NEVERMIND | 국민

• La vida con la que siempre soñe •

Muy temprano por la mañana, Jungkook despertó por el peso sobre su cuerpo y sonrió enormemente al escuchar la armoniosa risa de Jimin.

Quien estaba sobre el saltando entre su regazo y su vientre, intentando despertarlo. Y cuando lo vio sonreír comenzó a llenarlo de besos y a saltar más sobre el.

Era un despertar gloriosos y esperaba que la vida estuviera lleno de esos bellos momentos junto a su amado rubio.

‐ Despertaste con mucha energía hoy ‐ dijo Jungkook sin abrir los ojos aún.

- ¡levántate iremos de compras! - dijo emocionado y vio a Jungkook fruncir el ceño ligeramente

- ¡no quiero ir de compras! - dijo haciendo un pequeño berrinche ‐ ¡odio ir de compras! - agrego

- ¡vamos, Jun! quiero que comencemos con las remodelaciones de la casa - hablo tranquilo, para después comenzar a llenarlo de besos ‐ quiero que la casa y el cuarto de Juwoon estén listos antes de la inspección.

El escuchar el nombre de su hermano detuvo su corazón y aunque pareciera que lo había olvidado, no era así. Cada noche su cabeza lo torturaba con recuerdos de su hermano, reprochandole lo inútil que era al no ser capaz de cuidar de el.

Sin embargo, aunque ya había preguntado el tener la custodia de Juwoon, era más complicado de lo que esperaba. El gobierno le exigía muchas cosas que no tenía. Iniciando por un trabajo decente y estable.

Jungkook, tenía que demostrar que tenía las posibilidades de cuidar de su hermano y no era que su tía tuviera dinero de sobra. Pero, a comparación de él tenía más posibilidades de cuidar del menor que Jungkook.

Y el hecho de ser menor de edad era otro impedimento para poder reclamar la custodia de su hermano.

- ¿porqué mencionas a Juwoon en este momento? - pregunto abriendo los ojos y vio como el rostro de Jimin cambió de inmediato.

Jimin bajo de su regazo poniéndose un poco nervioso, mientras comenzaba a buscar sus cosas para salir. Intentando pensar en que decirle, pues no quería mentirle, pero tampoco quería ilusionarlo.

Lo cierto era que desde que Jimin tuvo acceso al dinero de la herencia y a los abogados de la familia. Lo primero que hizo fue buscar la forma de traer a Juwoon a casa de nuevo. Pero, las condiciones en las que Jungkook vivía y la forma en la que llevaba su vida, era lo que realmente lo hacía imposible.

Para el gobierno, Jungkook no era el perfil adecuado para poner tener el cargo de un menor, por lo que todas las solicitudes que Jimin ingresaba eran rechazadas.

No quería recurrir a malas practicas como lo hacían sus padres, pero si en algún momento era necesario hacerlo, lo haría sin dudar.

Jungkook, salió de la cama de un salto e impidió que Jimin saliera de la habitación, colocando su brazo en la puerta haciendo que esta se cerrará de nuevo.

- Jun - hablo bajo Jimin - Kang, viene en camino y no quiero hacerlo esperar ‐ soltó lo único que se le ocurrió en el momento.

- dime ¿que tiene que ver Juwoon en todo esto? - pregunto nuevamente y al no tener una respuesta hablo nuevamente - Jimin ‐ lo llamo en tono de amenaza.

Jimin bajo su cabeza y cerró sus ojos con fuerza, intentando buscar las palabras más adecuadas para explicarle todo y sin que se ilusionara.

Jungkook busco la mano de Jimin para tomarla y luego llevarlo de regreso a la cama, se sentó en ella, cubrió su desnudez con las sabanas y luego sentó a Jimin en sus piernas, para luego buscar su rostro y comenzar acariciarlo.