✧♪♬ Jungkook tiene una extraña forma de desmostrar su amor por Yoon Ji Ah, quien más de una vez le ha hecho ver que ella siempre lo vera como un buen amigo.
Jungkook no acepta el rechazo de Ji Ah, así que esta dispuesto a todo con tal de tenerla y p...
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Jeon Jungkook.
Cuando la ví salir de nuevo al patio con una sonrisa, supe que todo estaba bien y que no había de que preocuparse. Lo que significaba que Taehyung había hecho su trabajo a la perfección y que su actuación de la había creído por completo.
Ji Ah corrió hasta mi cuerpo y me abrazo por la cintura mientras yo dejaba un beso en su frente, tal como lo hice segundos antes de que ella se marchará. Aspire el olor de su cabello, a pesar de que el shampoo que nos daban aquí no era el mejor, seguía conservando ese olor tan característico de ella, dulce y adictivo.
Levanto la cabeza y me miró mientras yo llevaba una mano a su mejilla y dejaba caricias cortas con mi dedo pulgar.
—¿Te hicieron algo?.
—No —nego con la cabeza y claro que lo sabía o de no ser así, estuviera como un loco. —Ese hombre fue muy amable.
—Bueno el, no es malo —negue con la cabeza pero ella hizo una extraña mueca con su boca.
—¿Entonces por qué te golpeó?.
—No fue el, lo hicieron sus hombres —me excuse rápidamente dándome cuenta de mi error. Joder Jungkook, se supone que estás secuestrado y odias a todos aquí. —¿Deberíamos volver?.
—Seria lo mejor —susurro y yo asentí. Tomados de la mano y siendo seguidos por Yoongi, los dos nos dirigimos de nuevo a la habitación.
Ya no había señales de Tae por lo que supuse que se había marchado y ahora solo debía esperar a que anocheciera para que llevarán la cena. En el rato que Ji Ah entro a hablar con Taehyung le expliqué a Yoongi lo que hariamos esta noche. Así que ahora seguramente estaba pasándole el mensaje a Taehyung.
Era algo muy simple, a la hora que el trajera la cena lo haría con algo especial en el plato de Ji Ah, uno de esos somniferos que usamos cuando tuvimos que secuestrarla, de esa manera ella se quedaría dormida y yo podría salir y regresar sin problema alguno y que no lo notará. Desde hoy esa iba a ser nuestra forma de escape cuando alguna urgencia se presentará y yo tuviera que salir de aquí.
Al llegar a la habitación Yoongi nos encerró y Ji Ah se dejó caer en la cama mirando la poca luz que entraba por la ventana. Yo me deje caer a su lado y miraba el techo mientras jugaba con mis manos sobre mi andomen.
—Jungkook —me llamo haciendo que me girará a verla. —Sabes... Estar aquí contigo y tenerte todos los días hace que extrañe menos el mundo de allá fuera —termino por confesarme con una sonrisa torcida.
Eso es justo lo que quiero cariño, que te des cuenta de que solo me necesitas a mí para ser feliz, que incluso podemos quedarnos aquí y olvidarnos de todo allá fuera, de todo lo malo que te rodea.
