Buena ocultando cosas

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<<Omnisciente>>

Max estaba apoyada en el marco de la puerta de su habitación, mientras su familia sacaba todas sus cosas y las metía en su maleta.

-En verdad te extrañamos -Mirdie se puso en frente suyo.

-¿Ah, sí? Pues no se nota, de hecho, parece que se divierten mucho -Le mostró una publicación de Instagram en la que todos estaban en la playa sonriendo.

-Sabes que si lo hacemos.

-Sé que si lo hicieran, no me hubieran dejado aquí.

-Nos odiarías más si te hubieramos alejado de lo que tienes aquí.

-Yo no los odio.

-¿No lo haces? -Había una cierta ilusión en su tono de voz-. Creí que...

-No siento nada hacía ustedes, no merecen mi odio, ni mi amor ni nada mío.

Mirdie no dijo nada, y simplemente se fue a seguir guardando sus cosas.

Maxine bajó a ver cómo iban las cosas allí, y asegurarse de que no se llevaran nada que no fuera suyo.

Realmente había perdido la confianza en aquellas personas a las que, por pura obligación, debía llamar "su familia".

-¿Haz pensado en algún trabajo, Max? -preguntó aquella mujer, a la cual ahora llamaba Madelyn.

-Sí, sólo me falta que me acepten -Trató de ser lo más cortante posible.

-Nosotros te mandaremos dinero como hemos hecho estos meses -informó su padre.

-Bien, Ethan. Igual, traté de no usarlo.

-¿Y eso por qué?

-No quiero nada de ustedes, pero lo necesité estos meses, lo acepto. Cuando me acepten en el trabajo, apenas lo voy a usar.

-Lo mandaré igual en caso de que tengas problemas, ¿sí?

-Haz como quieras.

Volvió a subir a su habitación y se encerró allí hasta que se fueron.

[•••]

Estaba en su cama, sin hacer nada.

Pensó en lo que había pasado con Manic estas semanas, y también en todo el tiempo que lleva en Mobius.

En verdad, los ocho meses pasaron casi volando. En tan solo un mes pasaría a cuarto año de preparatoria.

Pensó en Shadow. En cómo su atracción hacía él había aumentado en estos días, con la traición de Manic, quién aún era su novio.

Aún no le había dicho nada a nadie, y todavía no pensaba hacerlo.

Le sorprendió mucho que Sally no estuviera involucrada en la infidelidad. Sin embargo, tenía un plan. Se acercaría y formaría una amistad con la chica que estaba con Manic a escodidas, y le haría ver cómo él prefería permanecer con Max, y no con ella, que sólo era algo de unas pocas semanas.

Sabía que se dijo a sí misma que no se vengaría, pero ¿cómo contenerse, si era algo tan tentador como los labios de Shadow?

Hace algunos meses no estaba dispuesta a "arruinar" su relación con Manic por una simple atracción por Shadow. Pero, ahora, rechazaría a todos los chicos del mundo solo por probar una vez más esos labios carnosos y tentadores.

Él provocaba una sensación rara en su cuerpo, un cosquilleo satisfactorio. Algo que nadie jamás le había provocado.

Todos los días repetía una y otra vez en su mente la vez que estuvieron juntos, queriendo hacerlo nuevamente.

...

-No puedo creerlo... -Puso unos hielos en un trapo, y se acercó a Shadow.

-¿Qué? No me digas que jamás viste a alguien con un moretón -Tenía su mano sobre el ojo morado.

-No es eso -Puso con cuidado el trapo en el ojo de Shadow, y él se quejó-. Shh, será peor si no lo tratas.

-¿Qué sabrás tú?

-Al menos lo intento, ¿bien? Además, tú no sabes las veces que ayudé a Mird a curarse los moretones después de una pelea para que mis padres no se enteraran.

-No me interesa.

-Listo. Ahora vete, no quiero seguir escuchándote.

-No puedo, María no puede verme así.

-Bien, haz como quieras. Pero no te quiero en mi habitación, quédate aquí en la sala.

-No. Iré contigo.

-Como sea.

Se levantó del sofá y subió a su habitación seguida por Shadow.

Se acostó en su cama y él se sentó en puff que tenía al lado de su cama.

Había mucho silencio, ninguno sabría decir si era incómodo o no, ya que estaban perdidos en sus pensamientos.

-¿Qué haces aquí para no aburrirte? -Se levantó y se sentó en la esquina de la cama.

-Las únicas cosas que hago es hablar contigo cuando vienes, o dormir.

-¿No comes?

-Casi nunca. Sólo duermo.

-¿Vas a dormir?

-Eso planeo -Shadow hizo amague de acostarse junto a ella-. ¡Ey, ey! ¿Qué haces?

-Shh, sólo cállate.

Eso mismo hizo, se calló y dejó que Shadow hiciera lo que quería hacer.

El azabache se acostó a un lado de la eriza de púas plateadas, y la abrazó.

-¿Que no estabas con Amy? -preguntó.

-¿Sabes por qué tengo un moretón en el ojo? Porque la encontré siéndome infiel con otro tipo, entonces me peleé con él.

-No parece haber salido bien -Se burló-. Pero yo estoy con Manic.

-Tranquila. Sólo estoy abrazándote, no es nada malo. Además, él no tiene forma de enterarse.

Max soltó una risita, y cerró sus ojos para dormir. Shadow apoyó su cabeza en los hombros de Max, y también cerró sus ojos.

...

Se despertó hace varios minutos, y Shadow aún seguía abrazándola con su cabeza en su hombro.

《Soy tan jodidamente buena ocultando cosas》pensó, alagándose a sí misma. 《Pero, tal vez, debería decirle a Shadow lo de Manic.

Ideó una clase de plan en su mente, y luego esperó a que el azabache despertara.

Un rato más tarde, Shadow se despertó.

—Shadow —Lo movió un poco.

—¿Qué sucede?

—¿Crees que podríamos hablar?

Shadow la miró confundido, en el fondo, temía de lo que la eriza fuera a decirle. ¿Iba a decirle, otra vez, que no quería volver a verle? ¿Lo iba a sacar de su vida nuevamente?

—S-sí, dime, ¿qué pasa?

—Manic me fue infiel.

El azabache no dijo nada, así que Max continuó.

—Y... él lo hizo con...

Tus ojos carmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora