Mi Pequeño Dragón (Dramione)

novios (parte 2)

Dos semanas Pasarón y Draco poco a poco estuvo mejor gracias a los cuidados de la castaña quien cuido de sus heridas cada mañana y cada noche antes de dormir, volviendo un poco más íntima su relación, o por lo menos quitando ese odio inexplicable que se tenían los dos, descubriendo que tienen más en comun de lo que ambos esperaban.
El castigo de ron en las cocinas de Hogwarts ya estaba acabando y esta vez se disponía a al fin terminar con lo que debió hacer hace bastante tiempo.

Como cada mañana Hermione bajo con su uniforme, puso comida para Crookshanks quien dormía plácidamente en el regazo de Draco, mientras él leia un libro de pociones.

- Buen día Malfoy - lo mira y se sonrie al ver que el no responde. - supongo que aun no aprendes modales.

- Granger, no olvides tus plumas que estan en la mesa frente a la chimenea. - dice el rubio sin despegar su vista del libro.

Hermione se fue hasta la mesa, tomo sus plumas y los tinteros y los guardo en su mochila, bajo la sutil mirada del rubio quien la observa de reojo. Se volteó al ver al chico frente a sus ojos que estaba cambiado por su uniforme pero aun con sus libros a un costado sin guardar nada.

- Ya me voy Crookshanks - lo carga en sus brazos y besa su cabeza - te voy a extrañar, no salgas de la torre con nadie - mira al rubio quien la seguia ignorando - y tu no lo saques Malfoy.

- ¿que te hace creer que yo saco a la bola de pelos Granger? - baja el libro y la mira - que el me siga por que se queda la puerta abierta no es mi culpa.

- mágicamente desde que se hicieron amigos, olvidaste como cerrar la puerta. - se cruza de brazos.

- tu lo explicas mejor que yo - le cierra el ojo y ella rodea los ojos.

- tu tienes prohibido sacarlo, incitarlo y sugerirle salir por esa puerta - apunta a Draco y luego al gato- y tu tienes prohibido seguirlo o dejarte sacar.

- por favor Granger, eres muy exagerada - rodea los ojos - la bola de pelos y yo solo nos divertimos.

- si, pero se divierten aruñando personas Malfoy - se cruza de brazos - prométeme no sacarlo hoy, y te dejaré sacarlo la semana que viene. - los ojos del rubio brillan.

- trato hecho - toma su mano y la mirá.

- ¿por que no hoy? - ella se sienta junto a Draco en el sillón.

- hoy pansy le va a hacer su traje de gala para el baile y no quiero que le pruebe ese traje tan horrible lo diseño Ginny, Luna escogió las telas y Pansy lo Cosío a mano y esta mal hecho - Draco hace cara de asco.

- bien, te lo juro - mira al gato - tampoco es que quiero que la bola de pelos haga el ridículo, para eso esta Weasley y sus trajes del siglo pasado. - dice burlesco y Hermione se rie bajo.

- ya me voy, adios Crookshanks - acaricia su cara.

- oye Granger, ¿y no es lo mismo la semana que viene con la bola de pelos? - ella niega.

- podre buscarles las palabras sutiles para decirles qué esta mal hecho.

El rubio miró a la castaña quien salió de la sala común que comparten. Guardo las cosas y salió caminando tranquilamente atrás de ella, asegurandose esta vez de que la sala común este bien cerrada.

Exactamente a las 12 del medio día, los anuncios del baile de san valentin se dieron a conocer. Mientras las chicas gritaban emocionada, los chicos se quejaban por tener que volver a usar sus ridiculos trajes e invitar a una chica al baile.

Aunque gracias a las ideas de los premios anuales las interrupciones de clases esta vez no fueron necesarias. Siendo Snape quien mas disfruto de no tener que soportar a adolescentes hormonales entrando a su salon junto al coro. A las 1 de la tarde todos estaban reunidos ya en el gran comedor, almorzando y disfrutando de una charla con sus amigos.