Cap 1. Sueño echo realidad

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Cap 1. Sueño echo realidad







Paula




-Mamá, voy a salir.- dije chillando a mi madre que se encontraba en la cocina limpiando.

-Vale cariño. No llegues tarde.- se escuchó decir.


Me dirigía hacia el estudio de baile donde me apunté ayer. Hoy era mi primer día y quería pasármelo muy bien.

Como ya veis, me gusta bailar. Me encanta, mejor dicho. Desde siempre he querido ser una bailarina, pero ecónomicamente mis padres no se lo pueden permitir. Así que no he podido apuntarme antes.

Ya tengo mis dieciocho años y desde hace bastante que llevo trabajando todos los veranos y algunos fines de semana en semanas de instituto. Para poder conseguir el dinero y apuntarme a lo que de verdad me importa. Por fin  conseguí lo que necesitaba, me ha llevado varios años. Pero nada más tenerlo en mis manos fui corriendo a apuntarme.

Hoy era mi día, hoy cumplía mi sueño.

Yo era una chica normal, se podría decir que algo pobre. No he tenido la suerte de ser rica como algunas de mis amigas. O mejor dicho algunos enemigos.

Tenía el pelo castaño oscuro, largo. Y me encanta. Es lo que más me gusta de mi. Y otra cosa que me gusta son mis preciosos ojos azules. Me encanta mi mirada como a la mayoría de las personas que me conocen. Siempre me comentan lo bonitos que son mis ojos.

Por lo menos tenía buen físico. Que aunque era algo pobre, no era tan fea.

Llegué por fin.

El estudio se encontraba en el centro de la ciudad. Llegué con la bicicleta, porque como vivía en la otra punta. No me hubiera dado tiempo en venir andando.

Antes de entrar, estacioné la bicicleta en la calle.

Entré y pude observar lo maravilloso que era. Había bastan gente por el alrededor. Se escuchaba música venir por algunos rincones. Estuve caminando y mirando todo. Estaba alucinando, mi sueño se estaba haciendo realidad.

Al dar la vuelta a todo el lugar, encontré por casualidad una sala abierta y también venía música de allí. Me acerqué disimuladamente y miré.

Pude ver que había un chico bailando. Pero de repente se tropezó y cayó. Yo me aguanté para no reír, pero no lo pude contener. Solté una pequeña carcajada. Que nada más darme cuenta, me tapé la boca y me di la vuelta para irme de aquí.

-¡ESPERA!- escuché decir a alguien.

Quería girarme, pero no podía. Algo dentro de mi me estaba diciendo que sería el chico del que me acababa de reír.

-Chica...- volvió a hablar. Así que me tenía que girar.

Al darme la vuelta me encontré con unos ojos azules hermosos. Eran casi iguales a los mios, solo que un poco más claros. Era de pelo oscuro. Y muy guapo. Nunca había visto a un chico así y encima que se interese por la música. La mayoría son de jugar a deportes, como el fútbol por ejemplo. Pero este era diferente. Su mirada era tan sencilla, tan bonita, impresionante, encantadora... Se veía simpático. Y luego me fijé que tenía un pirsing en la ceja izquierda. Eso se veía tan sexy.

PAULA BASTA.

-¿Te pasa algo?- escuché de repente.

Creo que me metí tanto en mis pensamientos que no me di cuenta de que me estaba hablando.

-¿EH?- fue lo único que pude decir.

-¿Qué hacías espiándome?- dijo al cruzar los brazos y esperar una respuesta salir de mi boca.

-Yo no te estaba espiando... Solo estaba buscando una sala libre.- no mentía con lo que dije. Todo fue una casualidad.

-No mientas. Te vi como me estabas espiando y al caerme te burlaste de mi.- recordé el momento y volví a reír. Creo que hice mal. Pero no me podía contener otra vez.- ¿Y ahora de que te ríes?

-Es que ha dado algo de gracia. Pero lo siento, no quería ofenderte.- entonces me volví a dar la vuelta, pero para irme y buscar otra sala para ensayar.

-Perdóname a mi.- me di cuenta que me cogió de la muñeca.- Puedes quedarte en esta sala, yo ya me iba.- me di la vuelta otra vez y me encontré con esa mirada suya.

-No tranquilo, buscaré otra.- dije soltándome con delicadeza de su agarre.

-No hace falta, esta estará libre.

Ahora fue el quien se dio la vuelta para entrar en la sala otra vez. Yo me quedé en la entrada y pude ver que cogió su bolso, una botella de agua y una toalla blanca que había en el suelo en una esquina.

-Ahí está el equipo de música. Lo puedes usar.- dijo señalando hacia la otra esquina de la sala.- Adiós.

Pasó por mi lado, rozandome. Pero entré y dejé mi bolso en el suelo. Cogí el cd que había cogido de mi casa y lo puse en el equipo de música.Antes de comenzar a bailar me recogí el pelo en un moño mal echo. Al empezar la canción me puse en una posición y comencé a hacer pasos de baile.

Me encantaba sentir la música, imaginarme en un escenario, inventando cada paso. Era perfecto.

Al terminar la canción, escuché unos aplausos.

-Lo haces muy bien.- era otra vez ese chico. Pensaba que se había ido.

-¿No te habías ido?- dije al coger la botella que había en mi bolso y beber un trago.

-Si, pero al escuchar la música quería ver como lo hacías y me acerqué.- dijo al entrar y acercarse a donde me encontraba.

-Pues ya terminé, así que te puedes ir ya si quieres.- dije al acercarme y cambiar de canción.

Todavía no me apetecía volver a casa. Quería gastar mi energía en este lugar. Venir todos los días, bailar, me ayudará a desestresarme.

-¿No puedo mirarte?- habló.

-Si puedes, pero no se porque quieres.- la canción volvió a sonar y comencé a hacer todos los pasos que había estado imaginando la otra noche.

Al observarme en los espejos, estaba quedando muy bien. En mi cabeza parecía algo normal y sencillo, pero ahora que lo estoy haciendo con música, parece diferente. Molan muchos los pasos y con la música quedaba de maravilla.

Noté que todavía estaba en la sala mirándome. Reconozco que me ponía algo nerviosa, pero ya no había nada que hacer. El no se quería ir y yo no le quería echar. Por una parte, me agradaba su presencia.

-Eres espectacular.- dijo al acabar la cuarta canción que hice desde que se puso a observarme.

Pasó como una media hora o más. Ahora si había terminado por hoy.

-Gracias.- dije al coger la toalla y secarme un poco. Estaba sudando como un pavo, pero así era al hacer ejercicio. Que para mi, bailar, es un ejercicio.

-Soy Javi, Javier. Siento no presentarme antes.- rió.

-Yo Paula.- guardé la toalla y puse mi bolso en mi hombro.- Ya me voy, adiós.

-Espera... Deja que te lleve a casa.- no era buena idea.

-He venido con la bici, así que no pasa nada.- sonreí.- Adiós.

Al salir de ese lugar y dirigirme hacia donde había dejado la bicicleta, no paraba de pensar en él, que raro. Porque hasta hace poco me ponía nerviosa al estar mirándome. Pero ahora era diferente. Quería volver a ver su mirada.

-¿Mañana nos volveremos a ver?- se escuchó decir tras mía.

-¿Me estas siguiendo?- dije al soltar una carcajada.

-Para nada, solo quería hacerte una pregunta.- era mono, muy mono.

-Si tengo tiempo, vendré.- sonreí.

-Te voy a esperar.- dijo al darse la vuelta e irse.

Estaba flipando. Primero me trataba mal, que porque le espiaba. Y luego me mira como bailo durante el tiempo que estuve allí y ahora viene con eso. No lo entendía. Pero seguiré pensando en eso al llegar a casa. Ahora tenía que llegar, porque ya se hacía tarde.

Al llegar a casa, fui directa a mi habitación. Dejé el bolso sobre la cama y luego me fui a dar una larga ducha. Lo necesitaba.

-Paula, la cena está lista.- se escuchó chillar a mi madre desde abajo.

-Voy.- chillé también.

Salí de la ducha y me vestí. Me sequé el pelo y bajé a la cocina donde estaban mis padres con mi hermano a punto de comenzar a cenar. Solo me esperaban a mi.

-Tardona.- se escuchó decir a mi hermano.

Era dos años menor que yo. Siempre discutimos. Tenemos el mismo caracter por desgracia y chocamos a la mínima.

-Calla flacucho.- dije al darle un golpe en el hombro y me senté al lado de mamá y de él.

-¿Cómo te fue, hija?- ahora habló mi padre.

-Bien, el estudio es hermoso. Mañana intentaré ir un poco más antes para ver si conozco a alguien.- dije sonriendo y dar un bocado.

-Si hoy no conociste a nadie, mañana tampoco.- otra vez la pesada voz de este insoportable pequeñajo.

-Pues para que lo sepas, conocí a alguien.- dije entre dientes.

La verdad que odiaba esto. Todos los días discutimos. Y no solo una vez al día, si no, unas mil veces por ahí.

Mis padres también estaban cansados de nuestra relación. Creo que esperaban que cumpliera los dieciocho para irme de aquí. Pero lo haré nada más conseguir ser una buena bailadora y conocida. Por eso a partir de ahora me tenía que esforzar bastante para conseguir lo que quería.

Al terminar de cenar, me volví a mi habitación. No deseaba seguir cerca de ese maldito niño que siempre tiene que terminar cabreandome.

Me senté en frente de mi escritorio y enchufé el ordenador.

Os preguntareis, como tengo ordenador si soy pobre. Pues no era del todo pobre, pero si nos podíamos permitir tener un ordenador. Me lo compré con el dinero que gané hace un año o así. Así que no había problema en gastarme mi dinero en lo que quería.

Entré en todas mis redes sociales y como quería curiosear. Entré en buscas amigos, amigos de amigos y puse Javier.

Al cargar la página, me salieron unas diez personas con el mismo nombre.

Empecé a buscar y BINGO. Lo encontré. Y le di a agregar amigos.

Se que parece algo raro agregar a un chico que apenas conoces, pero el fue el que me buscó a fin de cuenta. Pues ahora cambié de papel. Lo busqué yo.

Justo iba a cerrar el ordenador e ir a la cama. Pero alguien me habló en el chat. Y que casualidad, era el. Ya me había aceptado.

Javi: Holaaa, no sabía que me ibas a buscar tan rápido :)

Yo: No te emociones, me aburría, por eso te busqué ^^

Javi: Será eso entonces.. pero me alegra tener como amiga.. xdd

Yo: Ya claro, bueno me voy. Adiós

Javi: Espero verte mañana :P

Yo: Pues hasta mañana entonces, pesaditoo jeje

Javi: Buenas nochess!


Y apagué el ordenador.

Que conversación más rara. Esto era algo difícil de creer. Nunca me sentía tan rara. Pero bueno, mañana ya pensaría mejor las cosas.

Me puse el pijama y me eché en la cama. Al darme cuenta, ya me había dormido.



Día siguiente...


Me desperté gracias al estúpido de Pablo. Que vino a marear. Un día de estos lo mataré. (Es en plan coña) Pero de verdad que no aguantaba esto. No tenía ningún derecho a venir a despertarme.

-Despierta dormilona.- dijo unas mil veces, estaba sentado a mi lado.

-Imbécil.- dije al coger una almohada y tirarsela.

-Yo también te quiero.- soltó una carcajada.

-LARGO.- chillé entre dientes.

Ahora mismo deseaba levantarme y cogerle de la oreja. Llevarlo a la quinta puñeta. Que pesadilla de hermano me había tocado, por dios.

-Mamá dijo que te despertara, porque te vienes con nosotros.- recapacito, que pesadilla de familia me había tocado.

-No tengo ganas, tengo sueño. Ir vosotros.

Me tapé con las sabanas y cerré los ojos para intentar dormirme otra vez. Pero por desgracia, no pude.

-Ha dicho que te levantes, tonta.- dijo al coger las sabanas y tirarlas.

Para su edad tenía bastante fuerza.

-Ahhhhhhhh...- chillé con todas mis fuerzas.- Vete de aquí lagartija.- pero no me hizo ni puñetero caso.- Te he dicho algo, dejame dormir.

-Que no.- abrió las cortinas de mi habitación y noté la luz del sol pegando en toda mi cara.

-Cuando me levante, te aconsejo que corras, porque te mataré.

No había manera.

Me tuve que levantar. Darme una rápida ducha y arreglarme. Al bajar me encontré con mis padres en la puerta esperándome. Pablo estaba ya fuera, subido en el coche. No se donde coño nos íbamos, pero odio este día. Yo que estaba feliz, iba a descansar durante bastante tiempo, iría a ver que hace María y luego para el estudio. Pero no. Me cambiaron los planes.

-¿Dónde vamos?- pregunté al sentarme detrás, al lado del idiota.

-A casa de tu abuela.

Que bien. Pensé.

Por lo visto, hoy iba a ser un día aburrido.

Cuando llegamos, bajé lo más rápido que pude. Mi abuela nos estaba esperando en la entrada. Le di un abrazo y entré en la casa, sin fijarme que alguien había.

-Paula, ¿ya conociste al nieto de Pepa?- dijo mi abuela al aparecer, yo estaba sentada en el sofá.

Pepa era una de las amigas de mi abuela, también eran vecinas.

Negué con la cabeza, por su pregunta. Que no entendía muy bien el porqué.

-Hol..a..- dijo alguien.

Al levantar la vista, me quedé sorprendida.

Aquí el primer capi!!! Espero q os guste.. Espero a partir de ahora, ir subiendo cada vez que pueda un besitoo,, espero sus votos y comentarioss! Por cierto mi blog está en mi perfil, entrar pq subí la foto de Javi.. Y Paula es la chica de la portada:)

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