El mundo es injusto, eso todos lo saben, si se aparece el amor no todos pueden recibirlo de brazos abiertos y menos si aparece cuando menos lo deseas.
Jisung es un cazador, pero su madre, la líder de estos lo detesta con todo su ser al culparlo de l...
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El ambiente dentro del castillo Lee era tan tenso, tras la noticia de Seokjin, Namjoon y Seungmin estaban decididos a hacer frente al ataque que vendría, ambos habían hecho un trato mudo, harían caer a aquel brujo que los mantuvo engañados por tanto tiempo.
Jisung observaba como ninguno de los vampiros pasaba mucho tiempo en un solo lugar, iban de aquí para allá, terminando de afinar sus estrategias de batalla. Minho le había prohibido interferir en todo lo que estaba sucediendo, el vampiro estaba siendo muy sobreprotector con Jisung, cosa que al mestizo le frustraba, se sentía tan inútil simplemente observando el caos creciente.
Se puso de pie del acolchado bajo el enorme ventanal, acercándose a la cuna donde su pequeño Heeseung estaba tomando la siesta, al asomarse pudo notar como su bebé estaba despierto moviendo sus extremidades sin orden alguno. El mestizo dejó escapar una risita cargando a su cría entre sus brazos.
—Parece que alguien ha despertado —Murmuro Jisung, meciendo al pequeño bebé entre sus brazos, este lo observó con sus ojitos abiertos de par en par, le mestizo amaba la mirada de su bebé.
Heeseung había heredado los hermosos ojos oscuros de su padre vampiro, el bebé era una tierna mezcla entre los rasgos de sus padres. Jisung tomó la manta de su hijo y salió de la habitación de Minho, se sentía sofocado de estar encerrado, así que iría a encerrarse pero en habitación ajena.
Al salir al pasillo el frenesí de estos últimos días lo recibió, Haewon se acercó rápido a donde estaba, la muchacha era cierto que velaba totalmente por las necesidades del mestizo, pero este no podía evitar sentirse incómodo con tanta atención.
—Joven Han, ¿necesita algo? ¿Sucedió algo?
—No te preocupes, solo iré a la habitación de Hyunjin, necesito estar en otro ambiente
—En ese caso, permítame acompañarlo
Ambos avanzaron por el pasillo, el mestizo observaba el contraste en aquel lugar, usualmente la calma lo cubría, pero ahora las personas no paraban de avanzar para preparar todo lo necesario para la batalla venidera.
—Haewon, ¿Sabes algo de Minho? —Cuestionó Jisung, reafirmado su agarré sobre su bebé
—El príncipe Lee se encuentra en el cuartel junto al general Kim, ¿Necesita que lo llame?
—No, solo quería saber algo de él, desde que me prohibió involucrarme, no nos hemos visto mucho
Haewon asintió, sonriendo suavemente —El príncipe Lee se preocupa mucho por su salud, por eso no ha deseado involucrarlo en la batalla
—Entiendo eso, pero no puedo evitar sentirme inútil y estresado, mi ambiente no es estar encerrado esperando que lo malo pase, yo necesito salir y enfrentar lo que sucede —Se quejó Jisung, haciendo una mueca
—Joven Han —Le llamó la castaña —Todas las decisiones del príncipe Lee son en pro de protegerlo, no hace mucho fue su parto, su cuerpo aún necesita descansar un poco más, además, piénselo un poco, si ambos salieran al frente y algo malo sucede, ¿Qué pasará con el bebé entre sus brazos?
