Un paraíso en ruinas #2

CAPITULO 23

FUEGO

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Denisse

Todos estamos listos en nuestra posiciones, los soldados se mantienen comunicados y nos dividimos en grupos al tener en cuenta que no podemos dirigir a tantos italianos, árabes y un par de turcos entre pocas personas. Cada grupo tiene su propio líder, mientras que Kareem, Kylian, Aslan y yo somos los encargados de dirigir a todo mundo al lado de Tomasso que conoce mejor que nadie la base de la Cosa Nostra.

Nos comunicamos con los de Bretaña, Jaclyn hace todo el trabajo desde Turquía considerando que tiene a grandes soldados en cada uno de nuestros puestos que le permiten la visualización de todo desde las cámaras de ambos lugares.

—Todo va bien, los comunico con Henry.

Muevo la cabeza asintiendo a pesar de que ella no me pueda ver, Tomasso tiene una habitación propia con las cámaras que rodean todo el terreno de los italianos e incluso de varias ciudades que le permiten una vista de todos los del pueblo.

—General Leroux —su voz me calma—. Los ataques están comenzando en esta zona, estamos organizándonos y viendo que hay en su mayoría, hasta el momento, podemos detectar gran parte de rusos y nada de parte de la mafia de la Yakuza.

—Porque es posible que ellos vengan aquí —comento viendo las pantallas que nos muestran todo Italia—. Los rusos están allá, quizá Murat sí tuvo los huevos esta vez para enfrentarse a todo Bretaña, porque creyó que estaríamos los más poderosos en esa zona.

—Tienen que seguir con el fuerte —dictamina Kylian comunicándose con papá—. Murat sí es posible que vaya en ese ataque y por nuestra parte nos estemos enfrentando a la Yakuza y parte de su gobierno si es que los han traído, así que más vale que se mantengan.

—Podemos acabar antes aquí si es que son los de la Yakuza —informa Tomasso—. Sabemos a la perfección que son asustadizos, tenemos a la mafia turca, italiana y árabe de este lado. Van a tener que retirarse antes de tiempo, así que pueden volver a Bretaña.

—Tomasso tiene un punto —dictamina Aslan—. Incluso me encargué de despejar el cuadro aéreo, podemos movernos en cualquier momento, con unos simples informes vamos a tener todo el aire despejado y podemos tardar menos tiempo en llegar a Bretaña.

—Entonces que sea así —demando—. No quiero que los rusos consigan jodernos más en la central, podemos estar en todos los sitios, somos los líderes indicados para estar en todos los putos lados del mundo protegiéndolo, no vamos a dejar a los nuestros a la deriva considerando que están contra los rusos.

—Entendido, tengo que cortar, están comenzando con las detonaciones y nuestro arco de protección está funcionando, pero no creo que sea para siempre.

—Con cuidado, papá.

—Siempre, princesa.

Mi sonrisa se estira sin gracia, solo con la zozobra que me mantiene nerviosa, Kareem sigue analizando todo lo que está pasando mientras nosotros estábamos encargándonos de idear un plan si es que en Bretaña presentan más problemas.

Trajo a su esposa, la que parece más callada por la guerra, cuando nos vimos me contó en cuestión de nada que Kareem ya sabía lo del embarazo y que estaban felices. Solo que esperaba no perder a su pareja, un requerimiento silencioso que hizo, para que lo mantuviéramos con vida.

—Están acercándose —comenta Kareem—. Las señales en ciertas cámaras están fallando, que preparen los sensores de movimiento aéreo.

Kylian da la orden, moviendo a su escuadrón de aire, su primer elemento en el que se desenvuelve como si estuviéramos hablando de un simple acertijo. Mueve bastante bien a sus soldados, consiguiendo que se preparen.