27 septiembre 2019
Culiacán, Sinaloa, Méxicopov Ovidio
Nada había resultado como lo habíamos pensado, al verlos entrar y que la quisieron abrazar comenzó a gritar y desesperarse por lo que tuvieron que sedarla pues no podían tranquilizarla.
Todos habíamos quedado en un completo shock al verla negarse a abrazar a Serafín y que gritara que no la tocara. Sus sollozos habían sido fuerte y dolorosos.
Serafín fue el primero en pasar por la puerta de la habitación, mi bonita estaba viendo una serie en la tele que había pero al escucharlos volteó a ver a todos.
Sus manos se tensaron.
- Chofiiiis - gritó Sera y corrió hasta la camilla donde estaba acostada
Al momento en que quiso abrazarla.
- NO ME TOQUES! ¡DÉJAME NO ME HAGAS DAÑO! ALÉJATE DE MI - Serafín se detuvo abruptamente al escucharla - NO NO NO - negaba con su cabeza comenzando a llorar
- Amor, es Serafín no te va a lastimar - me acerque a su lado tomando su mano pero también me soltó
- No me hagan daño por favor, déjenme - sus piernas se doblaron abranzadolas con sus brazos, poniéndose en posición fetal
- Chingada madre, háblenle al doctor - dije al verla negada que me acercara yo también a ella - Bonita, tranquila, por favor, estás a salvo ya no te harán daño, son tus amigos y cuñados
- No no no, son esos hombres, son ellos - lloraba - Aléjalos de mi por favor que se vayan. Que ya no me hagan más daño - su respiración se hacía cada vez más acelerada
- Tranquila amor por favor, le puede hacer daño al bebé - le pedí intentando calmarla pero mis palabras no eran suficiente
Después de eso todos habían salido y yo un rato después de que le pusieran el calmante. Ahora estábamos todos en la sala de espera.
- Ovidio - me llamo Ismael - Los plebes agarraron a los hombres que estaban en las bodegas pero solo eran mandaderos ni uno es quien está detrás de todo esto
- Puta madre - me quite la gorra tallándome el cabello con frustración - ¿Donde los tienen?
- El Nini dijo que los metieran en sus bodegas que tienen en la sierra de Durango - informó - Los tiene colgados y los están torturando
- Bien, gracias Mayito - suspiré - No se quien chingados está haciendo todo esto, estoy hasta la madre. Me siento cansado y no se cuanto más aguantaré, por más que trato de pensar quien ha hecho esto no se quien es - me senté el sillón
- Carnal, vamos a investigar con otros socios para descubrirlo - me dijo Ivan
- Tengo que hablar con Chuy acerca de todo esto, tenemos que buscar una solución, como proteger a mi bonita - pasé mis manos por la cara - Si ya fueron capaz de dañarla como lo hicieron y traumarla a este nivel no se que sigue
- Cual sea la decisión se que Chuy la apoyará y será por su seguridad - apoyo Alf
Serfian había estado en silencio desde que había salido de la habitación, no había dicho nada. Sabía que para el era impresionante como ella no había dejado que se acerque y que lo que había dicho le estaba afectando.