El mundo es injusto, eso todos lo saben, si se aparece el amor no todos pueden recibirlo de brazos abiertos y menos si aparece cuando menos lo deseas.
Jisung es un cazador, pero su madre, la líder de estos lo detesta con todo su ser al culparlo de l...
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Ha pasado un año desde que todos nos encontramos en nuestro peor momento, donde sacamos de nuestro camino a aquellos enemigos que nos estorbaban para armar nuestro futuro; dejamos de ser esos jóvenes sin responsabilidades y nos enfrentamos a la pequeña revolución que armamos en cada uno de nuestros nuevos puestos, aquellos que dejamos sin dueño.
365 días han pasado desde que mi madre murió, desde que mi tía Soo tomó el mando en el cuartel, liberando de las ataduras a cada uno de los cazadores que aún habitaban en el lugar; de a poco Soojin ha mejorado la forma en la cual funcionan las cosas, seguimos siendo una especie cotizada y solicitada, con la diferencia de que ahora todos nos respetamos entre nosotros.
Creo que, el hecho de que mi tía Soojin haya tomado su puesto, fue la motivación que el resto necesito para hacer frente a sus responsabilidades. La primera en tomar su nuevo puesto fue Sana, quien a pesar de continuar de luto fue titulada como la nueva general, asignándole la seguridad del reino Lee, donde el recuerdo de Namjoon seguía rondando en los pasillos. A pesar de haberse reencontrado con Dahyun ninguna renunció a su trabajo, así que ambas acordaron verse de forma continua, demostrando que su amor podría con cualquier distancia.
El siguiente en tomar el mando fue Hyunjin, quien con ayuda de Félix y Jeongin consiguieron retomar el mando en el clan de brujos de plata, comenzando a reformar de a poco su especie; es algo obvio que las cosas no cambiarán de un día a otro, pero de a pequeños pasos están avanzando hacia un futuro mejor. Aquello dio como resultado que Jeongin se mudará a vivir con los brujos, siendo nombrado como líder consorte, el pequeño Jungwoo comenzó a ser venerado y de a poco fueron tomando el rumbo que antes tuvieron, aunque claro, con varias mejoras.
A partir de eso, Félix continuó los pasos que la madre luna le indicó, comenzando a ser conocido como el hijo de la luna. La noticia del fallecimiento de Seokjin se esparció por todos los territorios y clanes, los cuales cada tanto le llevaban una ofrenda al joven Félix, quien se asentó junto a Changbin en una linda cabaña en el bosque circundante al territorio de los Hwang.
Seungmin y Chan fueron un caso aparte, pasaron unos largos meses en tensión dentro del castillo Lee, donde frecuentemente se les podía escuchar pelear por cualquier cosa, consiguieron arreglar sus diferencias con el tiempo y bastante paciencia. Lobo y vampiro se volvieron a casar en una ceremonia sumamente privada, para que después Seungmin fuera nombrado como el comandante de Sana, dando paso a que los hermanos Kim formarán parte de la milicia del clan.
Aquello sólo nos dejaba a nosotros dos como los únicos que no habían avanzado en sus puestos, claro, hasta hoy.
—¡Jisung!
—¡Ya voy, amor!
El día del cual Minho no había parado de parlotear por meses, había llegado, hoy sería su coronación como rey del clan vampírico del norte.
En el momento que salí del cuarto de baño, me rodearon un par de brazos que tan bien conocía, aquellos que me habían mantenido apresado a su lado por todo este tiempo, los mismos que habían luchado porque estuviéramos juntos hasta el último momento y los cuales sé que jamás me dejarían caer.
