Comer mi maravillosa bolsa de dulces, más mi extraordinariamente grande pote de cotufas (lo se, solo pienso en comida), regañar a Alejandro por quieres pasarse de listo intentando de meterme mano en una sala de cine y con mis amigas percentes. Eso, e ignorar a Kathy, fue la salida de cine. Ahora estoy en mi casa con mi sexy pijama que dice "no boyfriend, no problem" pesando en lo mucho que me gusta Alejandro y esperando que el sienta lo mismo -y eso lo que parece- sintiéndome insegura, insegura por el hecho de no saber que busca el o que ve en mi, la mayoría de las personas al decirle no un par de veces se tranquilizan y dejan de intentar,pero no... el niño no se podía quedar quieto. Declarándome en peligro, peligro de caer, peligro de hundirme si pasara algo, estoy sencillamente preocupada de cagarla. Esto y solo ha pasado una semana. En mi suena una alarma. Mi mente esta inquieta y empieza a poner ejemplos para ayudarme a entender como me siento.
Pienso que las mujeres son como casas, *seguramente pensaran que estoy loca* les explico: puedes verte muy bien por fuera y estar vacío por dentro, tenemos tantos cuartos como facetas o cualidades tengamos y siempre lugares a los cuales jamás hemos ido y vamos a recorrer. Los hombres son huéspedes que deciden ver y recorrer la casa, depende de su presupuesto y ganas de tenerla para comprarla, si no les alcanza, simplemente, no pueden tenerla si no se esfuerzan. Yo, quise ser la casa que todo el mundo desea, pero que no puede tener y burlarme de las casas que todo el mundo tiene. Nadie había pasado de mi pasillo, pero en estos momentos siento que alguien a llegado y a burlado mi seguridad -que yo consideraba infalible- en un momento de descuido y se ha empeñado en sacar cosas de mis cuartos y ponerlas en donde no van, para así, dejar rastro; y por otra parte acomodar cosas que pensaba que estaban bien, para así, no querer que se vaya. Creo que lo mejor de cada mujer esta por dentro y no por fuera, puedes tener la mejor fachada, pero eso que importa si no tienes, ni siquiera las paredes pintadas por dentro, esperé a un huésped que quisiera comprar la casa entera y construir cuartos que no imagino todavía. Que no quisiera cambiarme. Solo quisiera verme bien y cuidar me mi estructura. Pienso de manera diferente y por esa razón muchos huyen, les da miedo esa puerta que al parecer esta cerrada para todo el mundo, cuando, en realidad, esta entre-abierta.
Pienso también en la amistad, el significado, lo que tienes que hacer para considerar a una persona una amiga verdadera, en que me he equivocado y que tengo que mejorar. Me da miedo que me hieran, que me lastimen, hasta el punto de ya no ser la misma y asi, cambiar de un modo irreparable. Soy una persona que parece indiferente a todo, cuando quiero llorar y desahogarme, me criaron de esa manera, porque se llora caminando, sino, el camino te deja, no se parará a esperarte.
Imagino un futuro lejano, en que será de mi, que es lo verdadero y lo falso, si el mundo seguirá igual, en que habrán inventado, que crearan despés de mi muerte -no de una manera triste, sino, de esos caminos que uno agarra cuando tiene sueño-. De pronto me siento cansada, sin darme cuanta, son las 2:53 de la mañana, el tiempo en este momento esta corriendo ¿ven? No le importa lo mal que puedas sentirte, ni lo vulnerable que seas. Simplemente corre y no ve hacia atrás, haciendo su camino relativamente sin fin, sin pensar en lo finito. Después de pelear con mi inconciente por no querer que duerma, consigo convencerla de dejar descansar mi cabeza, aun, cuando ella no quiere hacerlo.
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Mi desastre de vida
Teen FictionLo que puede pasar por gritarle a un chico por la calle... Yo bueno, una chica de 15 años con una leve obsesión por la comida, malas notas, impulsiva y un poco torpe. El, hermoso, sexy, llamativo, seguro de si mismo y un envidiable talento para hac...