𝐓𝐰𝐞𝐧𝐭𝐲-𝐨𝐧𝐞

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Maratón 2/2

𝐀𝐥𝐛𝐚.

Me pongo un pijama calentito lo más rápido posible y me tumbo en mi cama tranquilamente.

Son las 2:00 AM, pero yo tengo que editar fotos.

Me paso las fotos de la cámara a el ordenador y me pongo a editarlas.

Los ojos me pesan y cada vez los voy cerrando más, pero trato de aguantar.

Una vez termino, envío a casa jugador por correo fotos suyas, y luego subo cosas en la cuenta del club.

Cierro el ordenador y lo dejo en la mesita de noche que más cerca me pilla.

Suspiro una y otra vez y dejo que el sueño se apodere de mi.

|...|

Mi alarma suena, las 10:00 AM.

Me remuevo en la cama varías veces y miro hacía el ventanal nevado.

Hoy habíamos planeado ir a visitar Manchester todos juntos.

Me levanto con toda la pereza del mundo y voy hasta el ventanal a contemplar las vistas.

Me quedo así unos segundos hasta que decido ducharme para despejarme y así espabilarme un poco más.

Cuando salgo, me pongo un chándal blanco y unas Converse Dior.

Me cepillo el pelo, me maquillo natural y me lavo los dientes.

No tengo ganas de desayunar, por lo que me quedo en la habitación con el ordenador hasta que Borja me avisan de que ya van a salir.

Cojo mi bolso y salgo de mi habitación, cerrando la puerta.

Guardo la tarjeta de la habitación en el bolso y llamo al ascensor.

Bajo hasta la planta baja y voy hasta donde están la mayoría.

— Hola guapa — Iris me da dos besos.

Le doy yo también dos besos por educación, no por que quiera.

Saludo a Borja con un súper abrazo, al igual que a Joaquín.

Cruzo mi mirada con el de mi ex-novio y siento un cosquilleo por mi vientre cuando él me sonríe.

Apartó mi mirada y sacudo la cabeza.

Comienzo a hablar con Borja mientras andamos por un Manchester nevado.

Nos paramos en una cafetería a comprar, y yo me compro un colacao.

Al salir llamo a Borja, chasqueando la lengua.

— Tsss — lo llamó y el gallego se gira.

— ¿Crees que Juan me quiere? — preguntó inocente mientras él y su novia se besan.

— Antes creía que sí, ahora ya no estoy seguro.

— Bueno... Me dijo que dejaría a Iris el otro día — confesé y él abrió los ojos.

— Joder, pues vaya... Le está metiendo la lengua hasta la campanilla ahora mismo.

Sonrió triste y seguimos con nuestro paseo.

Le voy sacando foto a lo que me parece más interesante.

Después de comer, vamos a un tour por el estadio del Manchester City.

Es tela de grande — dice Borja cuando salimos del estadio, asiento con la cabeza dándole la razón.

Después de visitar el estadio, volvemos al hotel para ir a la piscina climatizada, que se veía las vistas a la ciudad en pleno atardecer.

𝐓𝐞 𝐛𝐮𝐬𝐜𝐨 𝐞𝐧 𝐥𝐚𝐬 𝐞𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬 ; 𝐉𝐮𝐚𝐧 𝐌𝐢𝐫𝐚𝐧𝐝𝐚¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora