Capítulo 25

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Capítulo 25: familia disfuncional. 

—¿Muerta?

Automáticamente mi mirada terminó enfocando a Venus, y me sentí afligido al notar que no lo procesaba, era la tercera vez que lo preguntaba. Seguía de pie sin mover un solo músculo, con los ojos bien abiertos y los labios secos, sin aliento. Me preparé para cualquier tipo de reacción y creo que todos lo hicieron, no era el único atento a ella. 

Este campamento cristiano se ha vuelto el punto de encuentro pues es el único lugar en el que ningún demonio puede entrar. Talasea, Shao, Gabriel y yo solo miramos, esperando. Hace unos minutos que aparecieron para contar lo que había sucedido, y aunque me encontraba impactado seguramente yo no sentía ni una cuarta parte de todo lo que estaba acumulando Venus en este instante. 

Sabía que no podía acercarme y al echarle un vistazo a mi hija noté que ella también lo sabía. Venus no lo hacía a propósito, jamás, pero cuando se ponía en estado de colapso podía ser verdaderamente explosiva… Algo que le heredó a nuestra hija. Cuando Talasea era solo una niña muchas veces perdía el control de su poder hasta el punto de dejar ciega a una persona o desintegrar a cualquier ser vivo que se le atravesara en el camino. Cuando esto pasaba era yo quien tenía que resolver el asunto antes de que Venus lo supiera, porque las pocas veces que veía los desastres que provocaba Talasea ella se enojaba al punto en el que terminaba actuando igual o peor.

Entonces había dos diosas peleando con magia en casa, porque claro que Talasea no se quedaba callada cuando su madre la regañaba. Y bueno… Terminaban lanzándose bolas de magia como unas lunáticas.

Gabriel asintió de nuevo, compartiendo una mirada de preocupación con Talasea, quien se mantuvo derecha atenta a su madre.

—La encontré amordazada en el fondo del río amazónico. Tenía múltiples heridas y por lo visto… Fue torturada… No pudo soportarlo.

Mis manos se vuelven puños, es muy obvio quién ha sido el causante. No puedo imaginar el nivel de tortura que han usado hasta el punto de hacer que una deidad elija morir antes que seguir aguantando. Me vuelvo a enfocar en Venus, atento.

El punto es, que tanto Talasea como yo sabemos que si no queremos que reaccione como deidad enfurecida es mejor no acercarse hasta que lo veamos necesario. Porque aunque también es peligroso, prefiero mil veces que Venus reaccione como una persona normal lo haría. 

Pero no lo hizo.

La tierra tembló, maldije mentalmente cerrando los ojos al sentir cierta molestia en mis entrañas, como si me pellizcaran con agujas. Supe que no solo era yo el que me estaba sintiendo así cuando Gabriel y Shao se doblaron sosteniéndose el estómago, gimiendo de dolor. Talasea suspiró poniéndose las manos en la cabeza, y para cuando volví a poner mis ojos sobre Venus solo pude sentir tristeza, pero no la suya, mía. 

Tenía los ojos completamente rosados, incluyendo su globo ocular. Ojos brillantes como una luz humeante. En ellos se acumularon las lágrimas, y cuando me acerqué a ella tambaleándome por el temblor tan repentino ella me miró. Coloqué una mano en su hombro y lo apreté ligeramente.

Pero el gesto solo terminó de romperla.

Encogió el cuerpo cayendo de rodillas, gritando de dolor como nunca antes la había oído hacerlo, y se me rompió el corazón cuando se sujetó el pecho en un puño, gritando entre lágrimas, ahogándose en una agonía interna que yo ya no podía sentir… No podía sentirla a ella, ya no. Luego se llevó las manos a la cabeza, gritando más fuerte, e hice una mueca cuando Shao le rogó que se detuviera pues los lastimaba.

A esto se refieren muchos cuando dicen que era mejor que Venus no se involucrara en nada. A esto se refiere mi madre cuando dice que todos le temen a Lyra. 

Sunset Memories: The Death |Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora