CHILDREN OF THE MOON; Uzumaki Boruto.

˚ ༘✶ ⋆｡˚055.

˚ ⁀➷

El Señor Shikamaru me había mencionado que antes de que hiciera algo pensara en las consecuencias que podría darle a mi padre. Aquello me hizo recordar que él se iba a responsabilizar de todo lo que yo hiciera y por ello no debía de hacer nada que lo que perjudicara; sin embargo, no era lo único que me hizo recordar, porque también me recordó a unas palabras que mi padre me mencionó.

—Señor Shikamaru —le llamé con un tono de voz decidido—. Mi padre confía en mí.

El padre de Shikadai se quedó confuso, pero no tardó en demostrar sorpresa cuando ha visto que su sombra comenzaba poco a poco a desaparecer debido a que comencé a absorberla con aquel ojo que poseía en una de mis manos para así dejarnos libres y poder realizar un portal que nos llevaría al lugar donde se encontraba el séptimo.

—Nosotros traeremos al séptimo —informó Kawaki al momento en que ingresaba al portal acompañado por los demás y seguido por último por mí.

Fuimos transportados a otra dimensión que se encontraba completamente rocoso, pero no solamente había rocas en ese lugar, sino, que también se encontraba un hombre robusto protegiendo una vasija.

—¿Ese es Jigen? —preguntó Boruto.

—No. Ese es Boro —informó Kawaki mientras su expresión se tensaba—. Es casi peor que Jigen...

—Aquí solo se puede llegar usando ninjutsu espacio – temporal —mencionaba Boro mientras nos miraba a cada uno hasta fijarse completamente en mí—. Puedo saber quién los ha traído hasta aquí con solo mirarla. Eres exactamente como dicen los rumores...

—¿Dónde está el séptimo? —le interrumpió Kawaki ásperamente—. Si no me lo dices tendré que sacarte la información a golpes.

—Siempre fuiste tan insolente, pero admito que no me desagrada esa actitud tuya —soltó una risa Boro—. Aunque tu oponente sea alguien superior, no te rebajas, pero incluso tú... Acabaste confiando plenamente en este tipo, ¿no?

Boro alzó aquella vasija que tenía a su lado y con las palabras que había mencionado nos dio a entender que el séptimo Hokage se encontraba dentro, por lo que rápidamente nos alteramos e intentamos abrir dicha vasija cuando Boro nos la lanzó para que averiguáramos por nuestra cuenta si el padre de Boruto se encontraba con vida o no; sin embargo, solo Jigen podía deshacer el sello.

—El chakra del séptimo sigue aquí —informó Kawaki mientras tocaba la vasija con suavidad—. Sin duda alguna él sigue vivo aquí dentro.

—¿Qué haremos para sacarlo? —preguntó Sarada—. Solos no podremos...

—Luego pensaremos en ello —dijo Kawaki—. Primero hay que lidiar con el tipo de allá.

Cuando hemos vuelto a mirar a Boro nos encontramos con la sorpresa de que ya no se encontraba, por lo que rápidamente nos pusimos alerta y comencé a buscarlo con mi Byakugan hasta que logré verlo no muy lejos de nosotros, pero antes de avisarle a mis compañeros, he sentido como algo se acercaba con gran velocidad. Un ácido se hizo presente, así que alcé mi mano para absorberlo y que no nos dañara.

—Increíble, Tsukiko —dijo Sarada orgullosa.

—Sin duda alguna eres alguien dura de enfrentar —decía Boro dejándose ver—. Me pregunto hasta cuando podrás soportar.

Había utilizado muy constantemente aquel poder que todavía no dominaba, por lo que mi cuerpo estaba reaccionando y eso me preocupaba debido a que podría descontrolarme y dañar a mis amigos.

Sarada había ideado un pequeño y rápido plan para poder derrotar a Boro, por lo que todos esperábamos que funcionara a la perfección. Sin embargo, este no dejaba de regenerarse, así que vencerlo no sería para nada fácil.

—Ya dejen este pequeño juego y ríndanse de una vez —decía Boro mientras se volvía a regenerar—. Solo gastan energía en vano.

—No entiendes nada, viejo —le dijo Boruto de manera hosca.

Sin pensarlo demasiado Boruto, Mitsuki y Kawaki volvieron a lanzarse para enfrentarse a Boro. Entonces, cuando Sarada estaba por hacer lo mismo, la detuve para así informarle sobre lo que me había percatado.

—No lo había mencionado antes porque quería asegurarme mejor —le dije mientras veía a Boro con mi byakugan activado—. Él tiene algo en su cuerpo... Es como un núcleo y cada vez que nosotros lo atacamos se mueve por su cuerpo para no resultar dañado —le informé al momento en que la miraba—. Estoy segura de que eso tiene algo que ver con su regeneración constante.

—Ya veo —asintió—. Debemos de destruirlo, pero apenas nos acerquemos, lo moverá de lugar.

—Hay que utilizar un ataque rápido y fuerte que atraviese por completo su cuerpo... —mencioné a lo cual Sarada no tardó en verme con sorpresa. Sabía que ella se percataría inmediatamente a que me refería—. Sí. Exactamente, a ese ataque me refiero.

—¿Cómo te has enterado?

—Fue simplemente casualidad —sonreí—. Bien... ¿Unirías fuerzas conmigo, Sarada?

Sarada no tardó en arreglar sus lentes para luego sonreírme y dedicarme una mirada determinada.

—Contigo siempre.

Sarada y yo nos hemos mirado con una sonrisa para luego sostener nuestras manos mientras mirábamos fijamente nuestro objetivo. Ambas hemos comenzado a correr poco a poco hasta aumentar completamente nuestra velocidad, entonces, una electricidad azul y otra púrpura se hicieron presente, uniéndose completamente al mantener nuestras manos unidas.

—¡Chidori/Shiden!

El ataque en conjunto que hice con Sarada fue totalmente un excito debido a que habíamos logrado quitarle aquel núcleo que tenía Boro en su cuerpo. Ahora sin eso, él no podría regenerarse, así que vencerlo debería de ser más fácil.

∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙