Destino O Casualidad [en proceso]

Capitulo:6

[Alexei]

Observaba el atardecer que tenia frente a mi, me resultaba maravillosa la manera en que los colores se reflejaban por el cielo.
Me levante de mi silla agotado, no había sido un buen día, para mi suerte Emma me había ayudado con muchas cosas del trabajo, sin embargo necesitaba una siesta y unas buenas beladas, necesitaba dejar de pensar un rato.

Dejar de pensar en ella.

-Que tengas una buena noche- le dije a Emma mientras pasaba por su escritorio.

-Que descanse señor Novakov, lo necesita- bromeo, reí mientras seguía con mi camino.

Salí del edificio y subí a mi auto para ponerlo en marcha, por décima vez en el día Elizabeth apareció en mi mente.

JODER.

Se supone que esto solo pasaba en las películas, ¿no?, esas en donde actuaban que eran flechados a primera vista, el guión seguía con un amor casi imposible, dolor y terminan quedando juntos, besándose el día de su boda o en un atardecer que recalca su figura.

Pero lo mio no era actuación. Este sentimiento, este desespero, este anhelo y deseo.
Me di cuenta que conducía sin destino alguno, así que me dirige hacia el hospital, necesitaba verla para comprobar que no era un simple capricho de cama... volver a sentir la ímpetu de los golpes de mi corazón cuando la tengo cerca.

Llevaba unos minutos estacionado afuera del hospital, no me había atrevido a salir del auto, ¿Qué le diría en cuanto la viera?.

~Hola mucho gusto soy Alexei Novakov el hombre al cual atendiste en el restaurante en el que trabajas unos días atrás, el que salvo a tu hermana de morir, y el que te hizo un show en el hospital en medio de muchas personas.

No verdad, es ridículo.

Esta situación es ridícula.

Salí del auto con un poco de pesades, di un respiro y camine con seguridad, volviendo a mi postura de "prepotencia" que muchos dicen que me caracteriza, a decir verdad muchas personas confunden en mi la seriedad con prepotencia.
De igual manera no es como que me importara lo que los demás piensen y digan de mi.

Entré al hospital buscando la habitación en la cual se encontraba la hermana de Elizabeth, de repente mi celular vibro lo saque de mi bolsillo mirando en la pantalla una llamada entrante de Emma.

-¿Qué sucede?- pregunte sin detener el paso.

-Señor... tenemos problemas.

-¿Qué problemas Emma?.

-Secuestraron a la señorita Elizabeth- sentí como si sus palabras fueran un golpe directo a mi corazón, mis pies se detuvieron por sí solos. Mi respiración se freno, mi cerebro se congelo y dejé de oír el movimiento del entorno.

-Repite lo que dijiste.

-Han secuestrado a la señorita Elizabeth...

Aleje el celular, ¿así que de esta manera se sentía temer perder a alguien? Mi equilibrio emocional pareció romperse solo diferenciaba la voz de Emma sin palabras claras.

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Estacione mi auto afuera de una de mis bodegas en las que solía trabajar mi equipo Emma y Niccolo mi hermano, se habían adelantado con la búsqueda.

-¿Qué tienen hasta ahora?- pregunte en cuanto los vi.

Entramos a las oficinas de inteligencia tecnológica, note a mis guardias trabajando con las computadoras, mientras otros vigilaban la zona.