En la religión azteca, Coyolxauhqui ("pintado con campanas") es la hija de la sacerdotisa Coatlicue ("Falda de serpiente"). Era la líder de sus hermanos, los Centzon Huitznahuas ("Cuatrocientos Huiztnaua"). Lideró a sus hermanos en su ataque contra su madre Coatlicue cuando descubrió que estaba embarazada, convencida de que los deshonraba a todos. El ataque es frustrado por el otro hermano de Coyolxauhqui, Huitzilopochtli, la deidad nacional de los mexicas.
En 1978, los trabajadores de una compañía eléctrica descubrieron accidentalmente un gran relieve de piedra mostrando a Coyolxauhqui en Ciudad de México. El descubrimiento de la piedra de Coyolxauhqui llevó a una excavación a gran escala, dirigida por Eduardo Matos Moctezuma, para desenterrar el Hueyi Teocalli (Templo mayor). La importante posición de la piedra Coyolxauhqui sugiere la importancia de su derrota por Huitzilopochtli en la religión azteca e identidad nacional.
NACIMIENTO DE HUITZILOPOCHTLI Y DERROTA DE COYOLXAUHQUI EN COATEPEC
En la cumbre de Coatepec ("Montaña Serpiente") se encontraba un santuario de Coatlicue, la deidad terrestre maternal. Un día, mientras barría su santuario, cayó del cielo una bola de plumas de colibrí. Ella "las asió; luego se las situó en la cintura". Por ello, se quedó embarazada con el dios azteca Hutzilopochtli.
Su embarazo milagroso avergonzó a los otros hijos de Coatlicue, incluyendo a su hija mayor Coyolxauhqui. Enterándose de su embarazo, los Centzon Huitznahuas, liderados por Coyolxauhqui, decidieron matar a Coatlicue. Mientras se preparaban para la batalla y se reunían en la base de Coatepec, uno de los Centzon Huitznahuas, Quauitlicac, advirtió a Huitzilopochtli del ataque mientras estaba en el útero. Oyendo el ataque, Coatlicue dio a luz milagrosamente a un Huitzilopochtli adulto y armado que emergió de su vientre, portando "su escudo, teueuelli, y sus dardos y su cerbatana azul, llamada xinatlatl".
Huitzilopochtli mató a Coyolxauhqui, decapitándola y arrojando su cuerpo por la ladera de Coatepec: "Atravesó a Coyolxauhqui, y luego le arrancó rápidamente la cabeza. Paró allí al borde del Coatepelt. Y su cuerpo cayó abajo; cayó rompiéndose en pedazos; sus brazos, sus piernas y su cuerpo cayeron en varios lugares". Igualmente sus hermanos, los Centzon Huitxnahuas, fueron esparcidos en todas las direccioens desde lo alto del Coatepec. Los persiguió sin descanso, y aquellos que escaparon fueron al sur.
Algunos autores han escrito que Huitzilopochtli arrojó la cabeza de Coyolxauhqui al cielo donde se convirtió en la Luna,, para que su madre se consolara viendo a su hija en el cielo cada noche, y que sus hermanos se convirtieron en las deidades de las Estrellas del Sur. Es difícil verificar estas variacioens de la narración con las fuentes del siglo XVI.