❝Maldición o silueta, lo que importa es que mantengas tu sonrisa por siempre.❞
→ Miku no conocía el cariño, el amor, la amistad, la felicidad, ni ningún sentimiento afectuoso que caracterizara a los humanos. Y es que era un híbrido perdido en el cam...
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EL PRIMER ENCUENTRO.
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La pequeña figura que permaneció escondida hasta el momento tras el albino, asomó finalmente la cabeza para mirar con curiosidad en esos ojos verdes a su alrededor. Por petición de Tsumiki, quién había insistido en que su hermano menor debía hacer amigos de su edad, Satoru accedió a presentarle a Megumi la pequeña niña que comenzó a rondar por la escuela de hechiceros desde unas semanas atrás.
Esta aún no estaba muy acostumbrada a los humanos exceptuando a su madre, al director y a Satoru, pero su padre había insistido en que sería bueno para ella comenzar a interactuar con otros. Y aunque no estaba segura de sí debía esconder sus cuernos o no, decidió hacer caso al albino y presentarse como tal. Aún así, lo primero en lo que Fushiguro se fijó no fue en el curioso aspecto de la contraria, sino en la expresión de desagrado que había en su rostro.
━¡Megumi, vengo a presentarte a una persona muy especial! Espero que os llevéis bien, porque...━comenzó a decir el ojiazul, pero pronto el pelinegro se dio cuenta de que ella no lo estaba mirando con disgusto a él, sino al adulto presente. En cuánto tuvo la oportunidad, la pelirrosa le sacó la lengua al mayor cuándo no la estaba mirando, pero evidentemente este se dio cuenta.━Miku-chan, ¿cuántas veces tengo que decirte que está mal burlarse de mí?━le preguntó Satoru mientras tiraba de su mejilla para regañarla.
━¡Pero papá dice que está bien burlarse de los humanos, sobre todo de ti!━respondió dándole un golpe en el estómago que lo hizo retroceder.━¡Y nunca me compartes tus dulces, lo tienes merecido!━añadió cruzándose de brazos, haciendo que Gojo comenzara a temer del fuerte carácter de su futura alumna desde una temprana edad. Y para su mala suerte, el padre de esta no se encontraba allí para controlar los impulsos emocionales de su hija.
━Agh... voy a tener que conversar con Hayato, te consiente demasiado...━murmuró Gojo aún dolorido por el golpe, a lo que la ojiverde lo miró mal.
━Seguro que se merecía ese golpe.━dijo Megumi, viendo por primera vez a Satoru sucumbir ante el golpe de alguien más.
━¿A qué sí? Mi papá me ha enseñado a golpear así, es el más fuerte e inteligente de todos.━respondió la pelirrosa orgullosa del mayor. Estaba más que claro que era una niña de papá.
