𝐄𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐭𝐢 (𝐅𝐢𝐥𝐢𝐬𝐱𝐀𝐦𝐚)

16: Te cielo

4 años después...

Te cielo...

Una expresión que parece no tener sentido... Pero ¿De verdad no lo tiene?...

Frida Kahlo, la pintora más famosa de México, una vez le dijo a su esposo ésta expresión... "Te cielo"... Porque el amor que sentía por él no se podía expresar solo con un "Te amo" o un "Te adoro"...

El cielo es infinito y precioso, como el amor que sentía por él. Y aunque el cielo no siempre era azul y despejado, con una luz tenue proveniente del sol, siempre seguía siendo hermoso.

El cielo sigue siendo infinito así sea oscuro o claro. Sea de noche o sea de día. Sea lluvioso o sea soleado. Tenga nubes o sea despejado... Sigue siendo un cielo infinito.

Y por eso la expresión "Te cielo" tenía tanto significado para ella... Y ahora para mí...

Esa expresión se había vuelto parte de mi vida diaria, y todo por una sola persona: Mi esposo...

Si, lo dije bien, mi esposo... Mi lindo y precioso esposo, Filis.

El tiempo ha pasado rápido y con él muchas otras cosas, pero nuestro amor sigue siendo tan fuerte como un roble.

Después de nuestra boda, hace casi 4 años, Filis obviamente volvió a mudarse a Monterrey conmigo.

Ahora vivimos juntos, y no es por presumir, pero vivimos muy felices y bien.

Ambos tuvimos un boom en redes más o menos 6 meses después de casarnos, y ahora somos streamers y nos dedicamos de lleno a eso.

Ari y Juan, por su lado, también son streamers y unos muy famosos. Juan es el streamer más grande en Latinoamérica y Ari es la mujer streamer más grande de Latinoamérica. Estoy demasiado orgullosa de ellos.

En noticias más recientes, la Kings League hizo una nueva competición de fútbol, pero ésta es diferente...

Cada presidente de cada equipo tenía que fichar a streamers o creadores de contenido para su equipo, y habría una copa corta, obviamente jugada por los Streamers participantes de cada equipo.

Juan me preguntó si quería formar parte de Aniquiladores para esa copa y sin pensármelo dos veces dije que sí. Ari también estaría en el equipo.

Tendríamos 3 meses para practicar antes de la competición, la cual duraría un mes, en el cual obviamente tendríamos que quedarnos en España.

Y bueno... Luego de tantas actualizaciones sobre nuestra vida, ahora proseguimos con el presente.

Estábamos entrenando todo el equipo de Aniquiladores, ya que todos éramos Mexicanos. El equipo básicamente constaba de Ari, Renrize, Alana, Barca, Roberto, Aldo, El Mariana, Natalia Mx, Charlitos, Vicky Palami, Rocío y yo.

El pibe Verdirame, entrenador de los Aniquiladores de España, estaba en México, entrenandonos a nosotros.

Mariana era nuestro arquero, así que estábamos todos tratando de hacerle goles en la cancha. Cuando fué mi turno para patear, le pegué con todas mis fuerzas al balón, que se fué directo a una esquina y pegó en el palo, yendo directamente a la cara de ¿A que no adivinan quien?... Exacto, mi pobre esposo, que no tiene reflejos ni para espantar una mosca que le pasa por delante de los ojos.

El balón le pegó con fuerza en la cara y todos soltaron un pequeño grito de sorpresa y preocupación. Yo me quedé helada unos segundos y después salí corriendo hacia él, preocupada mientras todos se reían.

—¡Bebi! ¡Discúlpame! ¿¡Estás bien!?— Le pregunto preocupada mientras él ríe como un loco, acariciando con su mano la parte en la que le pegó el balón.

—No pasa nada, amor... Tranquila... Fué gol...— Eso nos hizo reír a todos.

—¡No mames, Amairani, me vas a matar al niño!— Dijo Ari, riendo y abrazando a Filis.

—Así soy todos los días, lo maltrato ¿Verdad que si?— Le pregunto a Filis y él asiente mientras se deja mimar de su cuñada, haciéndose la víctima.

Todos reímos por la situación y seguimos entrenando.

...

Luego del entrenamiento fuimos a cenar todos a un restaurante que quedaba cerca de la cancha.

Estábamos sentados conversando y comiendo hamburguesas, todos riendo y cada grupito con sus conversaciones.

—No mames, men ¿Tu estás seguro de que estás bien después de el putazote que te metió la Ama?— Preguntó Mariana a Filis, riendo.

—Pues sí, wey... Casi me desmayo pero aquí seguimos finos...— Contestó Filis, sosteniendo una servilleta en su nariz ya que le había sangrado un poco.

—Es que eres una culera, Ama. Le pegaste bien fuerte en toda la jeta.— Siguió riendo Mariana.

—¡No fué mi culpa, wey! ¡Obvio no lo hice a propósito!... ¿O sí?...— Bromeé, riendo junto a Filis, Mariana y el Pibe.

—Fuera de bromas, si fué un buen tiro, Ama. Tenés potencial, de verdad te lo digo. Solo te falta un poco de puntería y no va a haber ningún arquero que te frene ese balón.— Dijo él Pibe con una sonrisa, haciéndome sonreír también.

—Muchas gracias, Pibe— Le dije con una sonrisa y él asintió en respuesta, concentrándose de nuevo en la hamburguesa que se estaba comiendo.

Yo tambien seguí comiendo mi hamburguesa y luego miré a Filis. Él estaba mirando su teléfono con una sonrisa de oreja a oreja.

Estaba muy concentrado pero no le presté atención y solo seguí comiendo y conversando con los demás.

...

En la noche ya estábamos en casa. Había salido de bañarme y vestirme y ahora le estaba poniendo un poco de crema a Filis en la cara para que su piel no se lastimara tanto por el golpe con el balón que recibió.

—Pobrecito, mi Bebi... Tiene una esposa maltratadora...— Dije haciendo un puchero y besando su frente.

—Así me gustan, agresivas— Dijo él y rió, ganándose una risa y un leve zape de mi parte.

De repente su teléfono empezó a sonar y por inercia mi mirada viajó hacia la pantalla. No pude ver el nombre del contacto que lo llamaba, pero pude notar que tenía un emoji de corazón.

Filis se vió nervioso de un momento a otro y puso la pantalla del teléfono hacia abajo rápidamente, dejando que siguiera sonando pero sin dejarme ver quién era.

Se me hizo muy extraño, pero no tenía porqué desconfiar de él. Él nunca me sería infiel.

—¿No vas a contestar, mi amor?— Le pregunté. Él se puso rojo como tomate.

—N- No, mi princesa... Que me llamen mañana...

Cuando terminé de ponerle la crema asentí y le dí un beso en la frente.

Un rato después nos fuimos a dormir, dando por terminada nuestra aventura del día.