El Impostor (Male Reader X Mikey)

Confianza (5)

La pelea había estallado y nos vimos obligados a separarnos para poder lidiar con nuestros oponentes. Mientras golpeaba a varios miembros de mi pandilla, sentía cómo mi cuerpo se movía con gracia y precisión, esquivando sus ataques y contraatacando con fuerza. Hasta ahora, todo iba según lo planeado. Tanto Baji como Draken manejaban perfectamente los ataques que recibían, demostrando su destreza y valentía. Aunque sentía pena por los miembros de mi pandilla, que a pesar de ser más en número, no les podían hacer frente. Y luego estaba Mikey. El apodo de "invencible" le quedaba perfectamente, ya que parecía inquebrantable ante los golpes que recibía.

Sin embargo, en medio del caos de la pelea, noté que uno de los miembros de mi pandilla estaba a punto de golpear a Mikey en la cabeza con un bate de béisbol. Sin pensarlo dos veces, grité su nombre y corrí hacia él, logrando apartarlo a tiempo y recibiendo el golpe en su lugar. El impacto fue fuerte, pero me mantuve en pie, protegiendo a Mikey.

-¿Eh? -Mikey reaccionó rápidamente, golpeando al agresor en la cara con un movimiento rápido y preciso, rompiéndole la nariz. Su habilidad de combate era impresionante.

-¡Retirada! -Uno de los miembros de Black Shadow gritó esa orden, y rápidamente todos se dispersaron, escapando de la escena.

Mientras los miembros de Black Shadow se alejaban, yo me senté en el suelo, sintiendo un dolor punzante en la cabeza y en el hombro donde había recibido el golpe. Mikey se agachó, quedando a mi misma altura, su mirada reflejando una mezcla de preocupación y curiosidad. Baji y Draken se acercaron a nosotros, preocupados por mi estado.

-¿Estás bien? -Mikey me veía de una manera extraña, como si estuviera tratando de entender algo más allá de las heridas físicas. A pesar del dolor, sonreí como si estuviera feliz.

-¡____! Tu cabeza está sangrando -Baji señaló mi herida, y al tocarla, confirmé que era cierto. La herida se había vuelto a abrir.

-Es cierto, me sorprende que no estés inconsciente a pesar del golpe que recibiste -Draken mantuvo su semblante serio, pero pude percibir la preocupación en su voz.

-Todo fue porque me apartaste y recibiste aquel golpe por mí. Gracias, ___-Mikey sonrió y se puso de pie, extendiendo su mano para ayudarme a levantarme. Su gesto amable contrastaba con su actitud desafiante durante la pelea.

-¿___? ¿Es un apodo? -No podía evitar sentirme confundido por el comportamiento de Mikey. Era un chico peculiar, difícil de entender.

-Sí, ___. ¿No te gusta? -Mikey me miró con una expresión felina, como si estuviera disfrutando de un nuevo juego.

-De nada sirve que te opongas, ___. Aunque no te guste, te seguirá llamando de esa manera -Baji suspiró cansado, cruzando los brazos y mirándome con compasión. Parecía entender la dinámica entre Mikey y yo mejor que yo mismo.

-No, en realidad me gusta. Aunque ahora creo que debería ir al hospital para que me revisen, así que ya no podré acompañarlos -Sonreí y puse mi mano en mi nuca, fingiendo estar apenado.

-No te preocupes. Además, después de verte pelear, ___, realmente quiero que estés en mi pandilla. Pero no estarás bajo el mando de Baji, sino bajo el mío -Mikey me sonrió y nuevamente invadió mi espacio personal. Su actitud era desconcertante, pero no podía evitar sentirme atraído por su carisma.

-¡¿Eh?! Maldito enano, no es justo. Yo encontré a ___, así que debería estar bajo mis órdenes -Baji parecía realmente molesto, y le gritó a Mikey, reclamándole por su decisión.

-Pero ___ es más fuerte que tú, Baji. Así que estará bajo mis órdenes -Mikey miró a Baji con una sonrisa desafiante, como si estuviera disfrutando de la situación.

Después de eso Mikey y Baji comenzaron a discutir por el hecho de con quién de los dos estaría si en la división de Baji o bajo las órdenes directas de Mikey no entendía nada, se supone que la relación de un capitán y su comandante debe de ser sería, pero ellos dos parecían un matrimonio el cual jamás estaba de acuerdo

-Será mejor que te vayas a revisar esa herida, o podría infectarse. Esto tomará más tiempo -Draken me miró con preocupación y, con un gesto de su mano, me indicó que me fuera.

-De acuerdo, entonces me voy -Antes de partir, le entregué mi número a Draken para que pudiera contactarme en caso de necesitarme.

Después de ir al doctor y recibir puntos de sutura en mi cabeza para cerrar la herida que se había vuelto a abrir. Decidí llamar a mis amigos y reunirnos en la base de Black Shadow para discutir los resultados de nuestro plan anterior.

-___, ¿cómo te fue? -Aiko fue la primera en preguntar, su voz llena de curiosidad mientras esperaba ansiosa por escuchar los detalles.

-Todo salió bien, excepto que mi herida se volvió a abrir debido a un golpe -Me dejé caer en una silla, sintiéndome cansado y frustrado por el dolor en mi cabeza.

-¿Lograron golpearte? -Jake me miró incrédulo, incapaz de creer lo que estaba escuchando.

-El golpe iba dirigido al Comandante de Toman, pero logré apartarlo. Aunque el golpe fue leve, logró abrir mi herida -Toqué ligeramente la herida por encima de la tela de mi sudadera, sintiendo una punzada de dolor.

-Bueno, al menos ahora la herida está justificada, así nadie sospechará -Yukio se recostó en su silla, suspirando cansado. El ambiente tenso de la habitación se relajó un poco con su comentario.

-¿Y qué dijo el comandante de Toman? -Nami parecía curioso, sus ojos brillando con interés.

-Me agradeció y me puso un apodo, pero realmente no sé qué piensa. Es extraño, no logro leerlo a través de sus acciones, expresiones, y demás. Parece que me llevará un tiempo entenderlo -Observé a los demás miembros de mi pandilla, buscando alguna señal de comprensión en sus rostros.

-¿Un apodo? Realmente es raro, pero parece que ya te ganaste su confianza, así que ahora solo aprovéchate de esa pequeña oveja y espera el momento perfecto para atacarlo -Lestat habló con su habitual despreocupación, mientras disfrutaba de su comida.

-Eso es exactamente lo que haré, Lest. Después de todo, lo único que necesito es información, y Toman tiene varios miembros que pueden proporcionármela. Y cuando consiga lo que quiero de ellos, dejaré que las sombras los consuman -Sonreí con determinación, mirando a mis capitanes, quienes respondieron con sonrisas propias, cada uno a su manera.

-jajajajaja, esto será realmente divertido. Veamos cuánto tiempo logra sobrevivir Toman -Lestat soltó una risa siniestra y clavó una navaja en una foto donde aparecían todos los líderes de Toman. Su gesto mostraba su confianza en nuestra estrategia.

Después de la reunión con mi pandilla y de discutir diversos temas sobre las divisiones, las reuniones y cómo nos mantendríamos en contacto para no levantar sospechas, regresé a mi casa. Sin embargo, recibí una llamada de un número desconocido. Aunque dudaba en contestar, decidí hacerlo para averiguar quién era.

-¿Bueno? -Hablé con un tono serio y algo cansado, reflejando el agotamiento de un día lleno de acción.

-¡Hola, ___! -Del otro lado de la línea, escuché una voz alegre y ligeramente infantil. No había dudas, sabía de quién se trataba.

-¿Mikey? -Pregunté un poco incrédulo, aunque en el fondo ya sabía que era él.

-Sí, soy yo. Ken-Chin me dio tu número y quería saber cómo te había ido con el doctor -Mikey hablaba con un tono infantil, pero al mismo tiempo, su curiosidad era evidente. Por alguna razón, sentía como si estuviera hablando con un niño pequeño, lleno de energía y entusiasmo.

-Tuvieron que suturar una parte de mi cabeza, pero me tomé algunos analgésicos, así que ya no me duele tanto -Abrí la puerta de mi casa, quitándome los zapatos y dejándolos junto a la entrada. Me recosté en el sillón de la sala, sintiendo el suave tejido bajo mi cuerpo cansado.

-¿Oye, mañana estás ocupado? -Mikey preguntó con un tono lleno de curiosidad, su voz resonando en mis oídos mientras luchaba contra el sueño que amenazaba con envolverme.

-No, mañana es fin de semana y estoy libre. ¿Por qué? -Mis párpados se volvían cada vez más pesados, y sentía que en cualquier momento me quedaría dormido, sumergiéndome en un sueño reparador.

-Entonces vamos a comer. Así podrás conocer al resto de los miembros de la pandilla y podremos conocernos mejor. ¿De acuerdo? -Mikey hablaba con un tono de interés y curiosidad, su entusiasmo era palpable, incluso a través del teléfono. Realmente me parecía extraño cómo su energía parecía no tener límites.

-De acuerdo, entonces envíame la dirección y la hora después para poder encontrarnos -Me acomodé en el sillón, recostándome de lado para evitar presionar mi herida y poder descansar mejor.

-De acuerdo, nos vemos mañana, ___ -Mikey continuaba hablando de manera animada mientras yo luchaba por mantenerme despierto, mis párpados cayendo lentamente bajo el peso del agotamiento.

-Hasta mañana -Después de decir eso, colgué el teléfono y me dejé llevar por el sueño que me envolvía, sumergiéndome en un profundo descanso mientras mi cuerpo se recuperaba del agotador día.
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Hasta aquí el capítulo de hoy por favor comenten que les parece hasta hora la historia y si les gusta, también dejen un me gusta y gracias por leer.