Capitulo 96: Señal de humo

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Mitchell observó el entrenamiento de Paran y Mu Deas con los machos más fuertes de la aldea, se integró con ellos para entrenar, esquivar su aguijón era muy bueno para esquivar en la batalla.

Ming ue basó el diseño de las armaduras en el  pangolin, con trozos de cuero, el mas resistente que tenía , cortaron  a la medida de cada macho el peto, las hombreras y los antebrazos, cortaron el bambú en pequeños rombos y las unieron como si fueran escamas, era un trabajo minucioso y delicado, algunos machos que fabricaban cestas de bambú fueron los que crearon las mallas, luego las cubrían con savia de los árboles y los dejaban secar.

El trabajo final era una armadura endurecida , opaca pero firme, los machos  cortaban las demás pieles como guantes, para cubrir su cuerpo y que la armadura no los lastimara, sujetaban las piezas con trozos de  cuero y cartílagos.

Eran toscas, pero debido a su tiempo limitado, era mejor que nada, día y noche los machos trabajaban para elaborar las armaduras, las faldas y protectores en las piernas para tener suficiente equipo y ganar la batalla.

Mitchell estaba asombrado, la rapidez con la que se ocupaban relevos en el taller permitía avanzar en la producción, unos dormían, otros trabajaban y tomaban turnos para trabajar, las hembras llevaban la comida, los machos más jóvenes eran los que cocinaban bajo la supervisión de Ming ue y, aunque el campo fue abandonado para trabajar en la protección de la villa, valía la pena cualquier sacrificio a morir.

Cuando salió la siguiente luna llena, Xiao she y Dylan terminaron el refugio y las trampas, los topos ya habían finalizado los túneles, incluso hicieron túneles de trampa ,creando un intrincado laberinto.

Los tritones cazaron la comida , fueron de gran ayuda mientras los machos de la villa trabajaban.

Todos ayudaron a finalizar las labores del Castillo.

Paran construyó una armería, donde se guardaron los arcos, flechas, jabalinas, los cascos y armaduras , además Ming ue le pidió que juntaran la mayor cantidad de brea en ese almacén, grandes tinas de piedra fueron acomodadas en estantes.

Mitchell ayudó con el entrenamiento de los machos y también aprendió a cocinar.

Ming ue y su familia pronto partirían al territorio del Rey Lobo.

Todo estaba preparado en el Castillo, las fosas, las rutas de evacuación, las señales de fuego en las torres vigías, cada perímetro del territorio estaba cubierto, dos semanas y media fueron suficientes para que la villa de los Cuatro Reyes se convirtiera en una verdadera fortaleza, la fuerza y resistencia de los machos eran cuatro veces mayor a la de un humano promedio.

Ming ue partió junto a compañeros, sus amadas hijas fueron entregadas bajo custodia a Dylan y los tritones, en caso de ataque en cualquier territorio, ellas escaparian a las profundidades del océano junto a Blu, solo así ella tendría la esperanza de que sus amadas hijas tuvieran una probabilidad de sobrevivir.

Umi nadaba feliz con los tritones, Lian'er y Nu'er trabajaban en el Castillo, con una gran sonrisa, se despidieron de su madre y las pequeñas siguieron sus actividades diarias.

Ming ue lloraba en su corazón, separarse era doloroso pero necesario.

Al atardecer, la imponente familia de Ming ue llegó al territorio del Rey Lobo.

Los campos de cultivo estaban listos para recibir la temporada de lluvias, las casitas rústicas y coquetas rodeaban la plaza central, más allá de la plaza se encontraba el Castillo del Rey Lobo, una construcción hecha con lozas de piedra.

Todas las Bestias rodearon a Ming ue, ella estaba cubierta con la hermosa capa de piel de zorro de las nieves que Paran le obsequió, estaba montada sobre un enorme e imponente leopardo, a su lado estaba la hermosa serpiente roja y un hermoso macho de cabello plateado, detrás de ellos un enorme escorpión y, sobrevolando una gigantesca águila negra.

La bella y las bestias 2. Fan ficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora