7.Secuestro y rescate

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Pasaron un par de días tranquilos, pero todos sabemos que esta situación no podía durar mucho, así que a la mañana del tercero...

-¡Eris!¡Eris ayúdame!- Xarpi corría hacia Eris gritando por ayuda.

-Ey, calma ¿Que te pasa?- Respondió la aludida intentando intuir que ocurría.

-¡Mancha ha desaparecido!¡Y 3 lobos más!¡Por favor ayúdame!- Dijo Xarpi desesperado por encontrar a Mancha.

-¿Cuándo han desaparecido?-

-No lo sé, ayer estaban aquí pero hoy no los encuentro por ningún lado, por favor necesito saber qué Mancha está bien.- Suplicó el muchacho.

-¿Has visto algo raro por aquí que indique por donde desaparecieron?-

-Si... Hay un poco de sangre por allá-

-Está bien, voy a intentar rastrearlos, saldré ahora, Sol, te quedas al mando, manteneos todos juntos, no quiero más desapariciones, está bien?- Dijo Eris.
Ambos asintieron y la loba de pelo negro se marchó a buscarlos, fue siguiendo el rastro de los olores de sus compañeros, de vez en cuando encontraba algo de sangre en el suelo, eso no le gustaba nada porque ella sabía perfectamente que era de uno de los lobos de su manada.
Cuando llegó a donde acababa el rastro, vio en frente de ella algo extraño, nunca lo había visto, era como una choza humana antigua pero esta era mucho más grande y parecía ser de algo parecido a piedra, ese lugar apestaba a humano pero también sabía que sus lobos estaban allí, podía notarlo.

Los humanos le daban un miedo terrible, pero debía rescatar a sus amigos, se armó de valor y entró en ese lugar, para su sorpresa estaba vacío, tuvo un mal presentimiento y estuvo a punto de irse corriendo a buscar refuerzos, pero sabía que los lobos desaparecidos podrían estar siendo torturados por los humanos ahora mismo, así que siguió adelante, recorrió algunos pasillos y vio que el olor de sus compañeros acababa junto a una puerta en una estancia separada.

No dudó y echó la puerta abajo, y en cuanto pudo observar el interior sintió un miedo muy profundo, allí había 5 humanos, que tenían atados con cadenas a sus 4 compañeros, los cuales no podían moverse por sus ataduras, además había pieles de lobo por toda la pared, eso era mala señal. En cuanto los humanos la vieron sacaron unos palos que echaban rayos y electricidad al final, Eris no sabía que era eso, pero también sacaron algunas pistolas y esas si las conocía y sabía lo que hacían, instintivamente la loba gruñó muy fuerte en un intento de asustar a los hombres que estaban allí, y al parecer funcionó, a uno de ellos le empezaron a temblar las piernas y se le cayó su pistola, Eris no perdió la oportunidad y se lanzó para atacarlo y así lo hizo, fácilmente le quitó la vida al primero, pero mientras lo hacía recibió una descarga eléctrica de esos palos raros que no conocía, cayó al suelo un momento pero en seguida se levantó, no estaba dispuesta a perder.

Atacó al segundo y al tercer humano con una velocidad impresionante los cuales gritaron cosas que no entendía, los otros 2 que quedaban vivos dispararon varias veces pero no alcanzaron a Eris, quién después de acabar con los humanos que estaba atacando fue a por el cuarto de ellos, ese volvió a disparar pero la alfa le mordió la mano haciendo así que suelte la pistola, sin embargo con el otro brazo el hombre sacó un cuchillo de su bolsillo y se lo clavó a Eris en el hocico mientras lo movía a los lados de este, la loba soltó un quejido pero le dió un zarpazo al hombre y este cayó al suelo, muerto, con el cuchillo fuertemente agarrado a su mano y lleno de sangre.

Solo quedaba 1 humano, este estaba visiblemente asustado después de ver de lo que era capaz Eris, ella aprovechó eso y simplemente le mordió el cuello, arrebatándole la vida, luego se giró rápidamente para comprobar el estado de sus compañeros de manada.

El último lobo negroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora