• Dificultades •

328 43 9
                                    

El dinero con el que iba a sobrevivir por al menos dos meses y medio, según los cálculos de Jimin se acabó antes de lo esperado, tuvo que pagar algunos trámites para gestionar su Emancipación, necesitaba eso documentos para poder retirar su título de la academia y también para trabajar.

Necesitaba encontrar un trabajo estable que le diera un poco más de estabilidad económica, para que Jungkook tuviera la oportunidad de estudiar sin preocupaciones.

Jungkook trabajaba más horas en la calle para poder llevar un poco más de dinero a casa y poder cubrir las necesidades del rubio.

Mientras de Jungkook se iba todo el día y gran parte de la noche a trabajar, Jimin se la pasaba en casa, tratando de hacer algo útil para ayudar a Jungkook, pero sus esfuerzos muchas veces sentía que eran en vano.

Había arruinado algunos electrodomésticos al no saber utilizarlos, rompió la mitad de los platos que habían en casa y mancho varias camisa de Jungkook al lavarlas con cloro, esas cosas tan simples lo llenaban de tanta frustración. Por otra parte Jungkook moría de ternura al ver los desastres que su novio ocasionaba y aun que muchas veces lo quería disimular el rubio siempre lo atrapaba queriendo ocultar su risa.

La frustración de Jimin podía durar varias horas, pero nada que no pudiera arreglar Jungkook con un par de abrazos y besos.

Jimin no estaba acostumbrado a ser malo en algo y se esforzaba mucho por mejorar en las cosas de la casa, ya que por el momento era con lo único que podía ayudar a Jungkook.

- vamos Jimin, solo son unos fideos - se dijo así mismo mientras intentaba cocinar el último paquete de fideos instantáneos

Jimin leía detenidamente las instrucciones y trataba de recordar lo que alguna vez Jungkook le dijo mientras le enseñaba a prepararlos.

El agua que le puso a los fideos al principio era muy poca y comenzaron a pegarse a la olla por lo que le coloco más pero esta vez fue mucha, ya que comenzó a ver como se habían una más masa, con mucha fe y convicción intento rescatarlos dejándolos cocer un poco más y luego comenzar a añadir las salsas, pero todo fue un desastre y en poco tiempo los fideos eran una masa horrible que comenzaba a pegarse.

Decepcionado apago la estufa y soltó un pequeño grito lleno de frustración, tomó una toalla que estaba cerca de la cocina y la tiro al suelo totalmente frustrado.

- tengo hambre - hablo solo

Salió de la cocina y se tiro al sofá totalmente frustrado, Bam se acerco a el y comenzó a pasar su lengua por su mano al verlo llorar.

No estaba acostumbrado a vivir así y aunque era muy duro según sin arrepentirse de la decisión que había tomado.

Luego de aliviar su frustración con un poco de llanto, comenzó a relajarse en el sillón acariciando a Bam que estaba hecho bolita cerca de el acompañandolo como siempre. La necesidad de comida era cada vez más fuerte, cosa que comenzó a hacerlo sentir cansado y poco a poco se dedo dormido.

Las caricias en su cabello lo despertaron y cuando abrió sus ojos vio a Jungkook sentado frente a el.

- ¡Jun! - dijo feliz de verlo, se incorporo para rodear su cuello en un abrazo y esconder su cabeza en su cuello

Tenía un par de días de verlo, ya que por la necesidad de dinero este se iba muy temprano por las mañanas y regresaba en la madrugada intentando de vender algo y solo se permitía ir a casa cuando lograba que le pagaran lo suficiente.

- ¿estuviste llorando? - preguntó preocupado y este negó con su cabeza - amor, dime ¿que paso? - dijo alejándose de él

- arruine la última bolsa de fideos - dijo frustrado - se que ya me has enseñado en muchas ocasiones, pero sigo arruinandolos

 NEVERMIND | 국민 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora