La pareja regresó a su habitación, donde la pasión y el amor se fundieron en una danza íntima y apasionada. Copia mostraba su lado más dominante, pero también cuidaba y protegía a Ann con ternura y amor. Su conexión se profundizó aún más esa noche, sellando su compromiso mutuo de apoyarse y amarse incondicionalmente.
Las semanas pasaban y Copia se llenaba de trabajo, el ser Papa era algo mas estresante de lo que pensaba. Ser el Cardenal era frustrante pero ser el Papa lo era más, mas aún cuando no tenía algún tipo de asistente fijo. No habían mas sucesores, lo que causaba que él fuera el único ahí. Era, raro, hacía semanas que no veía Nihil ni a los anteriores Papa, tenía el extraño presentimiento de que algo habría pasado en los momentos en que estuvo ocupado pensando en su trabajo. Ann lo acompañaba en su oficina, ella leía un libro en el mueble de la habitación mientras él se ocupaba de escribir algunos informes de petición acerca de los gastos monetarios del castillo. Suspiro pesadamente y se quito los lentes que usaba ocasionalmente dejándolos en la mesa. Se recostó en los reposabrazos de la silla y volteo en dirección a Ann.
- ¿No te parece raro no ver a Nihil últimamente? -Ann sin dejar de ver el libro respondió.
- No creo ¿Por qué lo dices?
- Me preocupa no verlo -Ann le llamo la atención sus palabras y soltó una risita, dejo de lado su libro y lo volteo a ver.
- Que te preocupa no verlo, ¿a ti? -le sonrió vacilando- Nunca te ha importado Nihil, ¿y te preocupa ahora?
- Solo presiento que algo malo le paso, además, de repente los otros Papa se marcharon sin decir nada. Siquiera estuvieron en el cónclave, es tan... Extraño, Ann.
Ella medito por unos momentos sus palabras; ahora que lo pensaba, sí, era extraño. Nihil y los otros Papa desaparecían repentinamente y además Sister no decía nada al respecto, se le veía tranquila. Después, recordó los problemas anteriores que había vivido con Sister y la conversación, en su mente no dejaba de pasar aquellas palabras "Un reinado caerá, y otro alzará". Cayó en cuenta de las palabras, ¿y si en realidad si había pasado algo? La extraña conversación entre Sister Imperator y Special Ghoul, la manía por proteger tal información, la de repente desaparición de los Papa y... La subida al poder de Copia.
Un reinado caerá y otro alzará
Ah sí, estaba pasando algo y de eso estaba segura. No podría estar sobre pensando la situación, era tan raro que tenía que ser verdad a fuerzas. Y si, ¿habían muerto? el pensamiento llego a su mente invadiéndola de preguntas y preguntas.
- Es extraño, sí -lo miro a los ojos- Deberíamos ¿preguntarle a Sister?
- Iré ahora mismo, no quisiera quedarme con la duda -Ann asintió, Copia se levanto y tomo camino hacía la oficina de Sister.
Quedo pensativa ante la situación, nuevamente el sentimiento de incertidumbre llego a ella. Le causaba ansiedad lo que pudo pasar o estaba pasando, quizá debía hablar con Copia sobre la conversación que tuvo con Sister hace meses, o quizá no. Debía preocuparse o seguir normalmente... Estaba convencida de que paso algo preocupante pero le llegaba la idea de que podría que estaba sobre pensando las cosas. Quizá solo era una paranoica con ideas locas que se le venían a la cabeza. Debía mantener la mente ocupada para no pensar mas locuras. Tomo un sorbo del jugo que tenía en la pequeña mesa frente al sillón y empezó nuevamente su lectura, tratando de desviar sus pensamientos. Paso una larga hora hasta que llego Copia, con la cabeza gacha y callado, parecía tener la mente en otro lugar, lo que le preocupo a Ann. Estaba pensando en lo peor, quizá y solo quizá si habría pasado algo malo. Copia se sentó al lado de Ann aún mirando hacía el piso, alzó el rostro y la miro durante unos momentos donde mantuvieron un contacto visual fijo. Copia la tomo del brazo y la obligo a abrazarlo, ella acepto a pesar de la confesión.
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A la Cima del Poder - Papa Emeritus IV FanFic - LIBRO 2
FanfictionLIBRO 2 Desde abajo, en sombras despreciado, un alma audaz en busca de su voz, asciende sin cesar, decidido y honrado, a la cima del poder, donde hallará su voz. Cargos menores no frenaron su pasión, sueños ardientes lo llevaron a crecer, hasta que...