The baby bump

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Ese fin de semanas mientras planificábamos todo, comprábamos un par de cosas y hablábamos de la vida en nuestra nueva casa , definitivamente ayudó a liberarnos un poco del estrés que veníamos cargando ambos por nuestros respectivos trabajos, en la empresa en la que yo estaba las cosas no parecían mejorar, no me la pasaba mal pero no había tocado un solo diseño en lo que llevaba ahí, ni siquiera había podido expresar una sola idea creativa, sabía que era cosa de paciencia y que no tenía que irme a las primeras de cambio después de todo ¿Era lo que quería no?.
Aún así pasaba horas en mi oficina contemplando la vista y llenando hojas técnicas,que a pesar de que esta vez era un trabajo que si tenía que ver con la moda era la parte aburrida de esta y no sabía si llenaba las expectativas que me habían planteado en un inicio.
A Chris tampoco le iba mejor con el suyo, al final se despidió de Christina de la manera más amable y consiguió una nueva manager, Meghan, una chica que se miraba más amable y comprensiva pero aún así implicaba un cambio y no sabíamos que tanto nos afectaría justo por todo lo que ya estábamos viviendo.
Pensaba en todo eso mientras hacía bocetos en mi oficina, así pasaba el rato entre las tareas que me daban, hacia muchos dibujos de como me gustaría que fuera mi vestido de novia, iba de una idea a otra, de un estilo a otro y siempre acababa con un montón de diseños diferentes, eso me recordaba lo mucho que quería poner mi boutique de vestidos de novia, y que a pesar de todo aún no descartaba ese sueño .
Ese día después del trabajo pase justo por afuera de Kleinfeld lo que además de avivar aún más ese sueño también me recordaba que era momento de iniciar la planeación de la boda, Chris quería que fuera algo muy clásico y tradicional y yo no podía estar más de acuerdo. Me emocionaba cualquier idea que se me viniera a la cabeza y que tuviera alguna relación con la boda: el lugar, el banquete , la decoración, la lista de invitados, el velo, el vestido, las zapatillas, las flores, la música, el pastel , todo pasaba muy rápido por mi cabeza , era una sensación tan emocionante como estresante.

Pero ahora no tenía mucho tiempo de pensar en eso , pues sería el cumpleaños del amor de mi vida y por supuesto tenía que buscar el regalo perfecto para él, tenía que ser algo que lo sorprendiera, era el primer cumpleaños que festejaríamos juntos  y tenía que ser algo especial, quería regalarle algo fuera de lo común ¿Pero que podía sorprender al Capitán América? Tenía que pensar en que cualquier cosa material que le pudiera regalar no sería lo suficientemente extraordinaria como para emocionarlo verdaderamente. Así que por más que le comprara el reloj más caro o fuéramos al restaurante más elegante yo sabía que lo que a él le llenaba más el corazón era estar con sus seres queridos así que seguía metida en mi papel de organizar la mejor fiesta "sorpresa" que haya tenido, claro que también le compré un par de regalos algo costosos y un set enorme de legos por que sabía cuanto le gustaban, además de algunas cosas  que sabía que también iba a disfrutar mucho.
Estaba como loca entre lo de la boda, el trabajo y el cumpleaños de Chris, tenía la sensación de que me estaba olvidando de algo importante, llevaba esa sensación ya por varios días pero no le prestaba atención pues mi cabeza estaba realmente ocupada, hasta que como si fuera un flashazo divino mágicamente recordé que aquello que me estaba faltando, era mi periodo.

Sentí un vacío en el estómago de esas veces en las que no sabes que sentir o como reaccionar, lo dejé pasar un poco esperando algo más de tiempo y darle menos importancia, tenía cosas que hacer y que comprar, el día de su cumpleaños se acercaba cada vez más y quería que todo saliera perfecto así que esperaría hasta lo último para hacerme una prueba de embarazo, después de todo sí que quería un hijo con Chris, lo anhelaba más que nada en el mundo, pero al mismo tiempo era inevitable pensar en todo el trauma de la última vez.

El momento de la fiesta llegó, había organizado algo bonito y personal para su familia, sus amigos más cercanos y uno que otro amigo del espectáculo, fue difícil escoger pues es una persona muy querida .
Morí de ternura cuando vi su cara de sorpresa al entrar y ver a toda su gente reunida, se veía genuinamente sorprendido aunque sabía que ya se lo esperaba por lo que fue aún más lindo ver su cara encantado por todos los que estaban presentes y lo bello que quedó todo, yo sabia eso era lo que a él más le gustaba, fui la primera en correr a abrazarlo y recibirlo y podía sentir su corazón latir con fuerza, sus brazos alrededor de mi siempre serian una de mis sensaciones favoritas en el mundo.