¿Tenías que ser tú? - Anthony Bridgerton (Hermanos Compton 1)

Capítulo 14: Perdidamente enamorado

- Vamos Charles, que tengo hambre.- dijo Isabela esperando en la puerta de la habitación a su marido.

- Tenías náuseas hace cinco minutos y ahora tienes hambre. Te prometo que no entiendo nada de los embarazos.- dijo Charles divertido viendo cómo Isabela fruncía el ceño.- Pero no pasa nada porque ahora vamos a desayunar todo lo que quieras.- dijo acercándose a Isabela y plantándole un beso en los labios.

- Estupendo.- dijo Isabela contenta.- Vamos, a lo mejor nos encontramos con tu hermana. Espero que Lord Bridgerton le haya pedido matrimonio ya.

- Conociéndola no habrá dormido.- comentó el mayor de los Compton divertido.

Ambos atravesaron el pasillo entre risas, pero estas se apagaron por completo cuando llegaron a la escalera y vieron a Lord Bridgerton subir las escaleras con Amelia inconsciente en sus brazos. Isabela gritó de la impresión y Charles al verle la cara y el cuello lleno de ronchas, supo que su hermana había comido fresas.

- ¿Qué ha pasado? ¿Por qué ha comido fresas?.- preguntó Charles alarmado.

- Estaba desayunando con Lady Featherington y se ha puesto así.- dijo Anthony andando lo más deprisa que podía dirigiéndose a la habitación de Amelia.

- Esa mujer...- dijo Charles enfadado.

- No es el momento, Charles.- dijo Isabela que iba detrás de ambos intentando seguirles el paso.

- Justo antes de desvanecerse me ha dicho que la lleve a su habitación.- dijo Anthony llegando a la puerta de la habitación de la morena y dejándola con cuidado en la cama.

- Tiene un frasco de agua de romero en su tocador.- dijo Isabela corriendo a por él y dándoselo a Anthony.- Póngale un poco justo arriba del labio para que lo vaya oliendo.

- Voy a por un médico.- dijo Charles saliendo de la habitación a trompicones.

- Y yo voy a avisar a mi suegro y a mi cuñado.- dijo Isabela nerviosa.- Por favor, cuídela en mi ausencia.- terminó de decir Isabela dándole una sonrisa tranquilizadora a Anthony.

- No le va a pasar nada, ¿verdad?.- preguntó Anthony agobiado.

- Nunca la he visto así, pero le aseguro que no le va a pasar nada. En cuanto llegue mi marido con el médico todo irá a mejor.

Una vez Isabela se fue, Anthony se dio cuenta que estaba sentado en la cama junto a Amelia pasando un brazo por su cuerpo, le quitó mechones de su espeso pelo que se habían arremolinado en su cara cuando la tomó en sus brazos. No tenía la cara hinchada, solo con pequeñas ronchas, cosa que pensó que era buena, porque cuando su padre murió tenía la cara hinchada.

Pensó en lo que le dijo Amelia la noche anterior. Que podrían morir en cualquier momento, eso le produjo un escalofrío que le recorrió toda la espalda. No iba a morir, ella no iba a morir, se suponía que el que iba a morir era él, no Amelia.

- Amelia, despierta. Se suponía que iba a ser yo, no tú.- dijo apretando su mano y le plantó varios besos en la palma.- Por favor.

- ¡Amelia!.- dijo Lord Compton entrando preocupado seguido de Benjamin e Isabela.

- Su hijo mayor ha ido a por el médico.- dijo Anthony levantándose rápido de la cama.

- Siéntate, Anthony. Tienes todo el derecho del mundo a estar con Amelia.- dijo el Conde haciendo una seña para que volviera a ponerse junto a Amelia.