Señora Pimentel

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Alicia.

-Lo haces excelente mi vida-Exclamó Erick cuando por fin bajé del escenario después de mi interpretación del cascanueces-

-Gracias-Sonreí mientras me tomaba ligeramente de las mejillas y me daba un beso tierno-

Me sentía tan plena en este momento, que no podía dejar de pensar en lo feliz que me sentía, mamá no estaba aquí pero estaba Erick y era la única persona más importante que podía estar aquí.

-Ve a cambiarte, te espero y te invito a cenar preciosa, ¿Qué dices?-Sugirió cuando nos separamos, sin dejar de tomar mis manos-

-Si, eso me encantaría mucho-Reí emocionada e hice lo que dijo-

Fui casi corriendo  a los camerinos mientras todas las personas que se encontraban ahí me felicitaban por mi grandioso ballet.

Llegué a mi camerino y me cambié lo más rápido que pude, no quería esperar para estar con Erick y tampoco quería hacerlo esperar.

Una vez que estuve lista, tomé mis cosas y abrí la puerta del camerino para salir eufórica nuevamente en busca de Erick.

Pero me sorprendió ver un enorme ramo de rosas rosas frente a mi.

-Oh-Exclamé y me detuve al instante-

-Sorpresa linda-Joel quitó el ramo de su cara y me permitió verlo-

-¿Qué haces aquí?-Pregunté de mala gana-

-Sólo vine a felicitarte, eres una bailarina maravillosa, ¿Qué sigue, Odette?-

-Gracias y si, sigue Odette del lago de los cisnes-Me crucé de brazos-

-No te pongas así cariño, sólo vine a darte el presente-Me entregó el ramo y lo tomé dudosa-Y veo que aún no rompes con Erick-

-Ya basta, no voy a caer en tus trampas, no tienes con que chantajearme para que lo haga-Dejé caer su ramo al suelo y me fui chocando su hombro-

-Aún no, pero no te gustaría ver que le pasara algo grave como un accidente en auto, ¿O sí?-

Me detuve al escuchar sus palabras y me di media vuelta para mirarlo.-

-¿Qué?-Pregunté sin aliento-

-Lo que escuchaste-Rio-

-No te atreverías-

-¡Ay por su puesto que si!-Exclamó divertido-Pero lo que quiero que hagas es que lo dejes, así de sencillo, que no llegue más lejos porque si lo haces, no sólo te haré daño a ti, sino también te vas a quedar viuda-

-Ya basta Joel-Dije cansada-Quédate con todo, quédate las malditas notas, quédate a mi madre, quédate todo el dinero del mundo y ya déjanos en paz, Erick no te ha hecho nada-

-¡No, si me ha hecho!-Exclamó molesto y se acercó amenazante a mí-Todos lo han preferido más a él, siempre ha sido así-

-¡Eso no es culpa de Erick, carajo!-Grité molesta-

-¡Si lo es ,maldita sea!-Imitó mi tono-Y no voy a descansar hasta que al fin logre quitarle todo-

Joel no dijo nada más y se fue molesto de ahí.

Yo tragué saliva pesadamente, tenía que encontrar una manera de decirle a Erick esto que estaba pasando, que Joel me tiene amenazada con su vida y tengo miedo...

El sonido de la alarma me despertó de una manera sobresaltada y comencé a toser fuertemente porque sentía que me ahogaba.

Otra vez, otra vez con esos sueños tan raros, que parecieran ser más de una vida pasada y donde de nuevo me pintan a Erick como el bueno y a Joel como el malo.

Nunca Te Olvidaré |E.B.C.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora