꧁𝑻𝒉𝒆 𝑺𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕𝒔 𝑶𝒇 𝑻𝒉𝒆 𝑩𝒍𝒂𝒄𝒌𝒔꧂

CHAPTER 20: Is That Child...

A Theodore le comenzaron a sudar las manos mientras pensaba en cómo hacer que Draco nunca se enterara de que aquellas personas eran sus amigos, algo que era imposible ya que eran siete años de estudio en Hogwarts lo que significaba que se enteraría tarde o temprano.
Él estaba tan perdido en sus pensamientos como usualmente, cuando escucho como una voz chillona le hablaba, era Pansy Parkinson.

—D-Disculpa ¿Tú quién eres?— pregunto la niña con nervios por la mirada fulminante que le daba Theodore ya que inconscientemente Theodore los había estado mirando de esa manera lo que provocó que los tres niños se sintieran abrumados y con temor por su aura oscura.

Theodore miro a la niña mientras se acomodaba mejor en su asiento «Totalmente todos en Hogwarts saben quién soy... y ellos también lo sabrán, incluso si no se los digo yo» se paso una mano por su cabello haciéndolo para atrás —Theodore Black— pudo observar cómo los tres niños se ponían pálidos al haber escuchado su nombre incluso pudo ver como uno de los niños regordetes comenzó a temblar.

—Mucho g-gusto— hablo nerviosa Parkinson mientras le sudaban las manos.

Draco estaba a punto de decirles algo, pero rápidamente cerro la boca.
En Hogwarts Theodore y Draco tenían que ser desconocidos o por lo menos distantes entre ellos para que no comenzaran los rumores acerca de qué relación tenían ya que los Malfoy y ni Theodore querían revelar todavía que eran parientes y que estaba al cuidado de ellos, "aún no era el tiempo" era lo que Narcissa siempre le decía a Theodore.

Mientras tanto Theodore miro nuevamente a los tres niños quienes todavía estaban un poco pálidos así mismo también pudo ver que Parkinson estaba incomoda ya que estaba en una esquina del asiento del compartimento donde era casi aplastada por los dos niños regordetes, no supo como pero su boca se abrió por si sola al igual que se hacía a un lado pegándose más a la ventana mientras su primo lo miraba desconcertado por lo que estaba haciendo.

—Señorita Parkinson— hablo por lo que ella se puso nerviosa —Parece que en ese lugar esta incomoda... ¿Por qué no se sienta al lado de Draco?— hizo una seña para que Draco se sentara cerca de él y le hizo caso dejando más lugar para otra persona.

La niña se levantó de donde estaba y tomo asiento al lado de Draco —G-Gracias— dijo un poco ruborizada. De esa manera siguieron en silencio hasta que tocaron la puerta, era una señora quien llevaba un carrito lleno de dulces.

Grabbe y Goyle se levantaron rápidamente y compraron un montón de dulces —Draco ¿Quieres algo?— pregunto Theodore en un susurro a su primo y los tres niños los miraron desconcertados ya que no sabían que su amigo y Theodore Black eran algo cercanos.

Draco le dijo que si quería algo de aquel carro así que se levantó y camino unos pasos hacia la señora —¡Oh! Pero que chico tan guapo ¿Qué te gustaría?— le dijo la señora, Theodore agarro unos dulces que decían que era de diferentes sabores y dos ranas de chocolate, pago con algunas monedas que le había dado su tío Lucios y cerro nuevamente la puerta cuando la señora siguió su camino.

—Tengan— les dio una rana de chocolate a Draco y a Parkinson quien se quedó sorprendida así mismo a Draco le dio los otros dulces que eran de distintos sabores ya que a él no le gustaban los dulces.

—Gracias— dijeron los dos cuando recibieron los dulces.
De esa manera todo se quedó en silencio solo se podía escuchar los dulces siendo abiertos al igual como Grabbe y Goyle le daban un mordisco a cada dulce que habían comprado.

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Theodore se sentía incomodo en aquel compartimento había pasado unas tres horas ya estaba a mitad de camino donde Draco y sus amigos se habían puesto a platicar sobre cosas de sangre pura de más. Hasta que Draco se levantó de su asiento siendo seguido por Grabbe y Goyle que en vez de amigos parecían sus guardaespaldas a la vista de Theodore y de esa manera Draco salió del compartimento junto con sus dos corpulentos amigos.