El Amor No Existe

6.- Libro

Decidí ir con Shikamaru a contarle mi pequeño “avance”.

—No fue mucho, pero al menos conociste más cosas de él, y está vez no te golpeó. —comentó mi amigo.

—Sí, bueno, tuviste razón, pero ahora dime que debo hacer, necesito quitarme las ganas de follarlo para que pueda pasar a lo siguiente.

Ya llevaba tres días de no acostarme con nadie, pero había estado tan ocupado pensando que hacer con ese teme que ni siquiera pensé en desahogarme con alguien más.

—Está bien, aunque sigo sin entender porque no solo lo haces con alguien más para al menos despejarte un poco la calentura y pienses mejor lo que harás con el doncel.

—Esto ya va mas allá de una calentura Shika, quiero follar a ese doncel hasta que crea en el amor.

—Espera, ¿quieres acostarte con el doncel porque lo deseas o hacer que se enamore de ti solo por joderlo? —dijo con expresión de fastidio el pelinegro.

—Definitivamente quiero follarlo, pero si en el camino pierde esa actitud arrogante y se da cuenta de que él también puede enamorarse sería aún mejor. —le contesté sonriendo maliciosamente.

—Esto es algo bajo hasta para ti, pero te aconsejo que tengas cuidado, no vaya a ser que el que caiga en la “ilusión” sea otro. —me dijo con burla lo último.

—Idiota, no puede ser tan fácil enamorarme, —le respondí riendo—. Además Sasuke solo me atrae por lo sexy que es, sería imposible que me enamorara de él con ese carácter de mierda que se carga. —agregué con seguridad, ya que por muy bueno que estuviera no me enamoraría solo de un cuerpo perfecto y una cara linda.

—Si tu lo dices…


Sasuke

Estaba viendo una película con Karin recostados en su cama, pero no podía centrar toda mi atención debido a que me seguía pensando en Naruto y la especie de plática que tuvimos en la biblioteca.

Era raro que no haya terminado conmigo molesto y huyendo, bueno aunque técnicamente si huí; fue por razones aún peores. Y es que cuando se me acercó y parecía a punto de besarme, una parte de mi deseaba que lo hiciera.
Así que antes de hacer alguna estupidez preferí irme de allí.

Tantos pensamientos estresantes me cansaron, y caí dormido, pensando aún en esos labios cerca de los míos.

•••••

Al día siguiente tuve la suerte (y yo mismo lo evité) de no coincidir con Naruto en ningún momento, pero era inevitable verlo en la clase.

Al entrar inmediatamente me percaté de su mirada sobre mí, pero fingí no verlo y me fui a mi asiento.

El maestro parecía tener una tendencia a llegar tarde.

Mientras leía un libro sentí a alguien acercarse detrás de mí, y supe perfectamente quién era sin siquiera voltear.

Mi cuerpo se tensó cuando sentí que recargaba un poco su barbilla en mi hombro.
No iba a darle el gusto de reaccionar ante él, así que solamente ignoré su presencia esperando que así se fuera.

—“Pídeme lo que quieras”. —murmuró y sentí su respiración contra mi cuello, causando un leve estremecimiento en mí.

—¿Qué?—contesté creyendo que había escuchado mal.

—Es el nombre del libro que estas leyendo, ¿cierto? —me dijo en tono bajo y divertido.

No sabía si sentirme avergonzado o sorprendido, ya que si reconoció el libro fue porque sabía bien que cosas se mencionaban.
Carajo.

Luego de un momento de silencio en donde deseé que el idiota solo se largara, respondí con toda la calma que pude.

—Sí, así es, me sorprende que lo conozcas, o que sepas leer.

—Puedo leer si de verdad me interesa algún libro. Además, mi abuelo escribe novelas eróticas, así que estoy familiarizado en este género literario. —dijo señalando el libro—. Creo que el sorprendido debería de ser yo.


Estuve a punto de apartarme y decirle que se fuera para evitar que siguiera con ese tema, pero por suerte justo en ese momento entró el profesor.

Naruto regresó a su lugar suspirando dramáticamente.

Pero no era Kakashi, sino el profesor Iruka, avisando que el maestro Hatake no podría asistir debido a un resfriado, y como no dejó ninguna actividad o tema nos dieron la hora libre.

Cuando dijeron que podíamos salir fui uno de los primeros en irme, para evitar que Naruto me siguiera.

Me senté en una banca que estaba bajo la sombra de un árbol, pero obviamente no fue suficiente para que ese dobe no llegara solo unos minutos después a sentarse junto a mí.

—Así que, ¿te gusta leer libros eroticos? —me preguntó con una sonrisa cínica, tomando el libro que tenía a mi lado.

—I-idiota, deja eso. —respondí un poco sonrojado.

—Oh, vamos, Sasu, no hay nada que avergonzarse, a mi también me gusta leer esta clase de libros. —me dijo de lo más normal, mientras ponía sus brazos alrededor de mi y me colocaba el libro enfrente para que pudiera leer. —Bueno, ¿podrías leer para mi? —me dijo sonriendo con diversión al ver mi cara de “obviamente no lo haré. —O tal vez, ¿será que te avergüenza leer esto frente a mi? —se burló.

No pensaba darle el gusto de leerle esto, pero tampoco podía dejar que pensara que realmente me avergonzaba por él…
Maldición.

—“me siento hipnotizada, mientras noto las yemas de sus dedos subir y bajar por mi columna”, —leo la parte donde me que quedé, y veo que muestra una cara de sorpresa, ya que seguramente no esperaba que lo hiciera, disfruto un momento de su expresión y sonrió, pero la misma sonrisa se borra y el que se sorprende soy yo cuando siento sus dedos acariciar mi cuello y bajar por la espalda, justo como la escena que acabo de leer.

Trato de ignorarlo, negándome a mostrar que me afecta su cercanía.

—“Sus manos exigentes me agarran por la cintura y me aprieta contra él hasta que me tiene totalmente empalada. —Naruto parece sorprendido al inicio, y luego esboza media sonrisa con diversión, mientras siento su mano recargarse sutilmente en mi pierna.

—Continua, Sasuke. —me alienta apretando mi pierna de manera suave.

Joder, tenía que haber decidido usar shorts hoy. Su piel directamente en contacto con la mía; me estaba causando calor.

—“Grito. Me retuerzo. Voy a explotar. Sale de mí unos centímetros pero vuelve a entrar una y otra vez, colmándome de una serie de movimientos duros y potentes que vuelven a hacerme chillar”

Naruto desliza su otra mano por mi espalda, causando que me estremezca, y pasó saliva nerviosamente.

Lo peor de todo es que me gusta como me toca, y sigo fingiendo que no pasa nada.

—“Cierro los ojos y disfruto del contacto. Cuando abrí los ojos nuestras bocas se encontraron y-

Y fui bruscamente interrumpido cuando el idiota, dobe, pervertido, de Naruto; me besó.

Sentí sus labios moverse sobre los míos. Yo estaba apenas procesando que carajo había pasado cuando sentí su lengua tratando de entrar en mi cavidad bucal.

No tenía idea de que hacer, y cuando sentí una pequeña mordida en mi labio inferior; abrí la boca, cosa que Naruto aprovechó para profundizar el beso.

Y yo…
Yo solo me olvidé de todo razonamiento. Sin pensar en la manera en que esté dobe estaba robándome mi primer beso.

Le permití apoderarse de mi boca por completo, haciendo un débil intento por seguirle el ritmo.

Me sentía tan bien, que por un momento olvidé todo, mientras emociones desconocidas se apoderaban de mí.