No se en que momento me había quedado dormida, un rayo de sol deslumbraba mi cara haciendo que me despertara.Talle mis ojos levantándome de la cama y saliendo de la habitación para ir al baño a lavarme mi cara.
Solté un bostezó y abrí el grifo para que pudiera lavar mi cara.
Al terminar, salí del baño y fui a la cocina por algo de comida para encontrarme a Bill intentando cocinar.
—Agh, me rindo, no me sale.— Exclamó Bill mientras aventaba en sartén en la estufa y se giraba hacia la barra y asustandose por mi presencia.
—¡Ah!, Que susto me diste.— suspiro aliviado para después acercarse a mi y darme un abrazo.—Hola Bill, ¿Que hacías?.— Pregunté alejándome de el y acercándome a la estufa para ver el huevo completamente quemado en el sartén.
—Intentaba hacerte algo para comer.— Sonrió nervioso y paso su mano pelo.
Reí mientras tiraba el huevo a la basura y prendía la estufa sacando otro huevo nuevo del refrigerador.
—Así se hace un huevo Bill, mira y aprende.— lo acerque hacia mi para que pudiera ver cómo se hacía el huevo. —Pones el aceite, esperas a que se caliente y después echas el huevo, anda.
Bill solo se me quedó viendo y tomo el huevo partiendolo por la mitad para después echarlo al sartén caliente.
Puse un poco de sal al huevo y lo despegue con una espátula para después pasarlo a un plato.
—Ahi tienes el huevo.— Sonreí y le entregué el plato y llendo hacia mi habitación para cambiarme de ropa.
Me puse un suéter caliente y un pantalón azul holgado mientras ataba mi cabello con una coleta.
Me puse unos aretes y una bufanda para después salir de mi habitación e ir a donde Bill para despedirme de el.
—¿A dónde vas?.— Preguntó Bill mientras masticaba la comida.
—Ire a la casa de Clara, no tardaré mucho.
—Mhm, ¿Puedo ir contigo?.— Sonrió feliz Bill acercándose a mi.
—Bueno, pero iremos caminando, no queda tan lejos su casa.
Bill asintió feliz y ambos salimos de departamento para aproximarnos hasta el elevador.
Ambos salimos del edificio y comenzamos a caminar hasta la casa de Clara.
Las decoraciones navideñas se veían hermosas por todas las calles, Bill tomaba de mi mano mientras que con su pulgar la acariciaba.
Mientras íbamos caminando, vimos un puesto de crepas y nos acercamos a este.
—Que ricas se ven.— Dije mientras se me hacía agua la boca. —¿Me podría dar una de chocolate con plátano y fresa?, Por favor.— Le dije al señor que atendía y las hacía.
—Claro, en un segundo.
—¿Quieres una Bill?.— Le pregunté mientras veía como hacían las crepas.
—Sii.— Sonrió mientras sus ojos se le achinaban.
Mientras ambos esperábamos nuestra crepa, el frío cada vez era más fuerte haciendo que comenzará a toser.
Se preguntarán por qué vivo la vida como si no hubiera recibido la peor noticia de mi vida, es por qué todo lo que dijo Bill es cierto.
Se que Canela estará en un lugar mejor y solo queda recordar los buenos momentos que pasamos juntas.
—Linda, tu crepa.— Me dijo Bill pasando su mano al frente de mi cara para que reaccionara.
—Ah, si, muchas gracias joven, acá está el dinero.— Le entregué el dinero y agarre mi crepa que olía demasiado bien.
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𝑻𝒉𝒊𝒔 𝒊𝒔 𝒏𝒐𝒕𝒉𝒊𝒏𝒈 𝒔𝒆𝒓𝒊𝒐𝒖𝒔 ┇ Bill Kaulitz Y Tu
Dragoste"Se dice que hay demasiados milagros en esta vida, sin embargo, yo no creo en milagros. Pero, ¿Y si fue un verdadero milagro reencontrarme contigo?... Para que terminarás jugando conmigo, ¿No es así?, Bill..."