6: Cagamos...

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Al llegar todos al centro comercial nos bajamos de los coches y nos pusimos a recorrer las tiendas. Fabián parecía el hombre más fastidiado del mundo, tenía una cara que ni él se la soportaba.

—Puras mamadas andamos haciendo.— Musitó con fastidio mientras todos veíamos cosas en una tienda de ropa.

—Ay ya wey ¿Si tanto te aburres para que viniste? Vete si te da la gana, nadie te va a extrañar.— Exclamó Filis ya molesto por la actitud de mi novio.

—No te voy a dar el gusto, y no me vuelvas a hablar así.— Contestó Fabián en tono amenazante.

—Apoco sí mamón ¿O sino que?.— Respondió Filis de la misma manera.

Se dirigieron unas miradas tensas que duraron unos segundos. Mi mamá y mi papá estaban en otra tienda viendo más cosas, así que solo quedábamos Juan, Ari, Filis, Fabián y yo. El tercero y el cuarto se acercaron viéndose como si se fueran a matar, pero justo Juan los interrumpió.

—Ya pendejos, no van a dañar la salida por andar discutiendo como niños de kinder— Los regañó, poniéndose en medio de los dos.

Yo decidí ignorar las discusiones que se escuchaban en el grupo y concentrarme en esperar a Ari, que se estaba midiendo una falda y un top en el probador.

Cuando salió todos nos volteamos a verla. Se veía preciosa, en especial Juan parecía hipnotizado viéndola. Hizo un sonido con su boca y se relamió los labios.

—Ush... ¿Quien pidió pollo?— Susurró apenas audible viéndola embobado. Yo lo escuché y me reí.

—¿Que tal se me ve?— Preguntó dando una vuelta.

—Pues Juan dijo que pareces un pollo, no se a que se referirá con eso pero para mi te ves espectacular... Es que todo te queda espectacular, por dios— La halagué con una sonrisa.

Ella miró confundida a Juan y él pareció salir de su trance para luego negar repetidamente con la cabeza.

—No, osea, no pollo literal... Es un piropo de Colombia, es como decir que estás muy churra.— Aclaró y todos lo miramos con una ceja alzada.

—Quedamos en las mismas Juan— Habló Filis por todos y Juan suspiró.

—Básicamente que... Estás más buena que comer con los dedos...— Dijo en voz baja.

—¡Habla como un hombre, carajo!— Ordenó Fabián.

—¡Que se ve espectacular! ¿Ya?— Aclaró Juan algo irritado.

—Awww que lindo.— Dijo Ari y le lanzó un beso.

Luego yo entré al vestidor y me medí un vestido que se ajustaba perfectamente a mi cuerpo. Era negro y tenía detalles en plateado, tenía tiras delgadas que lo sostenían en mis hombros. Me miré al espejo y no pude estar más feliz, parecía hecho para mi. Se me pegaba al cuerpo exquisitamente y era bastante cómodo, para ser sincera.

Salí con bastante confianza y todos me vieron de arriba hacia abajo con una sonrisa que se les notaba. Claro, excepto Fabián.

—Wow... Se te ve... Wow...— Habló Ari con la boca abierta y yo sonreí agradeciéndole.

—Si, te queda muy bonito— Complementó Juan.

Le sonreí de igual manera y miré a Filis y a mi novio, en busca de alguna opinión. Filis parecía completamente fascinado o como absorto en sus pensamientos, y Fabián... Fabián era Fabián. Me veía de arriba a abajo con el ceño fruncido.

—Te ves... Sencillamente perfecta, llévatelo— Pidió Filis, haciéndome sonrojar levemente.

—Gracias Fili.— Le dije con una sonrisa.

𝐄𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐭𝐢 (𝐅𝐢𝐥𝐢𝐬𝐱𝐀𝐦𝐚)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora