Bajo Un Eclipse Lunar #1

V E I N T I D O S

*Este capítulo contendrá fechas para una mejor comprensión*

B L O O D S U C K E R.

E M M A.

13-09-23.

Abro los ojos y enseguida siento el potente dolor que está presente en mi cabeza. Suelto un quejido cuando siento el dolor en las muñecas y cuando abro por completo los ojos, me doy cuenta que estoy en un lugar extraño, amarrada a una silla. Tengo una mordaza en la boca. Aquí hay cosas tiradas, y todo se ve blanco; es un hospital abandonado al parecer.

Miró a mis pies que también están amarrados. Siento algo en mi cabeza y miro por el reflejo de una ventana que está tapada con papel periódico por fuera. Tengo una venda en la frente, pues seguramente es por el accidente y, además, duele y arde al mismo tiempo.

Las ganas de vomitar se hacen presentes y enseguida me asusto porque se que si vomitó ahora, me podría ahogar con mi propio vomito.

Miró a todos lados, y entonces, de las sombras sale una chica pelinegra, con los ojos rojos. «tienen que ser pupilentes»

Se acerca a mi y me quita la cinta, mientras que yo permanezco asustada porque me pueda hacer algo. En lugar de eso, me acerca un balde y lo entiendo. Vacío la sangre ahí, y después de eso me siento más tranquila.

—Sabia que esto estaba pasando —habla. Tiene un acento ruso—. Aysel es muy idiota para darse cuenta. Bueno, no lo es, solo no lo quiere creer. Veo que le importas, y lo entiendo, pero solo puedo ser yo, ¿Lo entiendes?

—¿Quién eres?

—Lo siento, que malos modales tengo —sonrie. Aprecio que es realmente linda—. Soy Jules, un gusto.

—¿Qué hago aquí?

—¿No lo ves? Te secuestre, linda.

—Eso ya lo sé, la pregunta es, ¿Por qué?

—Lo sabrás después —me aleja el balde—. Ahora eso no importa. Tengo algunas cosas que hacer, así que...

Se va hasta unos cajones que hay en una parte del lugar y saca una jeringa con un líquido raro.

—¿Qué es eso? —pregunto preocupada— Déjame ir —intento zafarme, inútilmente.

—No lo creo, y esto es... ¿Para que decirlo? Mejor te lo muestro.

Camina hasta mi y acerca la aguja a mi cuello, mientas que intento zafarme, pero no lo logro. Introduce la aguja en mi cuello y siento el ardor, mis ojos se empiezan a cerrar y pierdo toda noción de mi misma.

15-09-23.

Siento que no puedo respirar y abro los ojos, solo para ver la razón por la que no puedo respirar; estoy bajo en agua y alguien me sostiene para que no pueda salir.

Intento salir con todas mis fuerzas, pero no lo logro y me desmayo.

17-09-23.

—Ten —me ofrece un líquido rojo en una botella.

—¿Qué es esto? Necesito agua, no está mierda. He estado dormida por 4 días.

—No cuatro días, idiota. Tres y medio.

—Como sea, responde la pregunta.

—Sangre, es lo único que tengo.

Me quedo paralizada y ella me voltea los ojos.