se sube las gafas mostrándome lo que la hace tan especial —así que no era solo cuentos lo que dicen —sonríe —si posee ojos que son fuera de este mundo —sus ojos violetas realmente llaman la atención y resaltan más bajo el día soleado.
—Una genética única y algo maldita si me permite decirlo —ella le hace una señal a Alaya quien aún seria coloca el maletín que trajo sobre la mesa y lo abre mostrando mi pedido.
—Hoja retráctil —describe —midiendo 15cm de largo, el material está bañado con un componente que puede carcomer cualquier tejido del corte que haga en un diámetro de 5cm de la herida o apuñaladura que se haga —su expresión junto con el toque de orgullo que percibo en su voz, puedo decir con total seguridad que esta mujer le encanta cada cosa que ha creado. Al agarrarla noto que mi mano cubre totalmente el mango.
—El mango es pequeño —comento.
—Es un arma de camuflaje —explica Elena—su uso es solo para casos muy extremos, ya que como vera su letalidad es bastante alta —asiento volviendo a colocar el arma en el maletín —¿Por qué busca tanta letalidad en un arma? —la miro y sé que no solo tengo su atención.
—Porque el simple hecho de reunirme con ustedes ya supone una liana en mi cabeza —expongo una de mis razones.
—Pues fue una liana que escogió por voluntad —contesta Alaya con desdén —ya que usted solicitó vernos.
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ZARINA
RomanceLIBRO 2 - TRILOGÍA AMORES Y MENTIRAS Mi pasado siempre estará marcado por tres cosas; Era el resultado de una aventura. El reemplazo de una hija muerta. El error vivo de Iván Petrova. "Tres cosas a las que fui obligada a aceptar y convertir en mi v...