CAPÍTULO 11

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*JANA*

Ya el sábado había llegado que esta ni más ni menos que mi boda inesperada,  me sentía realmente nerviosa, no se si Kayla se esta arrepintiendo, esta mañana cuando la vi se veía nerviosa, pero en su cara se podía ver felicidad, sera que ¿esta feliz por qué me casé con ella?, no lo sé pero la que andan nerviosa y feliz soy yo.

— Vamos Jana, muevete necesito terminar de arreglarte el maquillaje – dice una las chica que sea vuelto mi amiga hace unos días.

— bueno, ya ya, termina – le digo

Al terminar de arreglarme el maquillaje y el pelo, tocan a la puerta, la verdad me sentía tranquila pero por otro lado me sentía realmente nerviosa.
No pude decir nada, solo pude escuchar a unas de las estilistas que pase, al decir pude escuchar una voz de un hombre.

— Jana de futura esposa te mando este detalle – dice carla.

Me di la vuelta y en sus manos pude ver un gran roma de rosas rojas una carta en el media de ellas y una caja negra pequeña.

— damela – incline mis manos. Agarre las flores y las huelo, realmente son mis favoritas.

Agarro la carta que tenía en las flores.

"Aunque me tomes con mi corazón muy fría, quiero decir que estoy nerviosa y a la vez muy emocionada de verte con ese hermoso vestido....ya te extraño te quiero.

Te espero con ansias

Ett: tu futura esposa"

Al leer aquella no pude contener que una sonrisa saliera de mis labios, mire la cajita y decidiré abrirla tambien.

Adentro hay un collar dorado con una llave, la llave tenía la inicial K, era muy lindo, y a parte traía otra carta más.

"Espero que te guste mucho, aunque parece raro ya llave, esa llave significa mucho para mi, y lo será para ti, pronto sabrás de que es esa llave, quiero que la uses hoy".

Al no esperar más me la coloque y realmente se veía muy lindo, pero se ve muy costoso.

— muy bien falta 10 minutos para que salgas de este cuarto Jana – me dije una estilista.

Me terminar de arreglar los últimos accesorios que me quedaban para después estar parada atrás de una gran puerta blanca.

— ¿Kayla está hay? – pregunte nerviosa.

— si....y se ve muy sexy y hermosa – me dice Carla. Ya que no tenía ningún familiar presente, Carla es como mi hermana, ella misma se puso en llevarme en el altar.

Luego de uno minutos, la canción comenzó y las grandes puertas abrieron.

— ¿Lista? – me dijo tomando del brazo.

Yo solo me decidí por asentir las palabras no me salían.

Las puerta se abrieron dejando ver a todas las personas paradas era un salón muy grande blanco, con muchas decoraciones como flores lamparas y más cosas muy linda y costosas.

No me enfoqué mucho en el salón, toda mi atención la tenía mi futura esposa, traiga un traje todo blanco y con unas tacones de punta blanco que le quedan maravillosamente sexy, Carla tenía mucha razón se ve muy hermosa, aún no puedo creer que me vaya a casar con una mafiosa, a parte es primera vez que la veo con el cabello lacio, dios es muy sexy.

La Esposa De Una Mafiosa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora