El Amor No Existe

37.- Amor

Sasuke

-¿En que piensas?

-¿Qué tan cursi sería si digo que en ti?

-Mucho, pero definitivamente no me molesta. -le dí un pequeño beso en la frente a Naruto y regresé a mi lectura. -¿Vas a seguir mirándome todo el día?

Estábamos en su habitación, y llevaba más de una hora leyendo mientras ese dobe no hacía más que observarme y luego fingir que estaba haciendo tarea.

-Nunca me cansaría de mirarte, cariño. -me guiñó un ojo y sonrió, el tonto no parecía darse cuenta de todo lo que causaba en mí cuando sonreía así. -Además yo te regalé ese libro, al menos quiero asegurarme de que te guste. -tomó mi mano y depositó un beso cariñoso, y volvió a sonreír con satisfacción cuando mis mejillas se sonrojaron.

-Ni lo intentes, cielo, no me vas a distraer, tienes que hacer tu tarea y yo quiero leer mi libro. Además; Shikamaru nos matará si vuelve a encontrarnos sin ropa en la habitación.

-¿Por quién me tomas, Sasu? Yo no he mencionado nada de eso.

-Como si no te conociera, dobe... Empiezas a hablar y sonríes justo como ahora, siendo tan, tan tú, haces que mi corazón tiemble, y en cuanto me doy cuenta son mis piernas las que terminan temblando.

Naruto soltó una carcajada y sostuvo mi rostro, juntando nuestras frentes.

-¿Tienes idea de lo adorable y precioso que te ves reclamando porque me gusta seducirte?

-Lo estás haciendo justo ahora. -señalé con indignación, antes de que me diera un pequeño beso. -Deja de tratar de distraer-. Fuí interrumpido por sus labios de nuevo. -Ni creas que-. Obviamente no me dejó terminas la frase, y está vez alargó más el beso. -Tonto...- murmuré cerca de sus labios y devolvió el beso con la misma emoción.

Dejé que siguiera besándome, y se separó de mí solamente para lanzar sus libretas al piso y recostarme en donde estaban, quedando él entre mis piernas abiertas.

-Eres un desastre. -reí, abrazándolo mientras dejaba besos en sus mejillas.

-Tu desastre, me has hecho adicto a ti, deberías asumir tus actos.

-Bueno, supongo que tendré que tomar la responsabilidad del dobe que te volviste por mí -suspiré dramáticamente, y le dí un beso.

Nos quedamos abrazados bromeando y hablando de tonterías, hasta que Shikamaru abrió la puerta y asumió otra cosas.

-¿Cómo carajo es qué siempre están tan cachondos ustedes dos? No, no quiero saber, joder, existen los hoteles ¿saben? Me niego a volver a toparme con sus manchas de "yogurt" en el piso, y ni siquiera quiero saber cómo llegó al espejo la de la vez pasada-reclamó cubriéndose los ojos.

-Oye, dramático, ni siquiera estábamos haciendo eso, puedes descubrir tus ojos, estamos vestidos. -se burló Naruto, y me dió un pequeño beso en la frente antes de quitarse y sentarse junto a mí.

-No me pueden culpar, son tan empalagosos que temo que terminaré enfermo de diabetes por convivir tanto con ustedes.

-Oh sí, mi Sasu es tan dulce que quiero comerlo a besos todo el tiempo.

Me reí mientras Shikamaru solamente nos daba una mirada ofendida.

-Cuando se casen no habrá otra persona mejor que yo para ser testigo -murmuró rodando los ojos.

Ambos nos quedamos callados y sonrojados, pero antes de que pudiera pensar mucho en lo que dijo Shikamaru, la puerta fue abierta por Temari.

-¿Y bien? Date prisa o no te ayudaré con tu tarea. Oh... Hola Sasuke y Naruto, ¿de nuevo fueron interrumpidos por este perezoso?