La bella y las bestias 2. Fan fic

Extra 3: Destino

Mu Deas pasaba la mayor parte del  tiempo durmiendo al lado de Nu'er, al ser un hombre bestia águila, era demasiado sobreprotector con su pequeña cría, la vestía, peinaba, alimentaba y cuando debia tomar una siesta, él se transformaba en águila para cubrirla bajo su ala. La pequeña Nu'er sabía por instinto, la manera en que su padre cuidaba de ella, como acomodarse entre la poderosa ala de su padre, no había nada mas satisfactorio para la pequeña que el calor de su papá.

Mientras los pobladores de la villa aumentaban, las responsabilidades de Mu Deas tambien se duplicaban, casi no tenía tiempo para compartir con Ming ue y estaba la mayor parte del tiempo supervisando las murallas, las trampas y las rondas de vigilancia en la villa, Silver era el protector de Ming ue en su ausencia mientras que Harvey era la niñera de las gemelas. Una tristeza infinita se albergaba en su corazón, realmente quería pasar mas tiempo con su familia.

"¿Y si escapo con ellas y dejamos todo atras?" se preguntaba Mu Deas ultimamente, pese a que Dylan y Tom se encargaban de los suministros además de alimentar a la tribu, la responsabilidad de proteger a todos en el castillo era una carga muy pesada que realmente comenzaba a resentir.

Mientras Mu Deas observaba con melancolia el hermoso crepúsculo invernal, un par de cálidas manos rodearon su esbelta figura, un aroma herbal inconfundible para él  tranquilizó sus pensamientos.

"¿En que estas pensando esposo?" preguntó Ming ue mientras recargaba su cabeza en la amplia espalda de Mu Deas.

"Yo...las extraño mucho, casi no hemos tenido tiempo juntos, tu distribuyes alimentos y cuidas enfermos mientras yo tengo que proteger a todos en el castillo".

"Cariño, no desesperes, sabes que esta gente cuenta con nosotros, cuando todos estemos reunidos de nuevo, tu carga será mas ligera, lo prometo".

Ming ue dió un beso en la espalda de Mu Deas, él de inmediato se giró, tomó por la cintura a su compañera y la besó apasionadamente en la boca, todo su mundo era ella, todo lo que ella pidiera  él haria hasta lo imposible por complacerla.

Cuando Mu Deas liberó a Ming ue; ella respiró un poco; abrazó por el cuello al imponente macho y bajo los hermosos destellos rojizos del atardecer susurró con ternura un "Te amo". 

El corazón de Mu Deas latía con fuerza, ver  a su amada compañera bajo los rayos del sol, hasta el punto de haberse ocultado fué como una bendición de los dioses, "se cree que el crepúsculo es una hora mágica donde se cumple cualquier deseo..." esas fueron las palabras que musitó Ming ue tiempo atrás, cuando apenas se habían conocido, palabras que quedaron grabadas en su memoria ya que soñaba con el día en que ella lo aceptara como compañero y pasar el resto de su vida observando el atardecer.

"Quiero estar contigo, es dificil no pasar tiempo a tu lado..." 

"Lo sé, pero muy pronto seremos tan fuertes que nada ni nadie se atrevera a pisar estar tierras".

"¿Cuando volveré a apararme contigo?".

"Prometi que cuando la nieve se derritiera y Xiao she despertara, dormiría primero con él, cuando regrese, será tu turno de descansar, el cuidará la aldea y nosotros descansremos en la cueva del risco, donde te conocí por primera vez".

"¿Lo prometes?"

"Por el dedo meñique".

Ming ue le enseñó a Mu Deas como hacer una promesa con el dedo meñique, el sonrió tan calidamente que el corazón de Ming ue se derritió ante semejante belleza.

A diferencia de su hermana, Nu'er era demasiado tranquila, sus ojos azules eran frios como el rio congelado, imperturbables y serenos, siempre se chupaba su dedo pulgar y su cabello negro era rizado, a diferencia de su madre que tenia su cabello absolutamente lacio.

Dylan era un  macho pavo real muy vanidoso, su raro color blanco lo convertia en una criatura magnifica, sin embargo, su naturaleza era amar las cosas bellas, Ming ue era su primer gran amor, sin embargo, los machos que la custodiaban eran de niveles superiores, casi divinos, lo que volvía totalmente inalcanzable a Ming ue.

Dylan estaba muy comprometido con el desarrollo de su tribu, gracias a la alimentación que Ming ue les había proporcionado a las hembras, la mayoría podía tener tres crías, la fuerza de los pavo reales estaba creciendo y una repoblación saludable parecía una meta alcanzable.

Algunas veces, después de un duro día de trabajo, Dylan se convertía en su forma pavo real y reposaba en la copa de los árboles, sus bellísimas plumas eran tan largas y brillantes que se confundían con los carambanos de hielo que colgaban de los arboles.

Nu'er observaba con singular curiosidad la belleza de las plumas de aquel pavo real.

Lian'er notó la mirada curiosa de su hermana, entre balbuceos ellas podían entenderse.

"¿Porque miras a ese debilucho? No es digno de ti".

"Me gustan sus plumas, las de papá son negras como la noche pero las de él parecen nieve¿No te agrada?".

"¡Nunca! Un macho debe ser capaz de protegerte, eso dice mamá, un debilucho como ese no te cuidará, Silver es fuerte, hermoso y hábil como mi papá, así deben ser, no mires nada por debajo de nuestros padres".

"Harvey no es fuerte y papá lo respeta ".

"Papá dijo que los débiles sirven a los fuertes y Harvey es quien hace nuestra comida y la medicina de mamá, solo eso".

"Lian'er, te escuchas igual a Xiao she, mamá se enojará cuando te escuché".

"No importa, papá no dejará que un débil o inútil macho se nos acerque, no importa lo que mamá diga, la memoria de mi padre me enseñó como debe ser un compañero para hacerte feliz, mientras seamos bebés, todo estará bien".

"Lian'er, mamá y papá nos aman, nos protegen pero es poco ese tiempo, deja de jugar con las serpientes y pórtate bien, Harvey se cansará de ti".

Lian'er simplemente gateó hasta alejarse de Nu'er, era demasiado perezosa para seguir discutiendo, ella tenía un estándar de compañero bien definido, nada le haría cambiar de opinión.

Nu'er en cambio, observaba con profunda admiración el bello plumaje de Dylan, quizás, con el tiempo, su padre le ayudaría a encontrar un compañero que la cuide como su papá cuida a mamá, pero aún faltaba mucho por recorrer.

Dylan percibió la mirada de Nu'er, una profunda angustia nació en su alma.