✧♪♬ Jungkook tiene una extraña forma de desmostrar su amor por Yoon Ji Ah, quien más de una vez le ha hecho ver que ella siempre lo vera como un buen amigo.
Jungkook no acepta el rechazo de Ji Ah, así que esta dispuesto a todo con tal de tenerla y p...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jeon Jungkook.
Jamás en toda mi vida me había sentido tan bien de hacer algo malo en mi vida, esto no se comparaba con el hecho de hacerle miserable la vida a las personas que odiaba o de acabar con ellas como normalmente lo haría. El hecho de hacer que Ji Ah naturalmente se enamorará cada vez más de mi era lo mejor del mundo.
Luego de rogarle y rogarle para que salieramos al jardín del castillo finalmente acepto. Estaba seguro de que no pasaba del medio día, así que custodiados por Yoongi los dos salimos al jardín, en dónde nos sentamos en aquella pequeña mesa con una sombrilla enorme que nos tapaba del poco sol que había ese día.
Ji Ah miraba de un lado a otro alerta por si algún otro hombre armado además de Yoongi aparecía o quizás Taehyung, a quien al parecer le había desarrollado una especie de miedo, porqué cada vez que lo veía unos nervios enormes la atacaban aunque él estuviera a metros suyos.
—¿De verdad crees que fue buena idea? —siguio mirando detrás de mí que era justo en dónde se encontraba Yoongi.
—No, nos van a hacer nada tranquila —le sonreí para tratar de calmarla. —El hombre del otro día tampoco es malo.
—Lo dices, como si hace unos días no te hubieran dado la golpiza de tu vida —se dejó caer en la silla con un suspiro.
—Aguantaria más de una golpiza por protegerte.
—No se trata de que me protejas solo a mí, no quiero perderte Jungkook —nego con la cabeza mordiendo su labio y juro que yo sentí a mi corazón desbordarse de mi pecho. —No sé qué haría aquí sin tí...
—¿Y cuando salgamos de aquí? —ella me miró sin comprender en absoluto mi pregunta. —¿Cuándo salgamos de aquí, todavía vas a necesitarme igual?.
Porqué si no era así, entonces no sé qué haría, además ya no me quedaba mucho tiempo. Le prometí a Taehyung que solo serían tres meses, de los cuales ya solo me quedaban dos y aún no lograba que ella me confesara el mínimo apice de sentimiento por mi. Aunque no era tonto, sabía perfectamente que mis técnicas de seducción eran efectivas, últimamente se la pasaba pegada a mí, de vez en cuando me dejaba tocarle más allá del muslo o incluso disfrutaba mis caricias involuntarias en su cintura, sin mencionar que ayer luego de que ella saliera de la ducha y yo entre al baño, espie un poco viéndola vestirse y sé que ella se dió cuenta. Sé que disfruto, que yo la viera. Que viera, que era solo para mí. Mía, mía.
—Voy a hacerlo —sonrio en grande. —Voy a necesitarte, que quizás busques una y otra forma de deshacerte de mí.
—Jamas haría eso —me puse de pie y tome sus manos para que ella lo hiciera conmigo. Pegue su cuerpo al mío y la tomé de la cintura mientras nuestros rostros quedaban a centímetros. —Si supieras que lo único que yo quiero es...
