El Amor No Existe

22.- Lujuria

Sasuke

Desperté antes de que sonara mi alarma, no había podido conciliar bien el sueño por pensar en el maldito dobe de Naruto.

El día estaba nublado y algo frío, así que me puse una blusa beige de manga larga y sobre está, un abrigo negro, junto con un pantalón de mezclilla y unas botas altas.

Karin a pesar del clima se puso una falda roja, una sudadera ancha color negro y unos botines rojos.

Ambos salimos del dormitorio yendo a nuestras respectivas clases.

Afortunadamente hoy no tenía clase de filosofía, y me ahorraría la vergüenza de ver a Naruto.

Bueno al menos eso creí hasta la hora del almuerzo.

Me dirigía a la cafetería donde me iba a ver con mis amigos, pero fui tomado del brazo con rapidez. Y ya ni siquiera me sorprendí cuando Naruto me pegó a la pared del pasillo y me beso efusivamente.

- t-te dije que el que haya aceptado salir contigo no te da derecho a besarme - me queje recuperando el aliento, aunque yo también había seguido el beso.

- ¿lo siento? Eres tan hermoso que haces que olvide muchas cosas - contestó sonriendo coqueto y divertido

- idiota - murmuré con un leve tono carmín en mis mejillas

- tal vez lo soy, pero hoy vas a desayunar con este idiota - dictaminó mientras me llevaba de la muñeca a la fila para comprar comida.

- ¿y porque habría de acompañarte? Además mis amigos me deben estar esperando - me quejé con fastidio, a pesar de que yo avanzaba con él y no hacía nada por detenerlo

- mi querido amigo Shikamaru ya les debe estar avisando que hoy estarás conmigo - habló con una sonrisa astuta

- maldito dobe ni pienses que me agrada la idea de convivir contigo - conteste resignado a que hoy estaría con él durante el almuerzo.

Luego de pedir nuestra comida, (la cual era una ensalada que tenía más tomate que lechuga para mi, y para Naruto un ramen instantáneo) el imbécil me convenció de almorzar afuera de la cafetería y ahora estábamos sentados debajo de un árbol.

- recuérdame porque estoy aquí afuera contigo cuando debería estar con mis amigos escuchando sus peleas absurdas - hable acomodando las mangas de mi abrigo para sujetar el tenedor

- porque aunque lo niegues te vuelvo loco - respondió Naruto sonriendo orgulloso mientras se acercaba más a mí y le daba una mirada divertida a mi ensalada - creo que tu ensalada de tomates tienen un poco de lechuga - comentó riendo antes de probar su ramen

- cállate, por lo menos es más saludable que lo que pediste - conteste defendiendo a mis tomates

- y menos delicioso - habló risueño ante de que lo golpeara levemente en el hombro - te ves hermoso cuando haces pucheros - habló tomando mi barbilla, acercando su rostro al mío para besarme.

- espacio personal, dobe - mencioné arisco antes de tomar una rodaja de tomate y meterla en su boca, haciendo que se alejara de mi.

- no sabe tan mal, pero preferiría probarlo de tus labios - dijo luego de tragar el pedazo acercándose de nuevo a mi.

- ¿no te cansas de decir tonterías? - pregunté levemente sonrojado, fulminandolo con la mirada

- ¿no te cansas de ser tan tsundere? - me respondió con otra pregunta antes de comer algo de su ramen y darme un pequeño y rápido beso en la mejilla.