Warakung

Capítulo #17: Precipitación

Pasaron varios días en los que la Cazadora evitó la cercanía total de la Bombera, pero eso no le era suficiente para no recordar esa rara sensación que la hacia plantearse un ligero cambio en su misión.

Quizás podía ser más sutil, quizás podía desaparecer los rastros de sus presas para evitar esa sensación.

-¡Pfff! ¿Y dónde queda la diversión?

Po iba conduciendo hacia su nuevo pasajero y por ende, su siguiente víctima.

La Cazadora podía imaginar como sería la siguiente muerte, tenía un sin fin de ideas que corrían su mente.

¿Un infarto provocado? ¿Un terrible choque de autos? ¿Un casual oso sediento de humano?

La sonrisa de la Cazadora se esfumó a la par que sus pensamientos cuando tuvo que frenar de golpe cuando un auto se precipitó por la baranda en el mismo puente donde Calle había ayudado a esas personas.

Po observó el panorama.

El auto cayó al lago tras esquivar otro vehículo que venía en dirección contraria. Varios autos se detuvieron en el momento.

Po se bajó del taxi al observar que todos hacían dicha acción, pero no se acercó al auto azul que venía en dirección contraria como todos. Solo permaneció recostada de su taxi, tampoco entendía que hacían esos asquerosos humanos acercándose cuando ninguno de ellos parecía ser apto para resolver la situación.

-¡Mami!

Un peculiar sollozo atrajo la atención de Po, quien se despegó de su auto en busca del origen.

-Tranquilos hijos, estaremos bien...

Po cerró los ojos cuando su mirada encontró la baranda rota y la ruta del sonido.

¿Por qué todos estaban preocupados por el asqueroso humano en el auto y no habían notado la verdadera tragedia?

La Cazadora podía sentir la corriente en sus venas mientras se acercaba con un puño cerrado hacia el causante del accidente, pero se detuvo cuando sus oídos volvieron a captar al sujeto con los niños.

-Mamá estará bien... alguien nos sacará de aquí lo prometo.

Po podía escuchar como el padre golpeaba alguno de los vidrios del auto.

Po suspiró y se acercó al borde de la baranda rota mientras se quitaba la chaqueta.

Al momento no le preocupaba que alguien viese su ser, por alguna razón sentía que lo correcto era ayudar a esos humanos.

-Mami, mira esa chica se va a tirar. -Po pudo escuchar a una niña llamar la atención de su madre, pero estaba decidida.

La Cazadora se dejó caer al dar un paso al frente en el aire.

Varios curiosos se acercaron a la baranda olvidando al sujeto culpable, pero nadie caía.

Unas cuantas gotas salpicaron en el agua donde se percibía escasamente las luces rojas del auto azul.

Po se detuvo al lado de la puerta trasera donde iban dos pequeños de a penas diez y ocho años. Su padre intentaba salir con todas sus fuerzas, pero no le era posible salir y el agua que los cubría casi por completo no dejaba de subir.

La madre de los niños permanecía inconsciente, los niños intentaban aguantar el mayor tiempo posible fuera del agua al pegar sus rostros al techo del auto.

Po intentó abrir el auto, pero su mano traspasaba la manilla del auto. La Cazadora no podía mostrarse frente a los humanos y menos de tal forma. Intentaba salvarles la vida, pero si ellos la vieran transformarse sería todo lo contrario.