Capitulo 3

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Sentí que alguien me movía haciendo que me despertara.

Abrí los ojos y vi a Chandler.

Me incorpore en la cama.

- ¿Sucede algo? - me frote los ojos.

- Perdón por despertarte pero necesito saber si vas a cenar algo.

- Me tomaré una manzanilla como siempre - me levanté de la cama.

- ¿Solo cenas eso?

- Cuando estoy en casa sola si, peor si salgo con mis amigas, quedo con ellas en casa o están mis padres entonces no, ceno algo más.

Chandler asintió y vi como no dejaba de mirar mi cuerpo.

La verdad me gustaría saber que pasaría por su mente cada vez que se me queda viendo.

- Bueno, vayamos a cenar - dijo saliendo del trance.

Chandler abrió la puerta y me dejó salir la primera.

Baje las escaleras delante de él moviendo mis caderas esperando que me viera.

Una vez ya en la cocina puse agua a hervir.

Chandler por lo contrario se tomó un vaso de agua, se cogió una manzana, la lavo y se apoyó en la mesa para empezar a comérsela.

Me quedé observándolo y le di un repaso de abajo a arriba pero antes de acabar me detuve en su brazo y su abdomen.
En esa postura de le marcaba el abdomen y como era manga corta la camisa se le notaban las venas del brazo.

- ¿Te gusta lo que ves? - preguntó haciendome salir del trance.

- ¿Cómo?

- Que si te gusta lo que ves, veo que me observas mucho.

Intenté buscar la palabras correctas para hablar pero lo único que logré es balbucear.

Chandler rió y se acercó a mí oído.

- Si necesitas algo, estaré en mi cuarto - me susurró con voz ronca y se fue mordiendo la manzana.

Me quedé en shock.

Cuando reaccióne me di cuenta que el agua ya estaba así que me preparé la manzanilla y subí a mi cuarto.

Dejé la manzanilla en la mesita y llamé a mis amigas por el grupo.

- ¿Que pasa? - dijeron todas a la vez.

- Tengo noticias sobre Chandler.

- ¡Cuenta! - gritaron todas a la vez.

Les conté todo y ellas chillaron.

- Me vais a dejar sorda.

- Atenea - dijo Stefany - te lo digo muy enserio, ponte ahora mismo linda ropa y vete a su cuarto para tirartelo.

- ¿Segura? - pregunté insegura.

- Ni se te ocurra desperdiciar está oportunidad - dijo Natalia en modo de advertencia.

- ¿Que llevas puesto? - preguntó Eli.

- Lo que tenía cuando llegasteis a mi casa.

- Vale, buena ropa, es comida y fácil de quitar.

- Joder Eli, exagerais demasiado.
¿Y si solo estamos malinterpretando todo?

- Ya te digo yo que no.

- No sé Stefany.

- Mira, tú ve, coqueteale e intenta hacer algo, aunque sea besarle, luego nos cuentas - dijo Natalia y todas colgaron dejandome con la palabra en la boca.

More time - Chandler Riggs Donde viven las historias. Descúbrelo ahora