24.- Sin Dudas

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Sasuke

Pude ver la emoción y excitación de Naruto cuando le di total permiso de hacer otra cosa.

Y sin dudar ni perder tiempo me pegó a su cuerpo, recorriendo mi pecho con una mano y mi trasero con la otra.
Pasé mis manos por su cuello y lo atraje hacia mí para besarlo.

Estuvimos entretenidos en ese húmedo y lujurioso beso hasta que se nos agotó el oxígeno y Naruto se separó de mis labios, posando sus labios en mi barbilla y succionando con delicadeza, mientras yo soltaba jadeos y suspiros.

Fue descendiendo con besos húmedos hasta mis pezones, y luego de darme una mirada pidiéndome permiso para lo que quería, asentí despacio y sonrojado.

No hizo falta más para que llevara su boca a mi pezón de derecho pasando su habilidosa lengua por este, mientras con una mano retorcía y masajeba mi otro pezón.

Mordió con fuerza mi pezón al mismo tiempo que lo chupaba con fuerza, no pude evitar gemir ruidosamente, mientras y me retorcía contra su boca, entrelazando mis dedos a su cabello y acercándolo más a mi pecho, casi rogándole que siguiera.

Retiro con lentitud sus labios de la zona que ya se encontraba bastante rojo, y me miró con una sonrisa lasciva.

- no tienes idea de lo jodidamente lujurioso que luces, estoy seguro que te desmayarías de la vergüenza si te vieras ahora mismo - habló con voz enronquecida mientras una de sus manos seguía retorciendo mi pezón y la otra acariciaba mi erecto miembro por sobre la ropa interior.

- ahh...Naruto...d-deja de jugar - pedí entrecortado acercándome mas él

- pero mi Sasu, lo divertido de esto es jugar - respondió dejando de tocar mi miembro, dirigiendo las caricias a mis piernas - además, como se que esto te está gustando, necesito saber que lo deseas tanto como yo - agregó sonriendo de lado, y comprendí lo que el idiota quería.

- t-te matare después por esto - murmuré sin aliento - Naruto... sigue...y-yo lo deseo, te deseo - hablé con voz suave, acercándome a él, besando y succionando partes de su cuello justo como había hecho conmigo - por favor - gemí necesitado y mirándolo suplicante con mis labios pegados a su pecho y mi mano tocando sutilmente su enorme erección.

- me vuelves tan loco - murmuró más para sí mismo que para mí y sus labios se dirigieron de nuevo a mi hinchado pezón con salvajismo

- ahh...mnh...agh- las caricias y besos de Naruto me estaban enloqueciendo, y el pudor y decencia de los que había hablado cuando se metió en mi habitación quedaron totalmente olvidados. Solo necesitaba que el rubio lujurioso que estaba conmigo me siguiera tocando.

Estaba tan perdido en el placer que mi siquiera note cuando habíamos llegado a la orilla del río.

Naruto tomó mis piernas haciendo que las envolviera en su cintura y nos llevó a orilla de piedra del río en la que se sentó colocandome a mi en su regazo.
Y supongo que el deseo entre nosotros era demasiado, ya que en vez de sentir frío cuando salimos del agua me frote contra el pecho de Naruto, sintiendo un inexplicable calor y necesidad que solo él idiota que atacaba mi cuello a mordida y chupetones en ese instante; podía calmar.

Antes lo hubiera separado en este momento y volver a arrepentirme por abandonar las dudas y dejarme llevar.
Pero ya había tenido suficiente de la tensión acumulada entre nosotros y de fingir que no lo deseaba.

Ninguno de los dos podía mantener las manos y labios lejos del otro.
Y cuando presione mi trasero contra su erección, Naruto mordía mi labio inferior con tal fuerza que sangro un poco, pero lejos de dolerme esto solo me excito más.

El Amor No ExisteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora