Sabor a ti

N U E V E

Despierto con el cuerpo sudado, la respiración agitada, mucho calor y la sensación de que todo se sintió demasiado real. Las imágenes del sueño se repiten en mi mente una y otra vez y eso no ayuda a bajar la temperatura de mi cuerpo. Dejo caer nuevamente la cabeza en la almohada y cierro los ojos, calmando mi respiración. Pero no puedo dejar de pensar en eso.

Las manos de Steve en mi cuerpo, sus labios besando mi piel, su cuerpo desnudo contra el mío.

Acabo de tener un maldito sueño erótico con Steve.

¿Cómo chucha se supone que saque eso de mi cabeza?

Ya se me hace bastante difícil no pensar en aquella noche que pasamos juntos hace meses, ahora mi subconsciente comienza a atormentarme incluso mientras duermo.

Estiro mi mano y tomo mi celular y al ver que son más de las diez de la mañana, sé que Valerie está despierta, así que le escribo.

"¿Qué significa tener un sueño erótico con alguien?"

Su respuesta no tarda en llegar.

VALERIE:
"Depende ¿es un famoso, un desconocido o alguien que conoces?"

"Alguien que conozco"

VALERIE:
"OMG"
"

QUIERO DETALLES"
"¿Con quién fue?"
"¿Era bueno?"

"¿Qué significa?"

VALERIE
"Que quieres revolcarte salvajemente con esa persona"
"No evites mis preguntas"
"¿Con quién soñaste?"

"¿Fue un sueño explicito o solo sensual?"

"Explicito"

"MUY explícito"

VALERIE:
"Amiga, tú le tienes muchas ganas a esa persona"
"Ignoraré el hecho de que no me digas quien es, solo para decirte que vayas, le comas la boca y follen hasta el amanecer"

Valerie da los mejores consejos, pero no creo que pueda hacerle caso en esta ocasión.

Así que me obligo a salir de la cama y voy directo al baño por una ducha de agua fría, que se convierte en una ducha de agua caliente porque no soporto el agua fría.

Si, que buena forma de empezar el domingo.

Mas tarde, luego de almorzar con mamá, me encierro en la habitación y me acomodo en mi escritorio rodeada de libros, mi iPad y mi computadora para estudiar. Pongo mi playlist con canciones lentas de One Direction para que suene de fondo.

Mi teléfono suena y juro que intento no prestarle atención, pero la tentación es más grande y termino por desbloquearlo, encontrándome con un mensaje de mi prima Catalina.

CATA:
"¿Estas ocupada?"

"Estudiando para un examen ¿por?"

CATA:
"¿Puedes tomarte un ratito para una videollamada?"
"Necesito hablar con alguien"

"Ahora me conecto"

A los pocos segundos ya me encuentro conectada y la llamada de la Cata no tarda en aparecer. Le doy a aceptar y ahí aparece el rostro de mi prima.

- ¡Hola! - saluda sacudiendo su mano con una sonrisa.