CAPITULO 45

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ALERTA

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Kylian

Me adentro a la sala de operaciones en las que veo más gente de lo habitual, no me sorprende que Henry esté direccionando todo y me toma del hombro para llevarme hacia las pantallas donde no solo está la información que tienen hasta el momento sino que también tienen datos de Gran Bretaña.

—Las alarmas sonaron a las seis de la mañana, la gente está comenzando a entrar, detectaron búnkeres e incluso aviones que no pudieron detener, están en busca de misiles para que el domo se active —informa—. Tenemos que movernos o voy con los demás, tenemos que comenzar con la siguiente fase del plan.

—¿Ya comprobaron todo?

—Sí, hijo, son rusos en absoluto y lo que detectaron por parte de la central es que hay más —cambia la imagen en las pantallas—. Ubicaron coches inusuales y personas que definitivamente no son parte del turismo. Jaclyn hizo el trabajo de analizar todo, son Finlandeses.

Veo a Aslan que se acerca sin que lo llame.

—Es posible que hayan conseguido su alianza en estos días, Finlandia no suele tener demasiada acción, su jefe estaba demasiado viejo.

La bruja también se acerca.

—Cayó en el día de su boda, al estar desprotegidos, CIDFA ha estado detrás de ellos y con un capo abajo no iban a mantenerse —añade—. Al Murat tomarlo, CIDFA retrocedió, no quieren hacer demasiados movimientos si tiene que ver con nosotros ya que la central alemana nos está apoyando en otros motivos que no son luchar. Ahora que tiene bajo su dominio a los finlandeses, acaban de entrar a Bretaña y eso sabemos que significa.

La simple mención de eso rompe con mis esquemas, muy dentro de mí deseaba tener un poco más de tiempo y no será posible.

Va a pasar ya.

Miro a los soldados que ya están preparados, me llevo las manos a la cadera y los enfrento.

—El palacio de Turquía tiene que entrar en resguardo, activen la alerta amarilla así declarando que estamos en la mira, quiero que preparen las naves y todo lo necesario porque nos vamos a mover a Bretaña —dictamino severo—. Den un último chequeo a las armas que tenemos en esos aviones, dan el aviso, abordan y nos movemos de inmediato. Soldado que se quede aquí, soldado que tiene que cubrir cada puto centímetro del palacio, ¿entendido?

—Entendido, Zar.

Todos se ponen en marcha para cumplir con su parte, viendo a Henry los dos salimos para tomar privacidad en uno de los pasillos.

—Esto es lo que estimaste y no estabas tan equivocado, Murat no es tonto y lo sabemos, pero no es como tú —encaja su dedo en mi pecho, reafirmando lo que ya sé—. No tiene a toda esta gente pensando y de lleno proponiendo en este ataque, tenemos que hacerlo, tenemos que caer.

—Lo sé, hay que apresurarnos para evacuar.

Mueve la cabeza asintiendo, los dos nos dirigimos a nuestro destino, en mi caso es hacia la habitación en la que me comienzo a cambiar, escondo un par de armas.

Denisse se adentra, descalza, con ropa holgada y cómoda.

—Ya me dijeron lo que está pasando, quiero que te cuides.

—Lo haré, no voy a tardar demasiado, cuando todo esté listo me devuelvo y no tendrás que preocuparte por demasiado tiempo.

—Lo sé —llego a ella, eleva la cara para que nuestras miradas se conecten—. Tengo que salir para comprar unos medicamentos que Devil necesita, no voy a demorar mucho.

Un paraíso en ruinas #2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora