IV. Vuelta por el Universo

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Gustavo's POV:

Cuando salió por la puerta y me besó en la mejilla, sentí como si tuviéramos 15 años otra vez. Recuerdo estar en la plaza con otros chicos de nuestra edad y como todos dejaban de lado lo que estaban haciendo cuando ella aparecia, tan misteriosa y fascinante, todos querían acercarse a ella y es cierto que me envidiaban, harían cualquier cosa para estar en mi lugar. Y como logré romper la capa misteriosa de su personalidad, podría decir que era realmente fascinante. Su cabello era naturalmente hermoso y salvaje, algunos mechones caían hasta la altura de las cejas y su sonrisa se perfilaba en rojo, ganando aún más énfasis.

"¡Maldita sea!" — Maldije mentalmente cuando me di cuenta de que no importaba cuánto tiempo pasé evitando a Vicky, ella todavía hacía que me doliera el corazón dentro del pecho.

La verdad es que me alejé no sólo para trabajar en nuevos proyectos, sino porque también era angustioso estar cerca de ella todos los días e irme a dormir todas las noches preguntándome qué me había hecho, deseando que no fuera tan perfecta. Siempre he sido tan seguro y suficiente, pero con ella todo era diferente, me sentía tan indefenso que no me reconocía. No fue fácil verla con otros pibes, pero estaba bien, no podía hacer mucho paralizado por el miedo a ser rechazado por ella, como los demás después de muy poco tiempo.

Intentaría concentrarme en nuestro nuevo proyecto y solo hablar de eso, pero sabía que en lo segundo seguiente estaríamos hablando de varias otras cosas impredecibles, como siempre fue. Su presencia era contagiosa, el viento alborotaba su cabello y me traía su irresistible perfume, me encantaba cada nota de ese olor dulce y único, soñé un millón de veces con esto pegado a mi piel cuando debería estar feliz de ser simplemente su mejor amigo.

Ella parecía un poco perdida, eso es cierto, pero habladora, con sus delicadas manos gesticulando casi frenéticamente. Recibir tantas palabras y gestos de ella me hizo sentir casi especial. Mientras ella prefería a Seru Girán y yo prefería a Pescado Rabioso, pasábamos horas hablando de música; me gustaba dibujar pero ella inevitablemente nació para hacerlo y encajamos magicamente como piezas de un hermoso rompecabezas. 

Caminamos hasta el lugar que había planeado, cubierto de hierba, pocos árboles a su alrededor y agradablemente desierto.  A Vicky le encantaba el contacto con la naturaleza y el sonido del viento jugando entre los árboles, y yo amaba dondequiera que ella estuviera. Para que todo fuera perfecto como lo imaginaba en mi cabeza, saqué una sábana de mi mochila y la puse en un lugar agradable, también tomé la botella de vino que traía y nos sentamos allí.

— ¿Y entonces, Gus? — Ella me miró con esos ojos color miel con curiosidad y dio una larga calada a su cigarrillo. — ¡Me muero por saber todo lo que tienes en mente!

— ¿Irías al concierto de una banda llamada "Soda Stereo"?

 — Soda Stereo... S-o-d-a S-t-e-r-e-o... ¡Suena re bien! Tengo certeza que si.

 Charly y yo decidimos ayer. Por eso no te pude contar todo antes y también porque dicen que los hombres misteriosos son más interesantes ¿no? —  Bromeé, fingiendo ser arrogante

— No lo sé... —  Vicky se rió y sacudió la cabeza.

 Ahora también tenemos un bajista, se unió a nosotros tu primo Hector.

 ¡Guau! — Expresó sorprendida. —  Hace mucho que no lo veo... Después del accidente de mi padre nos volvimos cada vez más distantes, creo que jamás lo perdonen a mamá...

 Hemos pegado carteles por toda la ciudad buscando un bajista, hicimos una audición y definitivamente es el tipo que estábamos buscando... ¿Qué te parece ir a nuestro próximo ensayo para verlo?

Envenenara Mi SoledadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora