El Rey quiere una Reina (#6 Amores en la realeza)

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Vera:

Varias imágenes aparecen en mi cabeza empezando por cuerpos cayendo, cuerpos del enemigo y de Tierra quebrada.

Aparecen palacios y también el muro de espinas. 

Y finalmente aparecen dos cuerpos amándose, entregándose el uno al otro, pero no veo las caras...

¿Son...?

Abro los ojos y me encuentro en oscuridad, ya no mido las horas ni los dias, no recuerdo nada porque duermo cada vez que lo necesito o simplemente por aburrimiento...

Y ahora este sueño me ha recordado que no he pensado en el desde que llegue y no porque no quisiera porque ahora mismo que el esta en mi cabeza se porque no lo he hecho...

No quiero saber lo que dejare atrás y ahora que lo se, el dolor se vuelve más profundo.

(***)

Sangre y más sangre....

Y nuevamente los cuerpos amándose, esta vez debajo del agua...

Despierto de la pesadilla y me encuentro sobre la tierra debajo del tipi, desde la declaración de como será nuestras muertes no he podido descansar mi mente y el dormir no puedo tomarlo como descanso cuando esas imágenes estan cada vez que cierro los ojos.

—¿Sueños?—La voz de mi maestra la reconozco en la oscuridad.

Me rasco los ojos.

—¿O visiones?

—Sueños.—Respondo convencida de que esos momentos en pareja durante mi sueño somos el rey y yo.

—Las visiones son sueños, mi niña, asi empece los míos y ya estas en la edad.—Asegura.—¿Por qué te sorprende? Eres una elegida, una bruja al igual que yo y si los dioses te conceden mirar el futuro no debes negarlo.

—Le dijiste al Rohan que no soy pura.

—¿Y me equivoque?—Pregunta y no respondo.—¿O es que piensas que por no mantener tu pureza no eres digna de ver lo que te muestran los dioses?

—Maestra.

—De ser asi jamás hubiera tenido visiones tampoco.—Ella ríe.—¿Y pura? ¿Por qué crees que lo dije, niña?

—¿Por qué de pronto te preocupas por mi?

Ella calla por un momento.

—Mañana, pase lo que pase será voluntad de los dioses.—Dice de pronto.—Que se haga su voluntad.

—Respóndeme ¿Por qué de pronto...

—Ya lo dije, las brujas solo somos un conducto. Yo solo anuncio lo que ellos desean. 

(***)

La mañana siguiente despierto por la intromisión de Rohan y sus guerreros dentro del tipi, dos toman a mi maestra de cada brazo mientras el se me acerca a mi.

Arrastran a mi maestra por el suelo la no querer levantarse y hasta sacarla fuera del tipi, ella no deja de alabar a los dioses, pero se nota su miedo y ese miedo me lo trasmite.

Si los dioses se lo mostraron y tiene tanto miedo, nosotras....

Miro detrás de Rohan, quien no deja de parlotear y entonces lo veo, la larga madera en el medio y las demás reunidas alrededor. 

Mi cuerpo tiembla y Rohan me coge de la bata.

—Es hora de empezar la función, bruja.