Capítulo XX
Quiero que me cuentes de ti.
Daniel la miró con una seriedad que Nadenka no había visto en un buen tiempo.
- ¿Qué es lo que te gustaría saber? –
Nadenka estaba muy expectante ante cualquier cosa que Daniel quisiese preguntarle. Por su mirada seria, no pudo evitar sentirse ligeramente preocupada.
- No es nada demasiado complicado, solo quiero saber ¿Quién te enseñó a cocinar? -
Respondió cambiando bruscamente de su mirada seria a una sonrisa divertida.
Por un momento Nadenka perdió la compostura, no esperaba que la pregunta de Daniel fuera sobre un tema tan tonto como ese, sin embargo, si eso era lo que él quería saber, tampoco tenía problemas con responder eso.
- Mi madre fue la que me enseñó además de que es casi una obligación que todas las mujeres de mi familia sepan cocinar...-
Su conversación se vio interrumpida cuando el fuerte sonido de un camión los interrumpió, esperaron que el ruido disminuyera para poder reanudar su charla.
-...No recuerdo exactamente cuándo fue que empecé pero también fue a una edad temprana...-
Nadenka trató inútilmente de recordarlo pero luego de unos segundos lo dejó.
-...Un día mi madre entró en mi habitación cerca de lo hora de almorzar y me dijo "Es hora de que aprendas a cocinar tu sola, tienes que aprender a mantenerte por ti misma en caso de que no estemos aquí y tengas hambre" o algo así. -
Nadenka imitó lo mejor que pudo a una madre regañando a su hija. La chica lo miró ya anticipada a una de sus burla habituales, sin embargo, no estaba preparada para encontrarlo con una expresión sorprendida en el rostro así que decidió preguntar que le pasaba.
- ¿Te pasa algo? -
- No es nada, solamente no esperaba eso. -
Contestó confundiéndola más.
- ¿A qué te refieres? -
- Es que mis abuelas y mi madrina me dijeron algo simular cuando era pequeño; nos parecemos un poco en ese tema ¿No te parece?...-
La pelirroja levantó levemente su ceja con curiosidad pero decidió no decir nada y esperar que Daniel se explicara.
-...a los dos nos criaron tratando de que podamos valernos por nosotros solos tan pronto como nos fuese posible. -
El pelinegro cambió su expresión alegre a una más empática mientras ella consideraba sus palabras.
- Nunca lo había considerado así, pero ciertamente es algo curioso, aunque parece que a ti te criaron con algo mucho más ambicioso en mente. -
Nadenka asintió ante la idea.
- ¿Eso crees? -
Daniel la miró con curiosidad.
- Por supuesto, te criaron con una educación demasiado estricta, la verdad me sorprende que seas tan sociable considerando todo el tiempo que debiste pasar estudiando. -
- Eso que escucho es un halago pequeña. -
- Puedes tomarlo de esa forma. -
- ¿Qué hay sobre tu familia? Si no te molesta que pregunte. -
Daniel continuó con el interrogatorio de forma tranquila.
- Yo te pregunté lo mismo así que es justo. -
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El precio por ser las más hermosa. (+18) (Borrador)
RomansaNadenka era una chica anormal. Una belleza que roza lo sobrenatural, una mente ágil, gente que la amaba y la cuidaba. Todo lo que alguien desearía para ser feliz. Sin embargo, en un giro cruel del destino, su idílico mundo se derrumba, dejándola exp...