PREDATOR LOVE - Eddie Munson +18

CHAPTER NINETEEN.🦇

𝕀𝕟𝕧𝕚𝕤𝕚𝕓𝕝𝕖 𝕤𝕥𝕣𝕚𝕟𝕘𝕤
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𝟹𝟷 𝚘𝚌𝚝𝚞𝚋𝚛𝚎 𝚍𝚎 𝟷𝟿𝟿𝟺.

Luego de toda la información que nos proporcionó Eddie, las investigaciones de Eleven y Jim, determinamos que tenemos que estar pendiente de Max sin ponerla alerta, tratar de que Vecna no nos detecte.

Dustin sugiere que en cuanto llegue El a Hawkins y con la ayuda de la habilidad de Eddie podríamos dormir a Max y que sus sentidos no estén activos mientras ella explora en su mente, el único problema es que Eddie necesita estar muy cerca para poder lograrlo.

Claramente Susan, la mamá de Max no va a permitir que Eddie se acerque, ella no sabe nada de lo que realmente pasa en Hawkins. Así que les sugiero que en cuanto llegue Eleven lo tomaremos como excusa para ir a visitarla y debemos inventar algo para distraer a Susan y que Eddie pueda escabullirse en su casa.

Es noche de Halloween y hay bastantes personas en la calle. Antes de llegar a casa fui al supermercado y compré varios paquetes de dulces y chocolates, los puse en un bowl y nos sentamos con Wayne en la entrada de la casa para darle dulces a los niños que se acerquen. Es un momento agradable en el que hablamos de muchas cosas, fumamos un cigarrillo y reímos en ocasiones. Luego de que se terminaron los dulces entramos a casa y Wayne finalmente se fue a dormir.

Halloween significa para mi otra cosa, en una noche como está el universo permitió que coincidiera con Eddie, cada año que estuve sin él fue una tortura, lloraba aun mas que cualquier noche, veía las películas de terror que a él le gustaban, recordaba como hacia voces graciosas al narrar las líneas de los personajes porque las sabía de memoria.

Esta noche no es una excepción, también en el supermercado compre una botella de vino, me acomode en el sofá de la sala para ver Gremlins, es una de las favoritas de Eddie. Serví una copa de vino y también destapé un par de chocolates. Esta vez no estoy llorando, pero tengo temor de lo que sea que pueda pasar con Eddie. En el caso de que no funcione la teoría que tengo con su sangre, el hecho de que si se queda como un vampiro y no pueda desprenderse del Upside Down.

Me dejo envolver de mis pensamientos, solo estoy viendo a la pantalla del televisor, pero no le estoy prestando atención a la película.

—Esa es mi escena favorita —me toma por sorpresa haciéndome saltar en el asiento, volteo a verlo y está de pie atrás del sofá —cuando los Gremlins se toman el bar todo lo que sucede es muy absurdo y termina siendo gracioso.

—No te sentí llegar —le estiro mi mano para invitarlo a sentarse conmigo, la toma de inmediato sonriendo. En cuanto lo hace le doy un abrazo escondiendo mi cara en su cuello.

—Me gusta mucho esa película —responde a mi abrazo, pero no despega la vista de la tele.

—Lo sé —murmuro. Me causa gracia, así que me quedo entre sus brazos permitiéndole disfrutarla.

En cuanto terminó la película me dispuse a levantar el desorden, Eddie agarra la botella para inspeccionarla y luego voltea a verme divertido.

—Te tomaste más de la mitad.

—Fue antes de que llegaras —me excuso en un tono gracioso, se la quito de las manos para llevarla a la cocina con el resto de las cosas que levanté.

Verifico el reloj y marca casi la una de la madrugada. Regreso con Eddie sentándome a su lado.  
—Lo siento, se que tus noches de Halloween dejaron de ser divertidas hace muchos años —sus ojitos rojos me ven atentos.