Capítulo 24

787 93 3
                                    

── Bueno, suponiendo que conseguimos suficientes armas y municiones... ¿Cómo vamos a hacer para acercarnos a Choi sin que nos descubran? ── Preguntó Mingi, él seguía contándose como parte del plan.

── Podemos hacerle una emboscada. ── Propuso el menor del grupo──. Puedo averiguar cuándo saldrá a hacer uno de sus cobros y hasta qué ruta piensa tomar. Podemos emboscarlo con su gente.

── No creo que sea buena idea, él siempre sale con mucha gente... Nosotros no somos suficientes. ── Repuso San.

── Esperen, para esa fase del plan, ¿Cuántos participaríamos? ¿Ahí sí estará la gente de Bangchan? ── Preguntó Yunho esta vez, parecía perdido, pero no era el único. Cada quien daba ideas distintas, tenían la mala costumbre de interrumpirse y hablaban al mismo tiempo, haciendo difícil seguir el hilo de la discusión.

── Si ellos quieren participar sí. Seguramente querrán hacerlo, tienen muchas más razones que nosotros.

── Hongjoong, ¿Qué pasa si ellos deciden actuar por su cuenta? ── Dijo Seonghwa, suscitando una ligera atmósfera de tensión de repente. Debían asegurarse primero de estar en la misma página que sus vecinos, pues, aunque ahora estaban en deuda con ellos por haberlos acogido, los años de rivalidad no se irían al olvido y aquel grupo seguía teniendo sus propias motivaciones, no existía razón alguna para creer que seguirían sus planes o sus reglas.

── Hablaré con Christopher, si ellos están planeando algo por su cuenta, podrían contar con nosotros, si es que el plan nos conviene. Y si quieren unirse a nuestro plan, como dije, podrán hacerlo.

── No me gusta la idea de juntarnos con ellos. ── Mingi seguía sin comprar del todo la idea de atacar al padre de San, menos si tenían que involucrar a extraños en él. Aunque no fuese a admitirlo, tenía miedo. Temía lo que pudiera hacerles a sus amigos, a su hermano, pero tenía muy claro también que no podían seguir viviendo bajo su yugo, bajo sus amenazas constantes y la eterna deuda que el viejo usurero no dejaría saldar nunca. Yunho tomó su mano, apretándola con disimulo, pues él sí se daba cuenta de lo que atormentaba a su pareja y cómo le afectaba el no poder ayudarlos.

── No nos apresuremos en tomar una decisión hoy, pero es bueno que todos hablen y propongan algo para elegir la opción más viable y segura. ── Dijo, sin soltar la mano de Mingi.

Así mismo hicieron, cada uno habló, dio su opinión y agregó o quitó cosas de los planes que otros proponían. La noche cayó y se alargó con la conversación, con las ideas de los chicos que quedaron plasmadas por escrito en la agenda de Hongjoong, quien prometió organizar todo antes de que volvieran a reunirse para seguir discutiendo sus planes. Yunho se llevó a Mingi adentro para que tomara su medicina y descansara, mientras que el resto se dirigió cada uno a realizar las rondas de vigilancia que les correspondía. No habría peleas hasta la siguiente semana, pero sí calles que mantener a salvo, así que Choi San se le unió a Wooyoung en su primera "cacería".

Todavía era temprano, pero el frío obligaba a todos a encerrarse en sus casas, por lo que, al salir de nuevo a la calle, no vieron ni un alma caminando por ahí. No supieron en qué momento acabó la ceremonia de despedida de Kim Jin-Ah, pero a Wooyoung le fue inevitable no sentirse acongojado cuando pasaron cerca a la casa de su padre. Todas las luces estaban apagadas, no provenía de allí ni un solo ruido.

── ¿No viste al señor Kim cuando fuiste a buscar a tu tía? ── Preguntó Wooyoung a su compañero. No habían hablado mucho desde que salieron de casa.

── Sí, lo vi. Al parecer solo se desmayó por el agotamiento. No había descansado ni comido nada y unas vecinas lo estaban obligando a comer cuando llegué. ── Le contó──. Pobre hombre... Se veía muy triste.

𝙎𝙩𝙧𝙚𝙚𝙩 𝙁𝙞𝙜𝙝𝙩𝙚𝙧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora