3-1

130 14 0
                                    

—Bienvenido. Soy el Anciano Sihyuk.

Yoongi se apoyó contra la pared y miró su vaso. Deseaba que el Anciano simplemente terminara con lo que tenía que decir, para así poder examinar con detenimiento a la multitud para un poco de acción.

—Quiero agradecerles a todos por estar aquí, esta noche. Esta es una ocasión memorable para nosotros. Han pasado veinticinco años desde que terminó la Gran Guerra entre todos los paranormales, llevándose con ella una gran parte de nuestra población.

Sí, ese tipo de mierda. Era algo bueno que el mayor lo mencionase.

—Quisiera que todos hagan un brindis conmigo, en memoria de aquellos que perdimos. —El Anciano levantó su copa de champán.

—Jamás los olvidaremos.

Echó hacia atrás su vaso, drenándolo de un trago y comenzó a alejarse de la pared. Ahora que se había quitado eso del camino, había un lindo y pequeño rubio que quería conocer mucho mejor.

—Como he dicho, esta es una ocasión trascendental para todos. En los últimos veinticinco años, desde que terminó la Gran Guerra, la United Paranormal Alliance of Cooperation ha estado observando y esperando. No lo haremos más.

Puso los ojos en blanco y gimió, cuando se giró para enfocar su atención en el estrado donde estaban los Ancianos.

—La pelea entre especies deben parar. —Otro Anciano se paró junto al primero mientras hablaba. —Los humanos saben de nosotros, y han aprendido a aceptarnos entre los suyos. Sin embargo, su tolerancia sólo durará un tiempo. La lucha constante entre las comunidades paranormales ha sido objeto de escrutinio. Ya no tenemos el lujo de observarlos resolver sus propios desacuerdos.

Dejó de escuchar después de eso. Él no peleaba con nadie, por lo que obviamente el hombre estaba hablando con alguien más. Escaneó la habitación en busca del rubio que había perdido, y levantó la cabeza cuando varios jadeos y gritos se elevaron por la habitación.

¿Cuál era el problema?

—A causa de que continúan peleando entre especies, no pueden reclamar a una pareja de su misma raza. Deberán elegir una fuera de tu propia especie. —El Anciano parecía que estaba disfrutando demasiado de esto.

—Si fallan a la hora de traernos una pareja ante este Concilio al filo de la medianoche de mañana, serán perseguidos y ejecutados como un paria.

Resopló. Tendrían un infierno de tiempo para hacer cumplir esta nueva ordenanza. ¿Cómo esperaban forzar a todos a aparearse fuera de su especie? Era ridículo.

—Para asegurarnos de que encontrarán una, se ha añadido algo especial a la poción que han bebido, cada uno de ustedes. — Continuó el Anciano. —Eso asegurará que la necesidad de aparearse fuera de su especie supere la de pelear. Es un aditivo particular que induce el calor de apareamiento en cada uno de ustedes. No serán capaces de negar la necesidad de aparearse.

Miró su copa de champán e hizo una mueca. ¡Hijo de puta! Hombre, su compañero de cuarto, Wonwoo, iba a estar enojado. El hombre odiaba venir a estas cosas, pero él siempre lo arrastraba. Oops. No es como si supiera que los Ancianos los iban a obligar a todos.

Aun así, probablemente había una forma de evitarlo. Siempre había algún tipo de cláusula de escape.

—Y sólo en caso de que crean que puedan tratar de romper el hechizo —, dijo el Anciano Sihyuk. —Hemos añadido una pequeña clausula especial.

¡Aja! Lo sabía. El Anciano tenía toda su atención ahora, mientras esperaba ansiosamente para descubrir cómo iba a salir de este lío.

—Cualquiera que intente negar los compromisos que derivan de este hechizo, será maldecido inmediatamente acorde a su propia raza. Los vampiros ya no serán capaces de beber sangre. Los Shifters ya no serán capaces de cambiar. Los usuarios de magia ya no serán capaces de hacer magia, y así sucesivamente. Estoy seguro de que entienden mi punto.

A.a.l.M.N. (1-20)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora