Sol Y Luna - Venganza Y Sangre ✔️

CAPÍTULO 28

¡Doble actualización! Si WATTPAD te trajo primero a este cap, ¡¡Regrésate!! No te spoilees jsjjs.

Narrador omnisciente

Un escalofrío tomó el cuerpo de Seriel en aquél mismo instante en el que iba a llevar su plan a cabo.

Solo faltaban unas dos horas para que el final de los juegos se ejecutará.

Todo había estado en un completo caos, Sminoff dando órdenes de aquí y allá.

Seriel lo había estado analizando muy detalladamente para buscar el momento preciso en el que sacaría al amigo de Freya de aquél lugar de mala muerte.

Sabía las consecuencias, estaba muy consientes de ellas. Ya lo había hecho antes, pero nunca lo había hecho en estás circunstancias en las que por un par de horas se llevarían a cabo los juegos, y siendo él uno de los favoritos.

Cómo siempre lo hacía, se aseguró de tener su máscara bien asegurada, lo que permitía que otros no pudieran ver su rostro, sin embargo, la mayoría ya lo reconocía por su máscara, así que opto por llevar una capa negra con capucha para que cubriera también su máscara.

Salió de sus aposentos con paso apresurado y evitó cualquier persona que pudiera verlo por los pasillos.

Luego de algunos minutos en los cuales intentó que nadie pudiera descubrirlo y llamar la atención ya estaba en la entrada que conducía a los calabozos.

El lugar era una total oscuridad excepto por las antorchas que ahora eran casi inexistentes.

Le sorprendió que no hubiera ningún guardia vigilando la entrada pero no se iba a parar por eso, es más, tenía que aprovechar cualquier oportunidad y esta era la adecuada.

Antes dar un paso más adentro frotó sus palmas unas cuantas veces y luego las extendió hasta los suelos.

Un cosquilleo brotaba de él cada vez que utilizaba su poder, no le gustaba usarlo mucho pero en este tipo de caso era necesario.

Una leve chispa salió de sus palmas para luego en unos segundos el lugar ser inundado por un aroma cítrico, dulce, que todo el que estuviera en el lugar sería envuelto por el y en segundos caer en la inconsciencia a excepción por los que él no quisiera que les afectará.

No duraría mucho. Así que emprendió la marcha rápido. Sus botas repiqueteaban en el lugar y su capa ondeaba detrás de sí.

Llegó a la celda que tanto buscaba. Miró a la del frente y observó a una Freya totalmente dormida.

«Lo cumpliré, princesa»

Abrió la celda de Erick y la oscuridad de ella lo tragaba, sin embargo, Seriel agudizó sus ojos y pudo observarlo detallandolo desde la esquina de esta.

Le arrojó la capa con capucha que había traído para él.

—Vamos. No tenemos tiempo.

Erick la atajó en sus brazos con su ceño fruncido.

Erick ya sabía que este era el hombre que había traído a Freya hasta aquí para su venganza, pero no por eso se le haría fácil confiar en él.

—¿Para qué? —preguntó dudoso.

—En el camino te lo explico. No tengo tiempo.

Erick sopesó lo que le decía, no lo entendía, pero más que todo sabía que desde hacía tiempo algo estaba recorriendo su mente, y pensaba descubrirlo.

Miró de reojo a Freya.

—Freya…

—Por ella no te preocupes —salió de la celda y la dejó abierta para él—. Vamos.