26: Oscar

36 7 0
                                    

Mi mirada se encontraba con la de Filis mientras las lágrimas de dolor que recorrían mi rostro no cesaban ni un segundo. Todo lo que él me había dicho, todas las mentiras que creí verdaderas. Todo lo que me dijo en ese altar, la fidelidad que me juró.

<<La puta fidelidad...>>

Me seguía pareciendo increíble que todo se hubiera desmoronado tan rápido, me parecía increíble que él tuviera la cara para estar ahí frente a mi, pidiéndome que lo perdonara despues de todo el daño que me hizo.

La rabia me estaba consumiendo, pero más me estaba consumiendo verlo frente a mi. Lo único que quería era correr, abrazarlo y besarlo de nuevo, quería que todo fuera como antes, pero sabía que no podía lastimarme más a mi misma, y eso me llenaba de impotencia.

Él me miraba a los ojos, esperando una respuesta de mi parte, respuesta que terminé por darle, levantándome de donde estaba sentada y señalando la puerta con mis ojos llenos de lágrimas.

—Vete de mi habitación, Óscar...— Pedí, con mi voz entrecortada y cerrando mis ojos. No quería ver su cara de desilusión.

—B- Beb— Iba a decir él, pero lo interrumpí, hablando más fuerte.

—Ni te atrevas a decirme así... Y vete de mi puta habitación...—Volví a pedir, aún con mis ojos cerrados.

Escuché los sollozos que salían de su garganta y se me partió completamente el alma. Hubiera hecho algo para evitarlo pero sentí unos brazos envolverme y su olor... Ese maldito olor... Ese olor que pertenecía al hombre que más amaba pero que más daño me había hecho en mi vida... Ahí supe que todo se había ido a la mierda.

Era mi esposo y lo amaba. No tenía control de mi misma al estar de nuevo entre sus brazos, me sentía completamente débil y sabía que cualquier cosa que me pidiera lo iba a conseguir, más por lo mal que me ponía escuchar sus sollozos en mi oído.

Yo tambien lloré con él, abrazándolo y dándole golpes en la espalda, frustrada con él y conmigo misma por idiotas.

Abrí mis ojos y miré los de él, rojos por el llanto. Sus ojos me hipnotizaron de una dulce manera que ni siquiera puedo describir, pero no sentía paz... No sentía ni una pizca de paz porque, aunque lejana, escuchaba esa voz en mi mente que me pedía a gritos que me apartara, que lo soltara y le dijera que me dejara en paz. Pero no podía. El corazón le ganó completamente a la conciencia.

—Por favor... M- Mi amor, no puedo vivir sin ti... Dame una segunda y última oportunidad... Hazlo por todos los años que tenemos juntos...— Pidió con su voz rota, a lo que más lágrimas corrían por mis mejillas y más sollozos salían de mi garganta.

No podía dejar de verlo a los ojos, la conciencia y el corazón no se ponían de acuerdo ni un segundo, pero el corazón, que latía con más fuerte en mi pecho, era lo único que podía escuchar. Estuve a punto de decirle que si, que olvidaría todo y que volveríamos a lo de antes, que no quería soltarlo y que quería que fuera por él que latiera mi corazón, como siempre. El hipnotismo que estaba ejerciendo en mi no me dejaba pensar en una respuesta negativa, estando pegada a su cuerpo y tan cerca de sus labios... Pero esa burbuja milagrosamente se rompió por un estruendo en el pasillo fuera de la habitación.

Reaccioné y me separé de Óscar, mirándolo con lágrimas en mis ojos y negando con la cabeza ¿En que demonios estaba pensando? No podía perdonarlo así como si nada, él me había traicionado más que nadie.

Sus ojos denotaban un serio rasgo de decepción y tristeza, pero pasé saliva e intenté ignorarlo, así como él ignoraba mis sentimientos cuando se cogía a la otra.

Salí de la habitación con la excusa de ir a ver que había pasado afuera, pero la verdad es que necesitaba desesperadamente salir de ahí, dejar de verlo y concentrarme en otra cosa.

Al salir ví cuatro botellas de cerveza en el suelo y a su alrededor estaban Roberto, Barca, Juan y Charlitos, cagandose de la risa, completamente borrachos.

Ví como también llegaban Ari, el Pibe y Filis detrás de mi a la escena, al igual que Ren, Rocío y Vicky

—¿Que verga pasó?— Preguntó Ren preocupada a los chicos, que serían cagandose de la risa.

—Jijiji, la Ren dijo "verga"— Dijo Juan, haciendo reír a los otros tres borrachos más aún.

—¿Que putas haces, Juan Guarnizo?— Preguntó Ari viendo a su esposo, que se quedó completamente callado y vió al suelo.

—Iiih, te regañaron, wey— Dijo Charlitos, riendo con los demás hasta que Vicky le dio un zape a cada uno, haciendo que todos quedaran callados.

—¿Nos van a explicar que pasó?— Preguntó Rocío, viéndolos.

—Es que haz de cuenta que íbamos caminando... Y el pendejo de Barca-— Empezó a decir Roberto pero Barca lo interrumpió.

—¡No fuí yo!

—¡Tu te callas!— Le dijo Vicky a Barca, regañandolo y luego volviendo a ver a Roberto.— Continúa, Roberto.

—Bueno... Entonces el pendejo de Barca se tropezó e hizo que yo tropesara a Barca... No, a Barca no...— Explicó todo enredado, borracho— Yo me tropecé con Charlos y Charlos con Juan... Y se nos calleron las chelas...

Todos los miramos, enojados. Ellos estaban borrachisimos y solo miraban al suelo.

—Es que son unos pelotudos... ¿Quien mierda les dio permiso para tomar?— Habló por primera vez el Pibe, rojo de la rabia.— Aniquiladores no es bar, así que no se como van a hacer pero mañana van a jugar sea como sea, no me importa su puta resaca. Y vos, Juan, deberías ponerlos en orden, eres el puto presidente, pelotudo.

Yo solo miraba todo, sin expresión alguna en mi rostro. Ellos miraban al suelo, avergonzados de que los estuvieran regañando frente a todo el mundo. Ari, Rocío, Ren y Vicky se reían en tono bajo.

—Ahora vayan todos a dormir, que mañana tenemos el primer partido.— Terminó de decir el Pibe y todos asentimos, cada uno caminando a su respectiva habitación.

Cuando iba a entrar a la mía, sentí que Óscar me agarraba del brazo y me hablaba, estuve a punto de mandarlo a la mierda de nuevo pero gracias a Dios, Abi me salvó.

—Filis ¿Puedes ayudarme a llevar a Juan a la habitación, por favor?— Preguntó mi hermana a mi esposo.

Él me miró un momento y yo me solté de su agarre para ver cómo él me veía con lástima y luego iba a ayudar  a Ari.

Entré a mi habitación, cerré la puerta y me tiré en mi cama, empezando a llorar desconsoladamente. Estaba harta de todo, ya no quería vivir esto. Pasé toda la noche llorando y pensando. Y todos mis pensamientos tenían el nombre que más me lastimaba en este mundo...

<<Oscar>>

Nota de la autora:

¿QUE ONDA MIS BEBEEEEEES? ¿Que tal el cap de hoy? ¿Les gustó?

Si les soy sincera me tardo tanto en actualizar porque no ando muy motivada, veo mucha gente que lee y no vota, no sé si es porque simplemente no les gusta o porque... No se, la verdad, pero es solo presionar un botón, nmmn

Y gracias a las personitas que siempre votan, por ustedes sigo actualizando... Una vez al mes por las otras personas pero si...

Pero bueno, también avisar que ya casi se viene el final, creo que puedo asegurar que no va a ser como se lo esperan.

Los tqm, hasta la próxima<3

𝐄𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐭𝐢 (𝐅𝐢𝐥𝐢𝐬𝐱𝐀𝐦𝐚)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora