Distance | Jenlisa

O5: A little light

JISOO: ¿Nunca has hablado con ella?

JISOO: Sobre lo que piensa de ese día.

LISA: Siempre ha sido un tema tabú.

LISA: Supongo que estaba encubriéndome para no decirle a mis padres que todo pasó porque me pilló fumándome un porro mientras me liaba con una tía.

JISOO: «Una tía», ¿eh?

LISA: Lo siento.

Sonrió sin querer antes de modificar la frase. En esos momentos desayunaba a solas en la cocina y a lo grande, todo lo que quería y un poco más. Estaba muerta de hambre.

LISA: Quería decir con la chica más guapa del mundo.

JISOO: Mejor.

JISOO: Lisa, que este sea vuestro año.

JISOO: Habla con ella.

JISOO: Seguro que te ayuda con ese sentimiento de culpa que llevas arrastrando desde entonces.

JISOO: Estoy segura de que ella no cree que fuera por ti.

Para empezar, la echó de casa ella, si Louisa estaba fuera fue por su culpa. Si no la hubiese pillado fumándose aquel maldito porro con Jisoo, no habrían discutido y simplemente habría soplado las velas mientras sus amigos le cantaban el cumpleaños feliz. La noche tendría que haber acabado con sexo desenfrenado para las hermanas Manobal y no empapada en lágrimas en el interior de un hospital.

LISA: ¿Y si ella lo piensa también? Que fue todo por mi culpa.

LISA: A lo mejor por eso evito hablar con ella. No quiero saberlo seguro.

JISOO: Inténtalo y puede que te sorprendas.

LISA: Gracias.

JISOO: No me las des.

JISOO: ¿Necesitas algo para animarte?

Se le activó el sistema simpático de golpe, animado por la anticipación de una potencial imagen erótica, y se bebió de un trago el zumo que le quedaba en el vaso.

LISA: ¿Te refieres a una foto porno?

LISA: Si es así...

LISA: Sí, póngame un par.

JISOO: Te voy a enseñar algo que me compré ayer.

JISOO: Solo lo usaré en la cama.

JISOO: Dime si te gusta.

JISOO: (Foto de su reflejo en el espejo)

Jisoo lucía un vestido de cuero muy muy pegado que dejaba entrever sus costados a través de pedazos de tela rasgada y llevaba unas botas negras que le llegaban hasta las rodillas.

Perdió el aliento ante aquella imagen, a pesar de que nunca se había sentido atraída por ese estilo más oscuro, a Jisoo le sentaba de puta madre. Antes siempre le habían llamado mucho más la atención las chicas con otro tipo de atuendos, Rosé las denominaba «pijitas», pero ella prefería el término «textilmente atractivas». Antes. ¿Antes de qué? De Louisa, antes de Louisa, tal vez a raíz de esa noche empezó a fijarse en cosas menos luminosas.